Introducción
Durante el siglo pasado ha tenido lugar en el mundo desarrollado un fuerte aumento de la expectativa de vida. Como resultado, las personas de 65 años o más representaban en 1996 el 15% de la población de la Unión Europea (UE). Probablemente, este porcentaje se duplicará dentro de unos 30 años1-2. Si el incremento en la expectativa de vida se acompaña de cambios favorables en la salud, es tema a debate, y la discusión se centra sobre si hay un aumento de la morbilidad o se mantiene un equilibrio. Pero, sin duda, el gran desafío para la salud pública de los países europeos es mantener la calidad de vida en una población envejecida: un envejecimiento sano desde un punto de vista que consiste en optimizar la expectativa de vida y, al mismo tiempo, minimizar la morbilidad física, psíquica y social3-4.
En el proyecto HALE (Healthy Ageing: Longitudinal study in Europe) (Grant: QRLT-2000-00211. 5th Framework Programme UE), el concepto de envejecimiento sano incluye todo el espectro de mortalidad, morbilidad y calidad de vida relacionado con la salud y contribuye a aspectos culturales de envejecimiento sano comparando indicadores de salud entre países europeos. El análisis de los cambios debidos a diferencias de edad, período y cohortes en determinantes de envejecimiento sano suministran información sobre el proceso en diferentes fases de la vida. La valoración del impacto de factores biológicos y de estilo de vida, sobre todo dieta, da una visión de la proporción previsible de mortalidad, morbilidad y pérdida de funcionalidad.
Objetivos generales
Los objetivos del proyecto HALE fueron "estudiar los cambios y los determinantes del envejecimiento sano y habitual en términos de mortalidad y morbilidad, así como de funcionalidad fisiológica, cognitiva y social en 13 países europeos".
Material y métodos
Se utilizó información ya recogida sobre 7.600 personas de 10 países europeos. La disponibilidad de información procedente de 3 estudios internacionales Estudio de los Siete Países, FINE (FIN, I, NL), y SENECA (Survey in Europe on Nutrition and Elderly, a Concerted Action) nos ha permitido investigar las diferencias en indicadores específicos de un envejecimiento sano y sus determinantes biológicos, sociodemográficos y de estilo de vida. Para hacer esto posible se prepararon los siguientes bloques de trabajo:
1. Construcción de las bases de datos: indicadores y su relación con determinantes de estilo de vida.
2. Determinantes biológicos de un envejecimiento sano.
3. Determinantes dietéticos de un envejecimiento sano.
4. Cambios debidos al envejecimiento y relación con diferencias culturales utilizando indicadores de funcionalidad y su relación con estilo de vida, factores sociodemográficos, morbilidad y mortalidad.
En este artículo se presenta el trabajo realizado para los bloques 1 y 3.
Construcción de las bases de datos: indicadores y su relación con determinantes de estilo de vida
Objetivos
Finalización del Estudio de los Siete Países5-6 con datos de 4.953 varones de 5 países europeos (fig. 1): Finlandia (FIN), Grecia (GR), Italia (I), los Países Bajos (NL) y Serbia (YU) en el período 1959-2000 sobre factores biológicos de riesgo (presión arterial, índice de masa corporal [IMC], colesterol sérico y ritmo cardíaco); datos de prevalencia de enfermedad cardiovascular [ECV], diabetes mellitus, cáncer, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y asma; datos de mortalidad y de mortalidad cardiovascular.
Figura 1. Descripción del Estudio de los Siete Países incluidos en el HALE. EPOC: enfermedad pulmonar obstructiva cróni ca; FIN: Finlandia; I: Italia; IMC: índice de masa corporal; NL: Países Bajos.
Construcción de una base de datos para el estudio de un envejecimiento sano y sus determinantes con datos de 2 estudios longitudinales: FINE7 (fig. 2) y SENECA8 (fig. 3) de una muestra de 3.805 varones y mujeres de 13 países europeos: Bélgica (B), Suiza (CH), Dinamarca (DK), España (E), Francia (F), FIN, I, NL, Portugal (P), Polonia (PL), Hungría (H), YU y GR, durante el período 1988-2000 sobre: indicadores de envejecimiento sano (mortalidad, morbilidad, salud autopercibida), funcionalidad (física, psicológica, cognitiva y social) y determinantes sociodemográficos (país, edad, sexo, estado socioeconómico y estado civil), dieta (modelo dietético, nutrientes, estado nutricional), estilo de vida (actividad física, tabaco, alcohol) y determinantes biológicos (presión arterial, colesterol sérico e IMC).
