Se presenta el caso clínico de una paciente que consultó por una lesión onicodistrófica blanquecina en ambos hallux, de 3 meses de evolución. El examen micológico determinó que el agente causal de la infección era un moho, Curvularia lunata var. aeria. El género Curvularia se asocia a la producción de feohifomicosis. Curvularia lunata es una especie que ocasionalmente puede producir onicomicosis. Se administró tratamiento por pulsos con itraconazol 200mg/día durante 6 meses, con remisión completa de las lesiones. Es importante tener en cuenta a estos hongos como agentes oportunistas causales de micosis ungueales, ya que el lugar inicial de infección puede significar una vía para la diseminación sistémica en pacientes inmunodeprimidos.
We here report a clinical case of a female patient presenting with a three-month history of a white onychodystrophic lesion of both hallux. The infection was due to a mold, identified as Curvularia lunata var aeria. The Curvularia gender is related to the production of phaeohyphomycosis, Curvularia lunata cause onychomycosis occasionally. The patient was treated with itraconazole 200mg/day, during six month with complete remission of the lesions. In conclusion, it is important to consider these fungi as causative agent of nail mycosis since the initial site of infection may be a pathway for systemic dissemination in inmunocompromised patients.
El término onicomicosis hace referencia a la infección fúngica de uñas, las onicomicosis pueden ser causadas por hongos dermatofitos, levaduras o mohos12. Estos últimos no han sido informados como agentes etiológicos de onicomicosis con demasiada frecuencia, pero sí deben ser considerados como organismos oportunistas1–3,5,7. Dentro del grupo de mohos encontramos el género Curvularia, hongo filamentoso dematiáceo perteneciente a la clase Euascomycetes, orden Pleosporales, familia Pleosporaceae. Este género comprende numerosas especies, Curvularia lunata es el principal agente involucrado en la infección de humanos y animales, capaz de producir queratitis e infección sistémica como manifestaciones más frecuentes y onicomicosis ocasionalmente6,10. Debido a que es reconocido como organismo saprófito que prospera en piel sana, en suelo y en el ambiente de los laboratorios, es importante atenerse a estrictos criterios de diagnóstico para determinar si es un verdadero agente etiológico, y no un comensal o contaminante ambiental2,7,8.
Caso clínicoPaciente de sexo femenino, de 25 años, residente en la ciudad de Córdoba. Consultó al Servicio de Dermatología del Hospital Nacional de Clínicas por una lesión onicodistrófica blanquecina en ambos hallux de 3 meses de evolución, sin signos inflamatorios (fig. 1). Como antecedente epidemiológico la paciente mencionó haber viajado a México y Brasil en el año previo a la consulta (se deja constancia que contamos con el consentimiento informado del paciente para comunicar sus datos). Se derivó al Servicio de Micología para efectuar un estudio micológico. Por raspado subungueal de las lesiones con bisturí se obtuvieron 2 muestras seriadas, separadas por 15 días. En ambas muestras, el examen directo se realizó con hidróxido de potasio al 40% y calor. Se observaron hifas tabicadas ramificadas hialinas y dematiáceas, compatibles con hongos no dermatofitos (fig. 2).
De las 2 muestras se realizaron cultivos en agar Sabouraud glucosado con la adición de cloranfenicol y en agar selectivo y diferencial para el desarrollo de dermatofitos (DTM). Se incubaron a 28°C durante 15 días. Transcurridas 48h, en agar Sabouraud se observaron colonias vellosas de color pardo negruzco en el anverso, con reverso pardo oscuro. A partir de estas se realizaron microcultivos en agar papa glucosado. En DTM no se observó desarrollo finalizados los 15 días. El examen microscópico de los microcultivos reveló la presencia de hifas tabicadas y ramificadas de color hialino y pardo; los conidios son de pared delgada y lisa con septos transversales; los mismos, además, son curvados con una célula central mas grande y oscura que el resto; dichos conidios se disponen en grupos desde la hifa que les da origen.(fig. 3).
Con el fín de confirmar el género y establecer la especie del hongo, se envió la cepa al Centro de Referencia Departamento de Micología, INEI-ANLIS «Dr. Carlos G. Malbrán». El hongo fue identificado como Curvularia lunata var. aeria. Se instauró tratamiento por pulsos vía oral con itraconazol 200mg/día durante 6 meses, con remisión completa de las lesiones.
Infecciones de este tipo no son frecuentes en nuestro medio, al igual que en otras zonas no tropicales. Debido al incremento del movimiento migratorio y a la llegada a nuestro país de viajeros provenientes de zonas endémicas, es importante reconocer este tipo de enfermedades11.
Si bien la mayoría de las leuconiquias micóticas son causadas por hongos dermatofitos, un bajo porcentaje puede deberse a otros géneros, lo cual establece la importancia de realizar los cultivos correspondientes para lograr la identificación del agente etiológico9. Con respecto al examen directo, se ha señalado que de ser realizado por personal capacitado y experimentado, adquiere una elevada sensibilidad y proporciona en algunos casos información útil sobre la identidad del agente causal2,4.
El desafío que plantean los mohos filamentosos no radica en su aislamiento e identificación, sino en la valoración de su papel patogénico.
Responsabilidades éticasProtección de personas y animalesLos autores declaran que para esta investigación no se han realizado experimentos en seres humanos ni en animales.
Confidencialidad de los datosLos autores declaran que han seguido los protocolos de su centro de trabajo sobre la publicación de datos de pacientes.
Derecho a la privacidad y consentimiento informadoLos autores han obtenido el consentimiento informado de los pacientes y/o sujetos referidos en el artículo. Este documento obra en poder del autor de correspondencia.
Conflicto de interesesLos autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.