Sr. Director: Staphylococcus lugdunensis es un estafilococo coagulasa negativa que desde su reciente descripción en 19881 ha pasado de hallazgo ocasional a tener un notable incremento en frecuencia de aislamiento. Es posible, sin embargo, que siga subestimada su incidencia, tanto por su confusión con Staphylococcus aureus como por su inclusión en el grupo estafilococo coagulasa negativa. Describimos un caso de osteomielitis crónica por S. lugdunensis.
Varón de 39 años, que acudió a consulta para estudio de síndrome febril. El paciente había sufrido, 9 meses antes, una fractura cerrada de húmero izquierdo que precisó osteosíntesis intramedular. En el momento de la consulta, el paciente refería sensación febril, no termometrada, de predominio vespertino de 10 días de evolución y dolor tolerable en el hombro que comenzó tras la intervención quirúrgica. No había ningún otro dato de focalidad en la anamnesis, y en la exploración se encontraba únicamente un discreto aumento de la temperatura local en la cicatriz quirúrgica. En el estudio analítico existía una VSG de 31 mm/h y una PCR de 50 mg/l (5 mg/l), siendo el resto normal. En la radiografía de húmero se observa una formación de callo óseo y una imagen de reacción perióstica en la punta distal del clavo. Ante la sospecha clínica de osteomielitis se realizó un estudio gammagráfico óseo combinado (tecnecio 99/galio) que objetivaron hipercaptación en el foco de fractura, indicativa de proceso infeccioso crónico, motivo por el cual se decidió su ingreso hospitalario para retirada de material de osteosíntesis. Antes de la cirugía, se abrió espontáneamente la herida quirúrgica; se remitió para cultivo el exudado purulento y se inició tratamiento empírico con cefazolina y tobramicina a dosis terapéuticas. A los 7 días se realizó la retirada de material, que se envió a cultivar. Los resultados preliminares informaron un crecimiento de estafilococo coagulasa negativa, cambiándose el tratamiento por teicoplanina. El paciente completa 6 semanas de tratamiento antibiótico con excelente respuesta y tolerancia. El informe de los cultivos definitivo fue de S. lugdunensis sensible a meticilina en todas las muestras. La identificación preliminar del microorganismo se realizó mediante la prueba de coagulasa rápida, pero por las características macroscópicas del cultivo, alta sensibilidad y su implicación clínica se remitieron al hospital de referencia donde se confirmó su sensibilidad y se identificó el microorganismo.
S. lugdunensis fue asociado inicialmente a endocarditis2 y posteriormente a infecciones leves de la piel y los tejidos blandos3. Se ha descrito en peritonitis4, artritis5, osteomielitis crónica6,7, infección de prótesis valvulares y bacteriemias8. Recientemente, en una revisión de 25 casos publicada en esta Revista, se describe en mastitis no puerperales9. La subestimación de este patógeno en centros pequeños e incluso medianos es bastante probable, por la práctica habitual de clasificar a los estaficocos con una prueba de coagulasa rápida en S. aureus los positivos y estafilococo coagulasa negativo el resto. Según este esquema S. lugdunensis podría ser clasificado en ambos grupos, pues aunque es coagulasa negativo, positiva en muchas ocasiones los tests rápidos por la presencia de cumpling factor. En nuestro caso, la negatividad del test rápido, junto a la morfología del cultivo y sensibilidad, semejante a S. aureus, nos hizo requerir una identificación completa.
Como conclusión, podemos afirmar que parece conveniente recurrir a sistemas de identificación más completos para estafilococos, al menos en caso de sospecha microbiológica o especial interés clínico, incluso para pequeños laboratorios.