El jueves 23 de enero de año en curso (2014), en el Exconvento de San Hipólito, ubicado en Av. Hidalgo del Centro Histórico de la Ciudad de México, se llevó a cabo la ceremonia de cambio de Mesa Directiva de la Sociedad Mexicana de Oncología (SMeO) 2014-2015, en que tuve el privilegio de asumir la Presidencia de esta Sociedad, por lo que expresé:
Honorable presídium, especialmente Expresidentes quienes amablemente respondieron a nuestra invitación, agradezco su asistencia esta noche. En pocas ocasiones tenemos la fortuna de contar con la presencia en un mismo foro de todos ustedes, por lo que deseo reconocer su participación en las diversas gestiones en que participaron y que han permitido que nuestra SMeO, hoy sea una agrupación estable y completa.
La valiosa labor de cada uno de ustedes, ha dado continuidad y crecimiento a muchos proyectos y deseo extenderles una invitación para permitirnos tener su colaboración en decisiones relevantes para la Sociedad. Su experiencia y opiniones serán siempre bien recibidas y respetadas.
Estimados colegas y amigos, de la Mesa Directiva el bienio 2012-2013 y de la nueva Mesa Directiva entrante.
En poco más de 60 años, la SMeO se ha consolidado como una agrupación de especialistas en cáncer a nivel nacional, que ha sido modelo en muchos sentidos, y por ello será un honor, presidirla en los próximos 2 años.
La Sociedad nació con el fin de organizar a los oncólogos en el desarrollo de investigación clínica (se llamaba Sociedad Mexicana de Estudios Oncológicos "SMEO") y con el tiempo, se trasformó en la Sociedad que hoy conocemos como promotora de educación médica y actualización continua en nuestra especialidad.
Mencionaba que la Sociedad es modelo, porque ha logrado un equilibrio poco común y comunión de las especialidades de Cirugía Oncológica, Oncología Médica, Radiooncología, Oncología Pediátrica y Ginecología Oncológica, permitiendo que los asuntos se aborden en forma ideal como debe contemplarse hoy el cáncer: con la intervención de todos los especialistas y orientación de sus conocimientos en un mismo sentido, con un mismo fin, lo que nos beneficia a todos, especialmente a los pacientes.
Esta equidad en las diferentes disciplinas que participamos en la Oncología, ha sido respetada y trasmitida en las diversas gestiones y también ha permitido la participación de las instituciones médicas formadoras de oncólogos en el país.
Esta valiosa fórmula, respetada en nuestra Sociedad desde hace tiempo, permanecerá como un principio durante nuestra gestión y abrirá posibilidades para integrar nuevos socios interesados en colaborar en nuestra agrupación.
Nuestra Mesa Directiva asume hoy la responsabilidad de cumplir con los compromisos en diversas áreas: con los miembros activos y los especialistas en formación; con los pacientes y por supuesto, con la Sociedad.
En nuestra agrupación, las actividades principales se han centrado en los últimos años, en los eventos académicos ya reconocidos, que son mensuales y un evento anual mayor, que acerca a nuestros colegas a los avances más recientes en cada área del cáncer.
Cada vez hay más información de una porción cada vez más pequeña del individuo y que es relevante para conocer y dominar al cáncer. El secreto del cáncer como el de la mayoría de las enfermedades, está dentro de nuestro cuerpo en nuestras células, en nuestro material genético.
¿De dónde se origina el cáncer? Esa pregunta que nos a hacen los pacientes cada día una y otra vez, es la más difícil de contestar, y la verdad, es porque no conocemos la respuesta precisa... No hay un responsable, es un accidente de la vida. Pero esta respuesta que pareciera tener un sentido más trágico y capricho del destino, tiene mucho de verdad.
De esa cadena de 3,000 millones de componentes químicos organizados armónicamente para construir los 2 metros de vida que ocupan el ADN desplegado en todas y cada una de nuestras células, y de los errores que se desarrollan en una parte microscópica de esos metros de vida, de allí viene el cáncer. El proyecto del genoma humano nos expuso el universo interno que tenemos los seres humanos, en donde se encuentra el secreto de la vida y las enfermedades.
Quince años y 3,000 millones de dólares se requirieron para descifrar la fotografía del genoma. Hoy día, esta fotografía se puede lograr en una noche y sólo costaría 3,000 dólares. Esta revolución nos tocó vivir en la Oncología y asumir nuestra responsabilidad en conocer más a fondo esta información compleja que nos permitirá ser mejores médicos. Pero el secreto no es descifrar sino comprender el genoma. El ejercicio de intentar comprenderlo nos lleva cada día a una ruta nueva, un espacio diferente, en donde los tratamientos podrían tener más sentido.
Estos conocimientos recientes deben llegar a los oncólogos de la forma más rápida y práctica posible, ese es el fin de nuestras reuniones médicas en congresos mesas de discusión, en reuniones para elaborar consensos y parámetros de práctica clínica para el manejo de cada tipo de cáncer.