Figura 2. Descripción del estudio FINE, llevado a cabo a partir del Estudio de los Siete Países. I: Italia; FIN: Finlandia; NL: Países Bajos.
Figura 3. Descripción del estudio SENECA. B: Bélgica; CH: Suiza; DK: Dinamarca; E: España; F: Francia; I: Italia; NL: Países Bajos; P: Portugal; PL: Polonia.
Finalmente se construyeron 2 bases de datos combinando información longitudinal recogida durante el período 1959-2000 (una del Estudio de los Siete Países, y otra con los estudios FINE y SENECA) de 13 países europeos. Los datos se obtuvieron mediante exámenes físicos, análisis de sangre, entrevistas, cuestionarios y certificados de defunción. Las técnicas seguidas para cada parámetro y los indicadores de envejecimiento sano fueron suplementados con información sobre determinantes sociodemográficos, biológicos, dietéticos y de estilo de vida9.
La comparabilidad y la armonización de los datos fueron partes sustanciales e importantes de este aspecto del estudio. Aunque toda la información se obtuvo de forma estandarizada para cada uno de los 3 estudios, esta armonización fue necesaria antes de proceder a su análisis.
En primer lugar se hizo un inventario de todos los detalles y aspectos de los conjuntos de datos disponibles y de la metodología usada para su obtención. En segundo lugar, las decisiones sobre cómo hacer frente a las diferencias en el análisis de los datos se tomaron en colaboración con todos los participantes del estudio. Todo ello dio lugar a:
Base 1
Se compuso con los datos de las cohortes europeas del Estudio de los Siete Países de determinantes biológicos de un envejecimiento sano. Para el análisis de mortalidad se utilizaron los datos de los últimos 35 años coincidiendo el último de los 35 con el año final del proyecto HALE.
Población estudiada
La información del Estudio de los Siete Países se deriva de las cohortes europeas formadas por 4.047 varones de 40-59 años evaluados y examinados por primera vez en 1960 de la siguiente procedencia:
FIN: 2, de 2 áreas rurales del este y oeste del país; NL: 1, de Zutphen;
I: 2, de Crevalcore y Montegiorgio; YU: 3, de Velika, Krsna y Zrenjanin, y GR: 2, de Creta y Corfú.
Base 2
Incluía a participantes de los estudios SENECA y FINE. El SENECA empezó en 1988 en una muestra al azar estratificada por sexo y edad de habitantes nacidos entre 1913 y 1918 en 19 ciudades europeas. Se incluyeron 12 centros que llevaron a cabo un seguimiento de mortalidad y se repitieron las pruebas en los supervivientes en 1993 y 1999. Las ciudades elegidas fueron: Hamme (B); Roskilde (DK); Strasbourg (F); Valence (F); Iraklion (GR); Monor (H); Padua (I); Culemborg (NL); Vila Franca de Xira (P); Betanzos (E); Yverdon, Burgdorf y Bellinzona (CH).
El estudio FINE10 incluyó a los supervivientes de 5 cohortes del Estudio de los Siete Países: Homantsi, Pöyttya y Melillä (FIN); Crevalcore y Montegiorgio (I), y Zutphen (NL).
El estudio FINE (fig. 3) empezó en 1984 y continuó hasta el 2000 y se reclutó a a varones nacidos entre 1900 y 1920. Para el proyecto HALE se utilizaron las medidas obtenidas entre 1989 y 1991 en varones con edades comprendidas entre los 70 y los 90 años en el primer examen y se repitieron en 1994-1995 y en 1999-2000.
La información de los parámetros obtenidos en el estudio HALE se detalla en la figura 4.
Figura 4. Conjunto de datos del estudio HALE. CV: cardiovascular; HDL: lipoproteínas de alta densidad; IM: infarto de miocardio.
Determinantes dietéticos de un envejecimiento sano
Objetivos
Esta parte del proyecto HALE se centró en 4 objetivos:
Investigar la ingesta de nutrientes y de biomarcadores de nutrientes en relación con la salud percibida; funcionalidad psicológica y cognitiva, y mortalidad por cualquier causa en personas de edad de países del norte y sur de Europa.
Investigar la relación entre estatus nutricional (peso e indicadores de composición corporal) y salud percibida, funcionalidad psicológica y cognitiva, y mortalidad por cualquier causa en países del norte y sur de Europa.
