Validar las escalas es necesario para garantizar que son apropiadas para el objetivo para el que fueron creadas.
ObjetivoValidar la versión en castellano del Nursing Activities Score (NAS).
MetodologíaEstudio observacional y prospectivo que incluye a 1.045 pacientes ingresados en una unidad médico-quirúrgica y una unidad de grandes quemados en 2006. La enfermera encargada del paciente valoró cargas de trabajo mediante el Nine Equivalent of Nursing Manpower use Score y el NAS. Para evaluar la consistencia interna de las mediciones del NAS se calcularon las correlaciones ítem-test, el alfa de Cronbach y alfa de Cronbach corregido, al omitir cada uno de los ítems. La fiabilidad intraobservador y la interobservador se valoraron con el coeficiente de correlación intraclase mediante la visualización de grabaciones y el Kappa (fiabilidad interobservador). Para analizar la validez interna se realizó un análisis factorial de componentes principales, y para la convergente el coeficiente de correlación de Spearman de los valores obtenidos de las escalas Nine Equivalent of Nursing Manpower use Score y NAS-castellano.
ResultadosPara la consistencia interna se analizaron 164 cuestionarios calculando un alfa de Cronbach de 0,373. El coeficiente de correlación intraclase para la estimación de la fiabilidad intraobservador fue 0,837 (IC 95%: 0,466-0,950) y 0,662 (IC 95%: 0,033-0,882) para la fiabilidad interobservador. El kappa estimado fue 0,371. Para la validez interna, el análisis factorial exploratorio mostró que el primer ítem explicaba el 58,9% de la varianza del cuestionario. Para la validez convergente se incluyeron 1.006 cuestionarios y se observó un coeficiente de correlación de Spearman de 0,746.
ConclusionesLas propiedades psicométricas del NAS-castellano son aceptables.
Validating workload scores ensures that they are appropriate for the purpose for which they were developed.
ObjectiveTo validate the Nursing Activities Score (NAS) Spanish version.
MethodologyObservational and prospective study. 1,045 patients who were admitted to a medical-surgical unit and a serious burns unit in 2006 were included. The nurse in charge assessed patient workloads by Nine Equivalent of Nursing Manpower use Score and NAS. To assess the internal consistency of the measurements of NAS, item-test correlations, Cronbach's α and Cronbach's α corrected by omitting each of the items were calculated. The intraobserver and interobserver reliability were assessed with the intraclass correlation coefficient by viewing recordings and Kappa (interobserver reliability) was estimated. For the analysis of internal validity, a factorial principal components analysis was performed. Convergent validity was assessed using the Spearman correlation coefficient values obtained from the Nine Equivalent of Nursing Manpower use Score and Spanish-NAS scales.
ResultsFor internal consistency, 164 questionnaires were analysed and a Cronbach's α of 0.373 was calculated. The intraclass correlation coefficient for intraobserver reliability estimate was 0.837 (95% IC: 0.466-0.950) and 0.662 (95% IC: 0.033-0.882) for interobserver reliability. The estimated kappa was 0.371. For internal validity, exploratory factor analysis showed that the first item explained 58.9% of the variance of the questionnaire. For convergent validity 1006 questionnaires were included and a Spearman correlation coefficient of 0.746 was observed.
ConclusionsThe psychometric properties of Spanish-NAS are acceptable.
Existen diversas escalas que miden las cargas de trabajo de enfermería. Unas miden el esfuerzo terapéutico y otras la actividad asistencial. La Nursing Activities Score evalúa el rol autónomo enfermero, mide la actividad asistencial de las enfermeras.
Esta escala fue publicada en 2003 en inglés y adaptada al castellano en 2013. Es imprescindible determinar su validez y fiabilidad, antes de ser utilizada en la práctica diaria, para garantizar que mide realmente aquello para lo que fue diseñada.
¿Implicaciones del estudio?Determinar la validez de la medición de las cargas asistenciales en pacientes críticos estimadas con la escala Nursing Activities Score versión castellana.
