En la colelitiasis sintomática, el objetivo de la colecistectomía laparoscópica es aliviar su sintomatología. No obstante, un tercio de los pacientes continuarán con síntomas al año de la intervención. Presentamos un estudio prospectivo para determinar qué síntomas preoperatorios son predictivos de un mal resultado postoperatorio.
Pacientes y métodoUn total de 300 pacientes diagnosticados de colelitiasis han contestado, preoperatoriamente y al año de la operación, a un cuestionario donde estaban reflejados los síntomas atribuidos a la colelitiasis.
ResultadosEl 26% de los enfermos continuaban con sintomatología al año de la intervención. La pirosis, el dolor constante de localización imprecisa en hemiabdomen superior, la distensión abdominal pospandrial y las regurgitaciones fueron síntomas dispépticos con un valor estadístico significativo de mal resultado operatorio.
Conclusión. La indicación para la realización de una colecistectomía laparoscópica continúa sin estar bien definida. Los enfermos con predominio preoperatorio de síntomas dispépticos, especialmente la pirosis, son predictivos de un mal resultado postoperatorio.
The aim of laparoscopic cholecystectomy in symptomatic cholelithiasis basically consists of alleviating the symptoms. Nevertheless, one third of patients will continue to experience symptoms 1 year after the intervention. We present a prospective study to identify which preoperative symptoms are predictive of a poor postoperative result.
Patients and methodThree hundred patients diagnosed with cholelithiasis were surveyed by questionnaire before and 1 year after the operation. The questionnaire listed symptoms attributed to cholelithiasis.
ResultsOne year after the operation, 26% of the patients continued to be symptomatic. Dyspeptic symptoms with a statistically significant rate of poor surgical outcome were pyrosis, non-specific pain in the upper abdomen, postprandial abdominal distention and regurgitation.
ConclusionThe indication for laparoscopic cholecystectomy remains poorly defined. The predominance of dyspeptic symptoms, especially pyrosis, in the preoperative period is predictive of a poor postoperative result.