Desarrollar un baremo de dieta sana para conocer la relación entre modelo dietético y salud percibida y mortalidad por cualquier causa en países del norte y sur de Europa.
Investigar la interrelación entre dieta y actividad física, tabaco y alcohol en relación con salud percibida y funcionalidad psicológica y cognitiva y mortalidad por cualquier causa en personas de edad de países del norte y sur de Europa.
Las asociaciones entre dieta, biomarcadores de la ingesta de nutrientes, estado nutricional, salud, funcionalidad y mortalidad se estudiaron en los estudios FINE y SENECA.
La definición de los 13 países participantes en ambos estudios en norte, centro y sur fue la siguiente:
Países: norte: Finlandia (Este) y Finlandia (Oeste); Roskilde (DK); Hamme (B); Haguenau (F); Zutphen (NL), Culemborg (NL); Burgdorf (CH). Central: Marki (PL), Chateau-Renault (F); Belgrado, Velica Krsna, Zrenjanin (YU). Sur: Montegiorgio (I), Crevalcore (I), Romans (F), Renault (F); Bellizona (CH), Yverdon (CH), Betanzos (E), Coimbra (P), Vila Franca de Xira (P), Archanes (GR), Padua (I).
El estudio FINE tiene información sobre varones de 70-89 años en 1990 y el SENECA de varones y mujeres de 70-75 años de 1988 a 1998 (tabla 1). Ambos estudios recogieron datos, repetidamente, sobre dieta, actividad física, alcohol, tabaco, salud subjetiva y funcionalidad física y cognitiva. Para las variables dietéticas se utilizó el método de la historia dietética. Los datos bioquímicos indicadores de la ingesta de nutrientes se recogieron sobre todo del estudio SENECA. Las medidas repe tidas de dieta y de estado nutricional se relacionaron con medidas repetidas de funcionalidad y 10 años de mortalidad usando el índice de regresión COX y modelos repetitivos de medidas en los análisis combinados de los grandes conjuntos de datos.
Se utilizaron agrupaciones y factores de análisis para identificar modelos dietéticos específicos y su relación con un envejecimiento sano. Se desarrollaron y adaptaron factores de dieta sana para personas de edad a partir de los desarrollados para adultos más jóvenes.
Las interrelaciones de cambios de peso, indicadores de composición corporal, dieta, actividad física, tabaco y consumo de alcohol se tipificaron en relación con salud y mortalidad.
Resultados y discusión
Con respecto a la ingesta de nutrientes y de biomarcadores:
Nutrientes
Los análisis preliminares de los datos indicaron que entre 81 y 86 años decrece la ingesta dietética comparada con la de 10 años antes entre las cohortes de Haguenau en el norte y Romans en el sur de Francia. En todos los períodos, en general la ingesta diaria fue baja comparada con las ingestas diarias recomendadas para las personas de edad11.
Homocisteinemia
Con respecto a las concentraciones séricas de homocisteína se observó un gradiente norte-sur. Los menores valores correspondían a P, E y GR, mientras que en los del centro y norte de Europa, a NL, B y PL; los valores medios eran, como mínimo, 4 µmol/l más altos. El ácido fólico y la vitamina B12 también tenían concentraciones más altas en los países del sur. La concentración media de homocisteína para todos los centros participantes fue 16,0 µmol/l, por encima del valor considerado de alto riesgo: 14,0 µmol/l. En los países con valores bajos las mujeres tenían concentraciones menores que los varones. Después del período de seguimiento de 10 años, los valores de homocisteína subían marcadamente en los países con concentraciones más altas, mientras que en los de concentraciones más bajas (E y P) no se observaron cambios12.
Antioxidantes
La mortalidad cardiovascular estuvo significativamente relacionada con las concentraciones de carotenos *, ß, *, entre los participantes del estudio SENECA. El riesgo relativo por incremento de 0,5 µmol/l de caroteno fue 0,79 (intervalo de confianza [IC] del 95%, 0,63-1,00). Se observó una asociación inversa, pero no significativa, con ictus y fallo cardíaco, pero no con ECV. La reducción en el riesgo de muerte cardiovascular estaba limitada a los sujetos delgados con un IMC < 25. La asociación entre los valores de antioxidantes y mortalidad cardiovascular no difería entre fumadores y no fumadores.
Los valores de carotenos en sangre están inversamente relacionados con muerte por cualquier causa y cardiovascular.