La adecuación de los recursos materiales y humanos a la carga asistencial de las unidades de cuidados intensivos debería ser uno de los principales objetivos de los gestores sanitarios1. El uso de escalas que valoran cargas de trabajo de enfermería podría ser de gran utilidad para esta gestión de recursos. Con la publicación, por Cullen et al., del Therapeutic Intervention Scoring System (TISS)2, con sus actualizaciones3 y simplificaciones4,5 posteriores, se consigue relacionar a pacientes con similar gravedad con la carga asistencial de enfermería. Este sistema selecciona 76 actividades terapéuticas en su primera versión, reducidas a 28 en la última, que describen la carga asistencial de enfermería.
Reis Miranda et al.5 publican el Nine Equivalent of Nursing Manpower use Score (NEMS) en 1997, una nueva escala que tiene su origen en el TISS y valora el esfuerzo terapéutico en los pacientes críticos sirviéndose de 9 ítems. Rothen et al.6, en un análisis realizado en 1999, encuentran que el NEMS y el TISS tienen una buena correlación. Sin embargo, muchas de las actividades enfermeras no están relacionadas con la gravedad de los pacientes, por lo que medir el esfuerzo terapéutico podría no reflejar la carga real del trabajo de enfermería. En 2003 Miranda et al.7 publican el Nursing Activities Score (NAS), escala que se diferencia de las anteriores y que adquiere relevancia porque asigna tiempos a las actividades desarrolladas por las enfermeras y las relaciona con la atención al paciente, es decir evalúa el rol autónomo de la enfermera.
El NAS es un instrumento para medir las actividades enfermeras que podría sustituir a escalas previas como TISS-28 y NEMS. Miranda et al.7 compararon el NAS con el TISS-28 y observaron que el primero era más representativo del uso del tiempo de enfermería, independientemente de la gravedad del proceso patológico que afectaba al paciente. Además, en el NAS se incluyen 5 nuevas actividades (monitorización, higiene, movilización, apoyo a familiares y pacientes, y tareas administrativas) que discriminan mejor las distintas tareas realizadas por la enfermera. Por todo ello, el NAS se puede considerar como un instrumento útil7 para medir las actividades enfermeras en unidades de cuidados críticos.
Esta escala, originalmente en inglés, requería una adaptación transcultural al castellano8, pues fue elaborada y aplicada en países de habla y cultura diferentes a la nuestra, que permitiera obtener un instrumento adaptado, en castellano, que equivaliese al original.
Una vez obtenida la escala en castellano, es preciso validarla para que sea posible garantizar el objetivo para el que fue diseñada: valorar cargas de trabajo de enfermería.
El objetivo de este estudio es validar la versión castellana del NAS mediante la medición de sus propiedades psicométricas.
MetodologíaEstudio observacional prospectivo realizado en un Servicio de Cuidados Intensivos, dividido en 3 unidades, 2 unidades de críticos polivalentes (de 10 y 8 camas respectivamente) y una unidad de Grandes Quemados (de 6 camas).
Criterios de inclusiónFueron incluidos en el estudio todos los pacientes que ingresaron en el Servicio de Cuidados Intensivos y Grandes Quemados durante el año 2006.
VariablesSe recogieron variables demográficas de los pacientes (edad, sexo), su diagnóstico médico al ingreso, el índice de gravedad estimado por el Simplified Acute Physiology Score (SAPS II) y la estimación del trabajo de enfermería realizado con el NEMS y el NAS-castellano.
Descripción de las herramientas- -
SAPS II: índice de gravedad que incluye 17 variables, la edad, el motivo de ingreso y 3 variables relacionadas con la enfermedad subyacente, así como el peor valor de 12 variables fisiológicas en las primeras 24h tras del ingreso. El rango de puntuación oscila entre 0 puntos (mejor valor) y 163 puntos (peor valor).
- -
NAS-castellano (anexo 1): consta de 23 ítems de los cuales 5 (1, 4, 6, 7 y 8) se subdividen en 3 subítems excluyentes entre sí. Al sumar las puntuaciones obtenidas en cada uno de ellos se obtiene un resultado dentro de un rango, comprendido entre el 0 y el 177%, que proporciona la valoración de la carga de trabajo de un paciente. Así, si obtuviéramos una puntuación del 50%, significaría que la ratio enfermera-paciente debería ser de 1:2. Una puntuación de 100 corresponde a un 100% de tiempo de cuidado, lo que se traduce en una ratio 1:1, mientras que una puntuación superior al 100% supondría que el cuidado de ese paciente requiere más de una enfermera.