Concentrar los esfuerzos en dirigir, sintetizar la información y presentarla en un espacio breve será un reto para la SMeO. Los medios electrónicos son de gran ayuda y en los próximos meses, iniciaremos actividades más centradas de tópicos relevantes para cada área de especialidad en Oncologia. El proceso de integrar un foro anual no cambiará, sólo se modificará la forma de hacerlo presente a nuestros colegas.
El compromiso con los médicos residentes en las diferentes áreas de la Oncología, tiene otra dimensión. Deseamos enriquecer los conocimientos de nuestros jóvenes futuros colegas, ya que ellos resguardarán y multiplicarán el conocimiento de cómo enfrentar el cáncer, harán suyos los secretos que guardan estas enfermedades para darles a los pacientes alivio, confianza si no es posible la curación.
Gracias, de antemano, a nuestros jóvenes estudiantes que nos enseñan todos los días que la curiosidad humana es una aventura interminable y que la pasión por el desarrollar su profesión enriquece no sólo su carácter sino también a los médicos que los acompañamos todos los días en el camino, que decidieron recorrer en la vida.
Las actividades que seguiremos fomentando en las reuniones, serán aquellas que permitirán establecer vínculos de amistad personal y profesional, reconocer otras fronteras y escuelas, retar sus capacidades personales y hacer suyo el conocimiento, serán siempre nuestro objetivo en los proyectos venideros: nuestras tradicionales reuniones de encuentro inter-resientes, el acercamiento y diálogo con líderes internacionales, los espacios para ver plasmados sus ideas y proyectos en las publicaciones dentro de nuestra revista (Gaceta Mexicana de Oncología, GAMO) y espacio para trabajos libres en los congresos, los cuales tendrán no sólo reconocimiento sino premios que permitirán estimular la investigación para generar más conocimientos.
En los últimos años, algunos médicos residentes han sido premiados con becas económicas y estancias en hospitales en el extranjero, a través de reconocimientos a la excelencia académica con los prestigiados Premios Rosenkranz de Roche, becas de Pfizer, premios a la investigación clínica por Boehringer, Bristol, Sanofi y actividades para enriquecer a los médicos en su vida personal en el caso de Pierre Fabre. todos estos apoyos que provienen de las compañías farmacéuticas, nos han facilitado mejorar la calidad del entrenamiento.
Aprovecho la oportunidad para reconocer la valiosa ayuda y colaboración que todas las empresas farmacéuticas, distribuidoras y comercializadoras, han brindado a nuestra Sociedad, para permitir el desarrollo de los proyectos académicos.
Con la fortuna de haber tenido la experiencia de haber trabajado en algunas compañías, puedo hoy reconocer que la Oncología tiene más dimensiones que la puramente clínica. Sin el financiamiento del desarrollo de la investigación y de las actividades académicas, simplemente hoy no podríamos entender y combatir el cáncer, de la manera como lo hacemos.
Siempre hay espacio para colaboraciones positivas, manteniendo el respeto y responsabilidad que debemos a los enfermos con cáncer.
Las actividades conjuntas con el Consejo Mexicano de Oncología (CMOncol) seguirán el curso que se ha planeado, especialmente en los últimos años.
Al inicio, mencioné que la SMeO es un modelo en muchos sentidos y la relación que guarda con el CMOncol, órgano colegiado que certifica a los médicos especialistas, en nuestro país, es otro ejemplo. La colaboración constante de los miembros de la SMeO en los proyectos del CMOncol y la guía profesional de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) a través del Dr. Ramiro Jesús Sandoval, ha logrado que en un periodo corto, un proceso de acreditación de alto nivel, justo y transparente.
La participación de la SMeO en los proyectos del CMOncol continuará porque estamos seguros, que es la mejor forma de garantizar el buen nivel de la Oncología en México.
Aprovecho este ejemplo de una agrupación ejemplar como el CMOncol para reconocer a 2 figuras que son relevantes en la Oncología Nacional y en mi vida profesional, la Dra. Aura Argentina Erazo Valle-Solís, quien logró la creación del CMOncol junto con el Dr. José Aurelio Athié Rubio, en el año de 1996, la primera, fundadora también de la escuela de Oncología Médica de nuestro querido Centro Médico Nacional "20 de Noviembre" del instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los trabajadores del Estado (iSSStE), de donde hemos egresado con mucho orgullo más de 30 especialistas; a ella le expresó mi más profundo respeto y cariño.
A la Dra. María Guadalupe Cervantes Sánchez, nuestra querida "Lupita Cervantes", quien ha sido maestra, amiga y ejemplo de una profesional de alto nivel académico, con una gran disciplina aún en momentos difíciles, profunda en conocimientos y con una extraordinaria calidad humana.
Hoy día, la presidencia de la SMeO ha contado sólo con 3 mujeres: la Dra. Julieta Calderón Gené de Laguna (QEPD), la Dra. Aura Argentina Erazo Valle-Solís y la Dra. María Guadalupe Cervantes Sánchez, todas de la misma institución y hoy tengo el honor de continuar con esa tradición, esperando no ser la última.
tenemos también un gran compromiso con los pacientes, con esos seres humanos extraordinarios que son la razón de nuestro esfuerzo diario, esos personas, quienes nos regalan la confianza de poner su vida en nuestras manos sin conocernos, a quienes el azar los golpeó con la desgracia de una enfermedad tan dura. A ellos a quienes dedicamos nuestros conocimientos, a quienes hay que explicar y convencer que el cáncer no necesariamente es la muerte, y si la es, no necesariamente debe haber dolor.