Las concentraciones de *-tocoferol en sangre no están relacionadas con mortalidad por cualquier causa ni cardiovascular.
El consumo de suplementos de minerales y vitaminas no mostró un efecto favorable en la mortalidad por cualquier causa. En varones y mujeres fumadores se encontró mayor mortalidad entre los que tomaban suplementos: hazard ratio (HR) = 1,57 (IC del 95%, 1,08-2,29) y HR = 1,54 (IC del 95%, 0,71-3,36), respectivamente, aun teniendo en cuenta los factores confusores. En varones y mujeres no fumadores no se encontró relación significativa entre el uso de suplementos y el riesgo de mortalidad: HR = 0,79 (IC del 95%, 0,52-1,19) y 0,90 (IC del 95%, 0,59-0,35), respectivamente13.
Antropometría
Durante el período de 10 años, los cambios en la muestra del SENECA referentes a talla, peso y circunferencias fueron pequeños o insignificantes. La altura media decreció entre 1,5-2 cm y aunque los cambios en la distribución del peso corporal, para el conjunto, fueron mayores, los valores medios eran cercanos a 0. Una clara disminución del peso, 2,6-4,2 kg, sólo se encontró en 3 de las 9 ciudades participantes: Betanzos en E, en varones y mujeres; Yuerdon en C, sólo en mujeres; Roskilde en DK, sólo en mujeres. La pérdida de peso estuvo asociada significativamente con cifras mas altas de mortalidad en varones (riesgo relativo [RR] = 2,2; p < 0,0001).
Los cambios en la circunferencia del brazo fueron pequeños mientras que los de la circunferencia de cintura aumentaron 3-4 cm14.
Dieta sana
Se utilizaron 3 medidas del conjunto de calidad de la dieta: factor dieta mediterránea (FDM), basado en las características de la dieta mediterránea griega; índice de dieta mediterránea italiana (DMI), tal como se observó en el sur de Italia en 1957 (Siete Países), e indicadores de dieta sana (IDS) que valora la coincidencia con las pautas de la Organización Mundial de la Salud para la prevención de enfermedades crónicas15-16. Se examinó la asociación entre modelos de mortalidad y dietéticos usando los 3 índices. Tanto el FDM (HR = 0,83 [IC del 95%, 0,75-0,92]), como el DMI (HR = 0,89 [IC del 95%, 0,81-0,89]) y el IDS (HR = 0,89 [IC del 95%, 0,81-0,98]) estaban asociados inversamente con mortalidad por cualquier causa. Se hicieron ajustes por edad, sexo, consumo de alcohol, actividad física, tabaco, nivel de estudios, IMC y enfermedades crónicas17.
Se identificaron también los modelos dietéticos de la muestra del HALE mediante un análisis basado en 11 ítems. Se llegó a una clasificación en alimentos mayoritarios en 3 modelos: a) caracterizado por altas ingestas de fruta y hortalizas, pescado y quesos, y bajas ingestas de azúcar y alcohol; b) altas ingestas de azúcar y productos lácteos, y bajas ingestas de alcohol, y c) alto consumo de aceites y grasas y carne y bajas de cereales. Estos 3 modelos estaban asociados significativamente con la región geográfica (p < 0,001) y con el grado de instrucción (p < 0,001)18.
Una dieta de tipo mediterráneo disminuye la mortalidad coronaria un 40% y la mortalidad por cualquier causa un 20%.
Tabaco
La influencia del tabaco sobre las concentraciones plasmáticas de antioxidantes (carotenos, retinol, *-tocoferol y ácido fólico) se estudió separadamente en varones y en mujeres. Los varones tenían concentraciones más bajas de carotenos (P50) (0,34 µmol/l; p < 0,001); retinol (1,98 mmol/l; p < 0,01); *-tocoferol (26,93 µmol/l; p < 0,1) y ácido fólico (11,78 µmol/l; p < 0,05) que los ex fumadores (0,46; 2,15; 26,68; y 12,14 µmol/l, respectivamente) y no fumadores (0,53; 2,0; 28,79 y 12,91 µmol/l, respectivamente). No se encontró influencia en mujeres, excepto para el ácido fólico (12,69; 13,37 y 14,73 µmol/l,) en fumadoras y no fumadoras, respectivamente. La relación tocoferol/colesterol > 5,2 mmol/mol fue más alta entre no fumadores (el 71% para varones y mujeres) que en fumadores (el 58 y el 69% para varones y mujeres, respectivamente)13.