- -
NEMS (anexo 2): consta de 9 ítems con los que se mide el esfuerzo terapéutico de los pacientes de cuidados críticos. El rango de puntuación oscila entre 0 y 56 puntos. Según esta escala, cada enfermera por turno podría desarrollar una actividad equivalente a 46 puntos9.
La consistencia interna permite estimar la fiabilidad de un instrumento de medida mediante un conjunto de ítems que se espera que midan el mismo constructo o dimensión teórica. Ha sido calculada utilizando las correlaciones ítem-test, el coeficiente alfa de Cronbach y el coeficiente alfa de Cronbach corregido en el que se omiten cada uno de los ítems de las mediciones del NAS. Se consideró que un ítem podría ser eliminado cuando el coeficiente alfa de Cronbach se incrementara en más de 0,10, lo que supone su eliminación de la escala, o cuando alcanzara una correlación ítem-test<0,30 (el cuestionario se considera aceptable si presenta un valor de 0,7 o mayor).
Para estimar la fiabilidad intraobservador e interobservador se realizaron grabaciones con videocámara fija (previo consentimiento informado de familiares y enfermeras) en diferentes turnos de enfermería cuyas cargas de trabajo se midieron con la versión castellana del NAS. Estas grabaciones fueron, posteriormente, visualizadas por la misma enfermera y por 2 miembros del equipo investigador para medir la fiabilidad interobservador.
La fiabilidad intraobservador, medida mediante el análisis test-retest, estima el grado de estabilidad que hay entre las puntuaciones totales obtenidas en la primera valoración y las puntuaciones totales de la segunda valoración (estabilidad de la medida en un periodo de tiempo). La estimación se ha realizado utilizando el coeficiente de correlación intraclase (CCI), que considera una muy buena correlación los valores superiores a 0,90; buena para aquellos que van desde 0,71 a 0,90; moderada en valores de 0,51 a 0,70; mediocre cuando oscila entre 0,31 y 0,50; y mala o nula si los valores son inferiores a 0,3110.
La fiabilidad interobservador es el grado de concordancia de los resultados con un referente que, en nuestro estudio, equivale a las valoraciones obtenidas tras la visualización de las grabaciones por 2 miembros del equipo investigador que han calculado el CCI. El total de concordancia se obtiene de la suma de los cuadros en los que coinciden las puntuaciones de los observadores, para cuya valoración se midió el índice Kappa, que considera muy buena concordancia los valores que oscilan entre 0,81 y 1; buena concordancia en valores entre 0,61 y 0,80; moderada entre 0,41 y 0,60; débil concordancia en aquellos que van desde 0,21 a 0,40; y concordancia pobre en valores inferiores a 0,2011.
ValidezLa validez interna es la capacidad de un instrumento para medir lo que pretende medir según su relación con otras mediciones que están de acuerdo con hipótesis teóricas derivadas y que se refieren a los constructos utilizados12. Se realizó un análisis factorial de componentes principales (prueba de Kaiser-Meyer-Olkin), técnica estadística multivariante que sirve para estudiar las dimensiones que subyacen a las relaciones entre varias variables.
Se estimó la validez convergente utilizando el coeficiente de correlación de Spearman de los valores obtenidos tras la aplicación de las escalas NEMS y NAS versión castellana, medidos por las enfermeras responsables del paciente en cada uno de los turnos. Se han considerado evidencias de validez débil las correlaciones inferiores a 0,30; moderada con niveles entre 0,30 y 0,59; y fuerte si la correlación es superior a 0,5913.
El análisis estadístico se realiza mediante el paquete estadístico SPSS Statistics 21.0 para Windows (SPSS Inc., Chicago IL, EE. UU.).
