Introducción y objetivos: El cuidado informal, puede definirse como la prestación de cuidados de la salud a personas dependientes por parte de familiares u otras personas de la red social inmediata, sin recibir una remuneración económica o profesional por ello. Asumir el cuidado de una persona en situación de dependencia constituye un factor de riesgo para la salud Entre los diversos cambios que ponen en cuestión la disponibilidad de cuidadores informales, la progresiva incorporación de las mujeres (principales cuidadoras) al mercado laboral resulta un factor crítico, y ello conlleva una mayor exposición a riesgos psicosociales. Nos proponemos crear unas guías de apoyo a los cuidadores informales integrada en la atención a los trabajadores desde la Prevención de Riesgos Laborales.

Metodología: Encuesta personal integrada en la anamnesis de la historia clínico laboral, realizada en los reconocimientos médicos anuales, donde se pregunta a los trabajadores sobre cargas familiares y si tienen ayuda, tanto informal como remunerada. Durante el Reconocimiento, e integrado dentro de la formación sobre accidentes y agresiones, se le suministra una guía sobre la normativa sobre permisos y licencias, así como correo de la Unidad de Atención al Profesional y persona de contacto para tramitación de solicitudes y aclaración de dudas .Así mismo se les suministra una documentación sobre ayudas formales, en colaboración con la Unidad de Gestoría de Usuarios; A través del técnico de Salud, se les entrega una guía de centros de atención a personas mayores así como posibilidad de contactos y requisitos de los mismos.

Resultados: Esperamos realizar la entrega de la documentación al 100% de los trabajadores que acudan al reconocimiento médico laboral anual y hacer la entrega de la documentación para que esté disponible en el 100% de los centros de nuestro distrito.

Conclusiones: El papel de cuidador pone de manifiesto problemas de conciliación de vida laboral y familiar, lo cual tiene impacto sobre la salud de las personas, ya que está demostrado que el cuidado informal, supone una sobrecarga sobre el personal, y que repercute sobre el clima organizacional. La realización de esta guía, supone una medida de incorporación de la perspectiva de género en la prevención de riesgos laborales., y una forma de intervención sobre los riesgos psicosociales que afectan a nuestro personal.