Material y métodos. Nuestro trabajo es un corte multicéntrico en los pacientes hospitalizados en servicios de cirugía general de 25 hospitales españoles, con el fin de obtener información relativa a la prevalencia y calidad del uso de antimicrobianos. Los antibióticos se consideraron adecuadamente prescritos si la indicación, fármaco, dosis, vía de administración y duración eran correctos. La evaluación de la adecuación de la prescripción se realizó de manera independiente por cada cirujano participante y por un infectólogo en todos los casos.
Resultados. De los 1.058 pacientes ingresados en servicios de cirugía general el día del estudio, el 27,1% tenía signos y síntomas de infección y el 42,4% recibía antibióticos. El 39% de los antibióticos prescritos se administraba con carácter profiláctico, el 52% como tratamiento empírico y sólo el 11% con documentación microbiológica. La calidad de la prescripción se consideró globalmente adecuada en el 69,6% de los casos cuando era valorada por los propios cirujanos y en el 56,6% en la valoración realizada por un infectólogo.
Conclusiones. Estos datos sugieren que existen deficiencias corregibles en el uso de los antimicrobianos en los servicios de cirugía general. La gran mayoría de dichas deficiencias son percibidas como tales por los propios cirujanos y, por tanto, son variables claramente susceptibles de intervención y mejoría.