Consideraciones éticasSe obtuvo el consentimiento informado de los pacientes que fueron objeto de la grabación, o de sus familiares en caso de estar el paciente incapacitado para ello. Asimismo, se solicitó consentimiento verbal a las enfermeras que iban a ser grabadas.
ResultadosDurante el año 2006 ingresaron en el Servicio de Cuidados Intensivos y Grandes Quemados del Hospital Universitario de Getafe 1.045 pacientes. Sus características se muestran en la tabla 1.
características de los pacientes
n=1.045 | |
---|---|
Mujeres, n (%) | 335 (32) |
Edad, años, media (DE) | 58 (18) |
Diagnóstico, n (%)BásicoNeurológicoCardiovascularRespiratorioDigestivoTraumaQuemadoOtros (renales, hepáticos y metabólicos) | 369 (35) 146 (14) 209 (20) 129 (12) 40 (4) 46(4)89(9)17 (2) |
SAPS, puntos, media (DE) | 30 (19) |
NAS, puntos, media (DE) | 44 (10) |
NEMS, puntos, media (DE) | 24 (6) |
Estancia, días, mediana (RIC) | 3 (1-7) |
Exitus, n (%) | 120 (12) |
Se analizaron 164 cuestionarios. La fiabilidad del NAS, estimada por el coeficiente alfa de Cronbach para el total de los 23 ítems, fue de 0,307 para el NAS de mañana; de 0,441 para el NAS de tarde; de 0,281 para el NAS de noche; y de 0,373 para el NAS diario.
En el NAS diario, la eliminación de ninguno de los ítems provoca un incremento de más de 0,10 puntos respecto al valor indicado. Las correlaciones ítem-total corregidas muestran valores negativos (cuidados de drenajes, apoyo y cuidados de familiares y pacientes, mediciones cuantitativas de orina, medición de presión intracraneal, tratamiento de complicaciones metabólicas, nutrición parenteral), mientras que otras presentan valores por debajo del 0,30 (monitorización y valoración, administración de medicación, excluidos fármacos vasoactivos, procedimientos de higiene, movilización y cambios posturales, tareas administrativas y de organización, soporte respiratorio, medicación vasoactiva, reposición intravenosa de altas dosis de fluidos, monitorización de la aurícula izquierda, resucitación cardiopulmonar tras parada, técnicas de hemofiltración, intervenciones específicas en la unidad de cuidados intensivos, intervenciones específicas fuera de la unidad de cuidados intensivos). Solo hay 4 ítems que sobrepasen este umbral (realización de procedimientos de laboratorio, bioquímica y microbiología; cuidados de la vía aérea artificial; tratamiento para la mejora de la función pulmonar; y alimentación enteral). Estos datos pueden comprobarse en la tabla 2.
Fiabilidad del modelo
Alfa de Cronbach si se elimina el elemento | Correlación elemento total corregida | |
---|---|---|
Monitorización y valoración | 0,384 | 0,064 |
Realización de procedimientos de laboratorio, bioquímica y microbiología | 0,299 | 0,337 |
Administración de medicación, excluidos fármacos vasoactivos | 0,367 | 0,099 |
Procedimientos de higiene | 0,378 | 0,160 |
Cuidados de drenajes | 0,396 | −0,291 |
Movilización y cambios posturales | 0,308 | 0,232 |
Apoyo y cuidados de familiares y pacientes | 0,385 | −0,053 |
Tareas administrativas y de organización | 0,360 | 0,111 |
Soporte respiratorio | 0,371 | 0,058 |
Cuidados de la vía aérea artificial | 0,328 | 0,439 |
Tratamiento para mejorar la función pulmonar | 0,274 | 0,407 |
Medicación vasoactiva | 0,369 | 0,094 |
Reposición intravenosa de altas dosis de fluidos | 0,371 | 0,057 |
Monitorización de la aurícula izquierda | 0,368 | 0,170 |
Resucitación cardiopulmonar tras parada | 0,360 | 0,154 |
Técnicas de hemofiltración | 0,377 | 0,034 |
Mediciones cuantitativas de orina | 0,410 | −0,142 |
Medición de la presión intracraneal | 0,376 | −0,047 |
Tratamiento de complicaciones metabólicas | 0,374 | −0,011 |
Nutrición parenteral | 0,376 | −0,077 |
Alimentación enteral | 0,329 | 0,574 |
Intervenciones específicas en la unidad de cuidados intensivos | 0,361 | 0,165 |
Intervenciones específicas fuera de la unidad de cuidados intensivos | 0,373 | 0,015 |
Se realizaron 16 grabaciones, de las cuales 13 fueron utilizadas en la evaluación de test-retest de fiabilidad de la medición. Las otras 3 grabaciones no pudieron ser visualizadas con posterioridad por la enfermera que hizo la valoración inicial a pie de cama durante su turno de trabajo, pero sí fueron visualizadas por los 2 miembros del equipo investigador (referente), lo que permitió utilizarlas en el análisis de fiabilidad interobservador.
