INTRODUCCIÓN
Los meningiomas son tumores intracraneales generalmente benignos. La clínica depende de su localización, y el diagnóstico se realiza por técnicas de imagen1-5. Habitualmente en la tomografía axial computarizada (TAC) craneal se manifiestan como imágenes hiperdensas, con desplazamiento de la línea media. Son muy infrecuentes los meningiomas isodensos, y aún más raros los hipo-densos1.
Se expone el caso de un varón anciano, sin factores de riesgo cardiovascular, que sufre deterioro neurológico de corta y progresiva evolución. El diagnóstico de presunción fue encefalopatía isquémica, no confirmado mediante TAC craneal, que mostraba lesión frontal izquierda. La resonancia magnética (RM) definió el diagnóstico.
EXPOSICIÓN DEL CASO
Varón de 84 años, con antecedentes de hiperplasia benigna de próstata en tratamiento con ciproterona y osteoporosis senil con aplastamientos vertebrales sin radiculopatía. No presenta factores de riesgo cardiovascular conocidos ni otros antecedentes de interés. Mantiene una buena situación neuropsicológica basal, con actividad física, social y administrativa cotidianas.
Sufre deterioro progresivo neurocognoscitivo y motor de 6 semanas de evolución, llegando a precisar ayuda para las actividades de la vida diaria, con amnesia de evocación y de fijación, confusión y, en la última semana, incontinencia vesical. No muestra déficit segmentarios, fiebre ni otra sintomatología. En la exploración física: presión arterial 120/70 mmHg, buen estado general, normocoloreado, bien nutrido e hidratado, colaborador, sin soplos carotídeos, cardiovascular y broncopulmonar sin anomalías, abdomen sin hallazgos. En la exploración neurológica destacaba: desorientación temporoespacial, pares craneales sin alteraciones, sin rigidez ni temblor, reflejos osteotendinosos normales y simétricos, reflejo cutáneo plantar flexor bilateral, signos meníngeos negativos, torpor global y marcha incoordinada con maniobras cerebelosas positivas, sin déficit focales. Analítica sin alteraciones, con antígeno específico prostático (PSA) de 0,52 ng/ml. La TAC craneal (fig. 1) muestra una extensa lesión hipodensa que ocupa prácticamente todo el lóbulo frontal izquierdo, con leve desviación de la línea media hacia la derecha y discreto colapso del asta frontal del ventrículo izquierdo, que se interpretó como lesión isquémica crónica, sin descartar una improbable lesión tumoral, por lo que se realizó RM cerebral (fig. 2), que a nivel frontal izquierdo muestra una lesión de aproximadamente 5 cm de diámetro, isointensa en secuencias potenciadas en T1 e hiperintensa en las potenciadas en T2, con gran edema perilesional acompañante; tras la administración de gadolinio intravenoso la lesión presenta una marcadísima captación de contraste paramagnético, fuertemente sugestiva de corresponderse a un meningioma.
Figura 1. Tomografía axial computarizada craneal.
Figura 2. Resonancia magnética cerebral.
Extirpada quirúrgicamente la masa, el paciente es dado de alta hospitalaria a los 6 días, consciente, orientado y colaborador, con tan sólo parestesia distal en miembro inferior derecho, de la que se recupera totalmente en las siguientes 4 semanas. El estudio anatomopatológico confirmó el diagnóstico de presunción: meningioma meningotelial (grado I de la Organización Mundial de la Salud [OMS]) de la hoz cerebral a nivel frontal izquierdo.
DISCUSIÓN
Los meningiomas constituyen entre el 14% y el 20% de todos los tumores intracraneales, con incidencia máxima entre los 35-75 años, y más frecuentes en mujeres. Se originan a partir de células aracnoideas. Un 95% son tumores benignos, de crecimiento lento; el resto son variantes anaplásicas1-4. Presentan una clínica muy variable5 en función de su localización (ataxia, anosmia, etc.).
El diagnóstico se establece mediante imagen. En TAC se muestran como lesiones bien definidas, que producen desplazamiento de estructuras de la línea media. Son generalmente hiperdensas, isodensas en un 14% de las ocasiones y sólo en un 0,8% hipodensas1. Los escasísimos meningiomas hipodensos en la TAC suelen ser debidos a la variedad histológica denominada lipomeningioma o al tipo meningoteliomatoso, con áreas de degeneración grasa4. En RM suelen manifestarse con señal isointensa en secuencias T1 y realce intenso de contraste; en T2 suelen tener señal iso o hiperintensa incluso en los casos atípicos3; no obstante, un 10% de las imágenes muy sugerentes o casi patognomónicas de meningioma, corresponden a otras entidades: hemangiopericitomas, plasmocitomas, ependimomas anaplásicos y carcinomas metastásicos6. En un 40% de los casos existe edema peritumoral significativo en la TAC, que puede ser trasudado (43%) o secreción tumoral (57%). El edema se asocia a histologías atípicas7.
El tratamiento de elección es la exéresis quirúrgica. La tasa de mortalidad intraoperatoria es del 14% aproximadamente. La tasa de supervivencia a los 10 años de la cirugía varía entre el 43% y el 77% según las series2.