Para ayudarlos a enfrentar ese accidente de su vida, hay muchas más vertientes, que tan sólo diagnosticar y tratar la enfermedad. Hoy día las necesidades de información, orientación, ayuda en momentos críticos y finales, el fortalecimiento de los cuidados paliativos son tan necesarios como un buen tratamiento.
La cooperación de la SMeO con asociaciones civiles de pacientes y familiares quienes dedican su tiempo en organizaciones altruistas es fundamental. Deseamos tener un programa de acciones conjuntas con estos grupos y dedicaremos espacios importantes para información continua y orientación en nuestros espacios electrónicos para todos los pacientes y sus familiares. La SMeO tiene en su organización, especialistas responsables de cada área del cáncer, dentro de los grupos de trabajo denominados Comités por tumores. Estas células de nuestra asociación son grupos de especialistas que nos permitirán identificar las necesidades en cada área y actuar de la forma más práctica y realista en el desarrollo de estas ideas.
En el mes de noviembre del 2013, se dio a conocer el informe Cáncer en las Américas: Perfiles de país 2013, realizado por la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS). México figuró como uno de los 9 países de América, donde la mortalidad por cáncer está bajando.
Junto con México, la mortalidad por cáncer está disminuyendo también en Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Estados Unidos de Norteamérica, Nicaragua, Paraguay y Venezuela.
El mayor avance ocurrió en el cáncer cervicouterino, ya que murieron 4.61% menos mujeres que en 2000 a causa de este padecimiento. Entre los años 2000 y 2010, también disminuyó en los mexicanos el cáncer de hígado, pulmón, próstata y estómago.
No hay duda en que la mejor forma de conocer al enemigo es sabiendo de qué tamaño es, dónde vive, de qué debilidades se aprovecha para crecer. Hoy día tenemos una fotografía en blanco y negro, del cáncer en México, las cifras de este censo, el Registro Histopatológico de las Neoplasias Malignas (RHNM) data del año 2003 y fue integrada por los médicos quienes diagnostican los casos, los patólogos. Casi 10 años han trascurrido desde esta información, esa imagen parcial que ha sido de ayuda, debe y puede mejorar, actualizarse, ser más precisa. Esfuerzos significativos en los últimos 6 años de parte de la SMeO han existido, el Dr. Rogelio Martínez Macías, durante su presidencia, lideró el proyecto más reciente de un Registro Nacional del Cáncer, en conjunto con la Secretaría de Salud Federal. Ha faltado ese último paso que es mayúsculo, del escritorio a la implementación, no por indecisión ni incapacidad, sino porque no es un asunto sencillo el solicitar la colaboración de las autoridades y dedicación al gremio médico. Afortunadamente, hoy día la Secretaría de Salud, integra ya planes concretos extensivos a todo el país y en ese paso crítico de operación en el campo, los oncólogos seremos responsables de su correcto funcionamiento.
Los años 2014-2015 serán decisivos para cumplir con ese compromiso y los integrantes de la SMeO estaremos preparados para darle un espacio importante en las actividades programadas. De la misma forma, solicitamos el apoyo, la colaboración constante de los miembros y agrupaciones afines, ya que saber cómo es el cáncer en México es una urgencia y una prioridad.
Dos años es un periodo breve cuando se intenta desarrollar proyectos y cambios. Asumo el compromiso de continuar los planes de las gestiones anteriores y en las que tuve la fortuna de participar. Y desearía de la misma manera que las nuevas actividades tengan la continuidad con los colegas futuros, dejando por supuesto, muy claro el sentido de las nuevas acciones. Este año tendré el honor de abrir las puertas a los miembros y amigos de la SMeO, en la nueva Sede que fue pensada, buscada y planeada desde hace 4 años y soñada desde tiempo atrás. Esta nueva Sede nos dará un espacio de mayor comodidad, planeado para nuestras actividades administrativas, sociales y académicas. Gracias a los Dres. Pedro Mario Escudero de los Ríos, Rogelio Martínez Macías y Jorge Martínez Cedillo, por dar continuidad a este proyecto.
A los integrantes de la nueva Mesa Directiva, les agradezco haber aceptado asumir la responsabilidad a la que fueron invitados.
A las personas que trabajan dentro de la SMeO, a quienes les corresponde hacer realidad todos las ideas, quienes hacen posible las cosas y organizan todas las tareas de nuestra organización, muchas gracias y mi agradecimiento anticipado por su dedicación y sentido profesional, especialmente a la Srita. Guadalupe Palacios Viveros, a quien expreso mi respecto, muchas gracias.
Gracias por la compañía de todos ustedes, a mi familia, a mis amigos y a las personas que están siempre cerca y en mi corazón. Muchas gracias a todos los asistentes esta noche fría, pero enmarcada en este maravilloso espacio lleno de historia, el exconvento de San Hipólito.