Tras una primera medición de las cargas de trabajo, realizada en el turno de la grabación, la segunda medición fue efectuada por la misma profesional tras el visionado posterior de la grabación. De esta forma, es posible obtener un valor del CCI de 0,837 con un intervalo de confianza del 95%: 0,466-0,950 (p=0,002).
La aplicación del cuestionario por 2 evaluadores distintos, realizada en tiempos diferentes sobre la muestra de 16 grabaciones, mostró un CCI de 0,662 (intervalo de confianza del 95%: 0,033-0,882) y un Kappa de 0,371, valores que indican una fiabilidad moderada del cuestionario. Los resultados demuestran que solamente en 6 de los 16 casos las puntuaciones de los 2 observadores coinciden, lo que supone una concordancia del 44%.
ValidezValidez internaLa prueba de Kaiser-Meyer-Olkin muestra un valor de 0,589, lo que indica una relación media entre los ítems y permite realizar un análisis factorial que indica que hay muchos ítems que no están bien representados en la solución factorial (monitorización y valoración, realización de procedimientos de laboratorio, bioquímica y microbiología, administración de medicación, excluidos fármacos vasoactivos, procedimientos de higiene, cuidados de drenajes, movilización y cambios posturales, apoyo y cuidados de familiares y pacientes, soporte respiratorio, medicación vasoactiva, reposición intravenosa de altas dosis de fluidos, monitorización de la aurícula izquierda, intervenciones específicas en la unidad de cuidados intensivos). Todos estos datos pueden ser consultados en la tabla 3. En el gráfico de sedimentación (fig. 1) podemos observar cómo los 7 primeros ítems de la escala recogen el 70% de la variabilidad acumulada.
Análisis de componentes principales
Extracción | |
---|---|
Monitorización y valoración | 0,598 |
Realización de procedimientos de laboratorio, bioquímica y microbiología | 0,685 |
Administración de medicación, excluidos fármacos vasoactivos | 0,647 |
Procedimientos de higiene | 0,496 |
Cuidados de drenajes | 0,702 |
Movilización y cambios posturales | 0,745 |
Apoyo y cuidados de familiares y pacientes | 0,600 |
Tareas administrativas y de organización | 0,915 |
Soporte respiratorio | 0,614 |
Cuidados de la vía aérea artificial | 0,895 |
Tratamiento para mejorar la función pulmonar | 0,829 |
Medicación vasoactiva | 0,491 |
Reposición intravenosa de altas dosis de fluidos | 0,685 |
Monitorización de la aurícula izquierda | 0,698 |
Resucitación cardiopulmonar tras parada | 0,578 |
Técnicas de hemofiltración | 0,773 |
Mediciones cuantitativas de orina | 0,717 |
Medición de la presión intracraneal | 0,795 |
Tratamiento de complicaciones metabólicas | 0,853 |
Nutrición parenteral | 0,807 |
Alimentación enteral | 0,817 |
Intervenciones específicas en la unidad de cuidados intensivos | 0,453 |
Intervenciones específicas fuera de la unidad de cuidados intensivos | 0,721 |
De los 1.045 pacientes incluidos en el estudio, se han analizado los datos de 1.006 para medir la correlación entre NAS y NEMS; 39 casos no fueron incluidos por existir una ausencia de registro de una de las dos2 valoraciones.