Los valores séricos de homocisteína fueron significativamente más altos (p < 0,05) en fumadores (16,6 [0,4] µmol/l) y ex fumadores (16,2 [0,3] µmol/l) que en los no fumadores (13,8 [0,2] µmol/l)12.
No fumar comparado con fumar decrece el riesgo de mortalidad un 35%.
Alcohol
Después de ajustar por factores confundentes, las concentraciones de homocisteína estaban asociadas a consumo total de alcohol (r = 0,16; p < 0,005), consumo de vino (r = 0,15; p < 0,005) y consumo de licores (r = 0,07; p < 0,005), pero no con cervezas (r = 0,02).
Al distribuir la muestra según el consumo de alcohol se observó una clara tendencia positiva en las concentraciones de homocisteína con el consumo alto de alcohol, especialmente para los consumidores de más de 30 g/día. Los factores de riesgo tradicionales de ECV (colesterol, colesterol unido a lipoproteínas de alta densidad, triglicéridos, albúmina) no estaban asociados con la homocisteinemia19.
El consumo moderado de alcohol disminuye el riesgo de mortalidad un 20%.
La mortalidad por cualquier causa estaba asociada significativamente con consumo de DM (HR = 0,77: IC del 95%, 0,68-0,88); consumo moderado de alcohol (HR = 0,78; IC del 95%, 0,67-0,91), actividad física (HR = 0,63; IC del 95%, 0,55-0,72) y no fumar (HR = 0,65; IC del 95%, 0,57-0,75). Los resultados fueron similares para enfermedad coronaria, ECV y cáncer. La combinación de los 4 factores bajaron el índice de mortalidad por cualquier causa a 0,35 (IC del 95%, 0,28-0,44). En conjunto, el 59% de todas las defunciones, el 64% de defunción por enfermedad coronaria, el 60% de ECV y el 60% por cáncer puede atribuirse a no practicar este modelo de bajo riesgo.
Conclusiones
La disminución del peso corporal y las concentraciones bajas de antioxidantes en sangre están relacionadas con la mortalidad de personas de edad avanzada.
El tipo de dieta, sin tener en cuenta los suplementos, predice la salud en personas edad.
No fumar y el consumo moderado de alcohol disminuyen el riesgo de mortalidad en personas de edad.
La actividad física disminuye el riesgo de mortalidad un 35% y mejora la funcionalidad física.
Hay diferencias regionales con respecto a la salud en Europa; la dieta y el estatus de micronutrientes son mejores en los países del sur.
Recomendaciones
Por tanto, y según estas conclusiones, las recomendaciones para un envejecimiento sano basadas en los resultados del proyecto HALE son:
Mantener el peso corporal.
Consumir una dieta de tipo mediterráneo.
Estar físicamente activos, preferentemente 30 min/día.
Si se consume alcohol, hacerlo con moderación.
No fumar.
Los suplementos de minerales y vitaminas no disminuyen el riesgo de mortalidad en las personas de edad.
Agradecimientos
A los siguientes investigadores que han participado en el proyecto HALE: Bélgica: G. Backer, University of Ghent; Dinamarca: M. Scholl, Bispebjerk Hospital, Copenhague; Finlandia: A. Nissinen, National Public Health Institute, Helsinki; Francia: M. Ferry, Centre Hospitalier de Valence, Valence; J.L. Schlienger, Université Louis Pasteur, Strasbourg; Grecia: A. Kafatos, University of Crete, Iraklion-Crete; Hungría: G. Zajkas, Jozsef Fodor National Center for Public Health, National Institute of Food-Hygiene and Nutrition, Budapest; Italia: G. Enzi, Università degli Studi di Padova, Padova; F. Fidanza, Perugia; S. Giampaoli, Istituto Superiori di Sanità, Roma; G. Maiani, Istituto Nazionale di Ricerca per gli Alimenti e la Nutrizione, Roma, y A. Menotti, Associazione per la Ricerca Cardiologica, Roma; Países Bajos: L. de Groot, Wageningen University, Wageningen; D. Krombout, National Institute of Public Health and the Environment, Bilthoven; W. van Staveren, Wageningen University, Wageningen, y M. Tijhuis, National Institute for Public and the Environment, Bilthoven; Polonia: A. Brzozowka, Warsaw Agricultural University, Warsaw; Portugal: J.A. Amorin Cruz, Instituto Nacional de Saude, Lisboa; Suiza: D. Schlettwein-Gsell, Basel.