Introducción: La carboximaltosa férrica (CMF) es una formulación de hierro intravenosa (iv) segura y de fácil administración, de la que se puede administrar hasta un gramo iv en una sola sesión, lo que permite ahorro de tiempo de los pacientes y de enfermería. Presentamos los resultados de su administración en una consulta de enfermedad renal crónica (ERCA), analizando sus resultados y la repercusión en la carga de trabajo del personal de enfermería.
Material y métodos: Se analizó a todos los pacientes en seguimiento en consulta de ERCA en nuestro centro desde enero de 2011 hasta diciembre de 2014 que habían recibido CMF iv. Se registraron sus datos basales y los resultados clínicos y analíticos a los 6 meses.
Resultados: Fueron identificados 85 pacientes en ese periodo. Edad media de 72±12 años, con un filtrado glomerular estimado basal de 28±11ml/min y a los 6 meses de 30±11 (p: n.s). La hemoglobina basal y a los 6 meses fueron de 10±4 y 11±3g/dl, respectivamente (p: <0,001). El hematocrito basal y final fueron: 34±4 vs. 39±6% (p: <0,001). Los niveles de ferritina e índice de saturación de transferrina basales vs. 6 meses fueron respectivamente: 88±97 vs. 308±327 ng/ml (p: <0,001) y 11,2±6 vs. 22,3±11 (p: <0,001). Dado que el tiempo medio de administración de cualquier formulación de hierro iv es de 30 min, la estimación según el número de administraciones es de un ahorro de 85 y 170 h en estos 4 años si se compara con formulaciones que requieren de 3 a 5 sesiones, respectivamente. A su vez el número de punciones se ha reducido, sin observarse complicaciones asociadas.
Conclusiones: La CMF es segura y eficaz, con una recuperación de los niveles de hemoglobina y de los depósitos de hierro. Su facilidad de administración ha permitido ahorros sustanciales de tiempo. Esto, junto a sus escasos efectos secundarios, la hacen idónea para la administración ambulatoria.