El coeficiente de correlación de Spearman, medido entre el NAS versión castellana y el NEMS, fue de 0,719, lo que indica una correlación fuerte para el global de los pacientes.
Por otra parte, podemos comprobar que, en un modelo de regresión lineal, el ajuste que se obtiene en la correlación entre el NAS diario y el NEMS está por debajo del valor 0,70 (R2=0,5126), por lo que el modelo podría no explicar la relación entre ambas escalas (fig. 2).
Discusión y conclusionesLas propiedades psicométricas de nuestra versión en castellano del NAS se consideran aceptables.
La consistencia interna de la escala refleja una fiabilidad baja, posiblemente debida a las características de las puntuaciones de los ítems. La pobre correlación entre los ítems de la escala se podría atribuir a la heterogeneidad de los mismos.
La fiabilidad intraobservador calculada es buena, si bien es cierto que el intervalo de confianza es amplio, posiblemente debido al pequeño tamaño de la muestra. Esta buena correlación indica que las valoraciones de un mismo observador permanecen estables cuando son reevaluadas.
Cuando la carga es reevaluada por otra enfermera (fiabilidad interobservador), se obtienen peores resultados; creemos que esto puede deberse a las limitaciones propias del estudio, pues la valoración de las cargas mediante una grabación con cámara fija puede no valorar todo el trabajo de esa enfermera (tareas administrativas y de organización, apoyo y cuidado de familiares). Además, la resolución de la grabación no permite valorar otros ítems de la escala (medicación vasoactiva, tratamiento de complicaciones metabólicas). Los resultados aportados por Carmona-Monge et al.14, que reflejan el carácter subjetivo de algunos ítems, podrían también explicar, en parte, esta fiabilidad interobservador débil hallada en nuestro estudio.
En el análisis de la validez interna (qué ítems pueden explicar la variabilidad obtenida) observamos que los 7 primeros ítems de la escala recogían el 70% de la variabilidad y que hay ítems que no están bien representados, lo que se podría solucionar estandarizando las puntuaciones para recoger la verdadera variabilidad y evitar el sesgo que se produce en la puntuación.
La validez convergente, medida mediante la correlación entre el NAS-castellano y el NEMS, es buena, aunque el NAS mide la carga asistencial y el NEMS el esfuerzo terapéutico. En parte, la carga de trabajo de enfermería de un paciente puede estar relacionada con la enfermedad de ingreso y, si bien el esfuerzo terapéutico puede disminuir a lo largo de la estancia del paciente, esto no implica una disminución de las cargas de enfermería y viceversa. Otra posible explicación para que esta correlación no sea perfecta es la diferencia de cuantificación: mientras que el NEMS se cuantifica en puntos, el NAS es un porcentaje de tiempo de enfermería dedicado al cuidado del paciente. Podría considerarse que el NAS es una escala que mide mejor las cargas reales de enfermería y con la que podría ser planificada la plantilla de enfermeras de una unidad. Estudios previos han encontrado una peor correlación entre NEMS y NAS. Bernat Adell et al.15 encuentran una correlación lineal entre NEMS y NAS por turno de R2=0,1634 y por día de R2=0,0212. Stafseth et al.16 señalan una correlación de Spearman entre r=0,16 y r=0,40, según las unidades. Por otra parte, Carmona-Monge et al.17, en un estudio con una muestra de 6.815 pares de puntuaciones, obtuvieron una alta correlación, similar a la hallada en nuestro estudio para las valoraciones individuales (Pearson de 0,672) y más elevada para la medición de cargas de la unidad (0,932).
Consideramos que los resultados obtenidos en este estudio se deben, en parte, a las características de la escala original, pero también a las limitaciones técnicas del proceso de validación. Tan solo hemos hallado un estudio de validación de la escala NAS: Ferreira Queijo y Grillo Padilha18, en su proceso de adaptación transcultural y validación del NAS al portugués, hallaron muy buenas propiedades psicométricas y una correlación muy buena con la escala TISS-28, publicada por Miranda et al. en 19964. Dada la escasa bibliografía con la que poder comparar nuestros resultados, creemos imprescindible llevar a cabo otros estudios de validación de la escala castellana para obtener una opinión más consistente sobre la misma.
FinanciaciónCIBER Enfermedades Respiratorias, Instituto de Salud Carlos III, Madrid
Conflicto de interesesLos autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.
1. Monitorización y «valoración» | |
1a Signos vitales horarios. Registro y cálculo de balance de fluidos | 4,5 |
1b Estar presente a pie de cama y observación continua o activa de 2h o más durante algún turno, por razones de seguridad, gravedad o terapia como ventilación mecánica no invasiva, procedimientos de destete, inquietud, desorientación mental, posición de decúbito prono, procedimientos de donación, preparación y administración de fluidos o medicación, ayuda en procedimientos específicos | 12,1 |
1c Estar presente a pie de cama y observación activa de 4h o más durante algún turno, por razones de seguridad, gravedad o terapia tal y como los ejemplos de 1b | 19,6 |
2. Realización de procedimientos de laboratorio, bioquímica y microbiología, excluidos los rutinarios | 4,3 |
3. Administración de medicación, excluidos fármacos vasoactivos | 5,6 |
4. Procedimientos de higiene | |
4a Realización de procedimientos higiénicos tales como cura de heridas y catéteres intravasculares, aseo del paciente, cambio de sábanas, incontinencia, vómitos, quemaduras, heridas, cura quirúrgica compleja con irrigación y procedimientos especiales (p. ej.,, medidas de aislamiento, medidas relacionadas con la infección cruzada, limpieza de la habitación, higiene del personal) | 4,1 |
4b Realización de estos procedimientos de higiene durante más de 2h en algún turno | 16,5 |
4c Realización de estos procedimientos de higiene durante más de 4h en algún turno | 20 |
5. Cuidados de drenajes (todos exceptuando la sonda gástrica) | 1,8 |
6. Movilización y cambios posturales | |
Incluidos procedimientos como: movilización del paciente en la cama, movilización de la cama a la silla, uso de grúa elevadora o levantamiento del paciente en equipo(p. ej.,, inmovilización del paciente, tracciones, posición de prono) | |
6a Realización de procedimientos hasta 3 veces en 24h | 5,5 |
6b Realización de procedimientos más de 3 veces en 24h o con 2 enfermeras, con cualquier frecuencia | 12,4 |
6c Realización de procedimientos con 3 o más enfermeras, con cualquier frecuencia | 17 |
7. Apoyo y cuidados de familiares y pacientes | |
Incluidos procedimientos tales como llamadas telefónicas, entrevistas, asesoramiento u orientación. A veces, el apoyo y cuidado de familiares o pacientes permiten al personal continuar con otras actividades de enfermería (p. ej., comunicación con los pacientes durante procedimientos de higiene, comunicación con familiares mientras se está a pie de cama y observando al paciente) | |
7a Apoyo y cuidados de familiares o pacientes que requieren completa dedicación durante al menos 1h en alguno de los turnos, tales como explicar la situación clínica, intentar solucionar problemas de dolor o angustia, circunstancias familiares difíciles | 4 |
7b Apoyo y cuidados de familiares o pacientes que requieren completa dedicación durante 3h o más en alguno de los turnos, tales como la muerte, circunstancias demandantes (p. ej., gran número de familiares, problema idiomáticos, familiares hostiles) | 32 |
8. Tareas administrativas y de organización | |
8a Tareas rutinarias tales como procesamiento de datos clínicos, solicitud de pruebas, intercambio profesional de información (p. ej., contar el parte, mesas redondas, sesiones clínicas, visita clínica) | 4,2 |
8b Tareas administrativas rutinarias y de organización que requieren dedicación plena durante 2h en alguno de los turnos, tales como actividades de investigación, actualización de protocolos, tramitación de ingresos y altas de pacientes | 23,2 |
8c Tareas administrativas rutinarias y de organización que requieren dedicación plena durante 4h o más en alguno de los turnos, tales como coordinación con otras disciplinas en los procesos de muerte o donación de órganos | 30 |
Soporte ventilatorio | |
9. Soporte ventilatorio: cualquier forma de ventilación mecánica, ventilación asistida con o sin PEEP con o sin relajantes musculares, respiración espontánea con o sin PEEP con o sin tubo endotraqueal. Oxígeno suplementario con cualquier método | 1,4 |
10. Cuidados de la vía aérea artificial: tubo endotraqueal o cánula de traqueostomía | 1,8 |
11. Tratamiento para mejorar la función pulmonar: fisioterapia respiratoria, espirometría incentivada, terapia inhalatoria, aspiración endotraqueal | 4,4 |
Soporte cardiovascular | |
12. Medicación vasoactiva. Independientemente del tipo y la dosis | 1,2 |
13. Reposición intravenosa de altas dosis de fluidos. Administración de 3l/m2/día (≈6l/24h), sin tener en cuenta el tipo de fluidos administrados | 2,5 |
14. Monitorización de la aurícula izquierda: catéter de arteria pulmonar con o sin mediciones de gasto cardíaco | 1,7 |
15. Resucitación cardiopulmonar tras parada, en las últimas 24h (solo puñopercusión precordial no incluido) | 7,1 |
Soporte renal | |
16. Técnicas de hemofiltración, técnicas de diálisis | 7,7 |
17. Mediciones cuantitativas de orina (p. ej., a través de sonda vesical) | 7 |
Soporte neurológico | |
18. Medición de la presión intracraneal | 1,6 |
Soporte metabólico | |
19. Tratamiento de complicaciones metabólicas, solo acidosis/alcalosis | 1,3 |
20. Nutrición parenteral, >40Kcal/kg/día | 2,8 |
21. Alimentación enteral a través de sonda digestiva u otra vía gastrointestinal (p. ej., yeyunostomía) | 1,3 |
Intervenciones específicas | |
22. Intervenciones específicas en la unidad de cuidados intensivos: intubación endotraqueal, inserción de marcapasos, cardioversión, endoscopias, cirugía de urgencia en las últimas 24h, lavado gástrico. No están incluidas intervenciones rutinarias sin consecuencias directas para la situación clínica del paciente, tales como: radiografías, ecografía, electrocardiografía, curas o inserción de catéteres arteriales o venosos | 2,8 |
23. Intervenciones específicas fuera de la unidad de cuidados intensivos: cirugía o procedimientos diagnósticos | 1,9 |
1.- Monitorización básica: constantes vitales, registro periódico y cálculo del balance de líquidos | 9 |
2.- Medicación intravenosa: en bolo o continuamente, no incluyendo fármacos vasoactivos | 6 |
3.- Soporte ventilatorio mecánico: cualquier modalidad de ventilación mecánica/asistida, con o sin PEEP, con o sin uso de relajantes musculares | 12 |
4.- Cuidados ventilatorios suplementarios: respiración espontánea con tubo endotraqueal, oxígeno suplementario en algún método, excepto si se ha aplicado el ítem 3 | 3 |
5.- Única medicación vasoactiva: un único fármaco vasoactivo | 7 |
6.- Múltiple medicación vasoactiva: más de un fármaco vasoactivo, independientemente del tipo o dosis | 12 |
7.- Técnicas de diálisis: todas | 6 |
8.- Intervenciones específicas en UCI: como intubación endotraqueal, colocación de marcapasos, cardioversión, endoscopia, intervención quirúrgica urgente en el curso de 24h, lavado gástrico; no se incluyen las intervenciones de rutina como rayos X, ecocardiografía, ECG, vendajes o colocación de líneas arteriales o venosas | 5 |
9.- Intervenciones específicas fuera de UCI: como una intervención quirúrgica o un procedimiento diagnóstico, intervenciones o procedimientos que se refieren a la severidad del paciente y requieren una mayor demanda de esfuerzos terapéuticos en la UCI | 6 |
2° Accesit FEPIMCTI: Segundo Accesit FEPIMCTI (Federación Panamericana e Ibérica de Medicina Critica y Terapia Intensiva) a la comunicación presentada en el X Congreso Panamericano e Ibérico de Medicina Crítica y Terapia Intensiva, Madrid, 15-18 de junio de 2014.