Las relaciones financieras entre investigadores e industria farmacéutica han llevado a tomar conciencia de los potenciales conflictos de intereses y la forma en que pueden afectar a los resultados de la investigación biomédica. Por ello, su declaración es percibida como un elemento esencial en la transparencia de la investigación clínica. Para conocer la frecuencia y tipología de los conflictos de intereses declarados por los autores en las revistas biomédicas españolas publicadas en castellano, se analizaron las declaraciones incluidas en los artículos de 4 revistas biomédicas españolas.
Entre febrero y marzo de 2013 se descargaron del sitio Web los números ordinarios publicados en 2012. Para garantizar que la muestra seleccionada correspondía a revistas del máximo estándar de calidad editorial se seleccionaron las incluidas en las secciones «Medicine», «General & Internal» y «Cardiac & Cardiovascular Systems» del Journal Citation Reports (JCR) en 2011: Atención Primaria, Medicina Clínica, Revista Clínica Española y Revista Española de Cardiología. De los números ordinarios se analizaron las publicaciones clasificadas como «Editorial», «Artículo original», «Documento de consenso», «Revisión» y «Artículo especial». Se excluyeron los suplementos, números especiales, monografías y cualquier otro tipo de formato. De cada artículo se extrajeron los autores y los conflictos de intereses declarados. Se codificaron los conflictos de intereses reportados y se analizaron con estadísticos que describen la frecuencia por revista y por autores.
Se analizaron 412 artículos escritos por 1.918 autores. En 37 (8,9%) artículos aparecieron declaraciones de conflicto de intereses que describían actividades concretas que podían generarlos, correspondiendo a 106 autores. Solo el 5,5% de los autores que publicaron en Atención Primaria, Medicina Clínica, Revista Clínica Española y Revista Española de Cardiología durante 2012 declaró alguna actividad susceptible de generar conflicto de intereses. Al examinar la tipología de las actividades, en 10 de los artículos (27%), todos ellos publicados en Medicina Clínica, se declaró la fuente de financiación del estudio, pero no se describían los posibles conflictos de intereses de los autores. En la tabla 1 se recoge la frecuencia de las actividades declaradas en los 27 artículos restantes (73%). En la tabla 2 aparece el número de autores que declara cada actividad, las que aparecen con mayor frecuencia son asesoría científica y consultoría, en el 52% de los artículos.
Número de artículos donde aparece cada una de las tipologías de conflicto de intereses
Tipo de conflicto de intereses | Atención Primaria | Medicina Clínica | Revista Clínica Española | Revista Española de Cardiología | Totala (sobre número artículos) |
---|---|---|---|---|---|
Asesoría científica-consultoría | 2 | – | – | 12 | 14 (52%) |
Trabajador/miembro del consejo | 1 | 3 | 2 | 4 | 10 (37%) |
Conferencias | – | – | – | 6 | 6 (22%) |
Ponencias | – | – | – | 6 | 6 (22%) |
Actividades formativas-presentaciones | 2 | 1 | – | 2 | 5 (18%) |
Ayuda viajes | – | 1 | – | 2 | 3 (11%) |
Investigación | 2 | – | – | 1 | 3 (11%) |
Becas-subvenciones | – | – | – | 2 | 2 (7%) |
Participación en el estudio | – | 1 | – | 1 | 2 (7%) |
Otros | – | – | – | 4 | 4 (15%) |
aEl total por revista puede sumar más que el número de artículos con DCI, porque en un mismo artículo se puede declarar más de un tipo de conflicto.
Número de autores que declaran cada tipo de actividad
Tipo de conflicto de intereses | Autoresa |
---|---|
Asesoría científica-consultoría | 55 (32%) |
Ponencias | 30 (18%) |
Actividades formativas-presentaciones | 19 (11%) |
Trabajador/miembro consejo industria | 14 (8%) |
Conferencias | 13 (8%) |
Becas-subvenciones | 10 (6%) |
Investigación | 9 (5%) |
Participación en el estudio | 7 (4%) |
Ayuda viajes | 5 (3%) |
Otras | 9 (5%) |
Hasta donde conocemos este es el primer estudio que analiza la tipología de las actividades declaradas por los autores en las revistas biomédicas españolas. En la escasa evidencia internacional disponible las relaciones más frecuentes siempre suelen ser la consultoría y ayudas diversas1–4. Al no existir definiciones estándar para dichas actividades, es posible que actividades similares se declaren con nombres diferentes. Sin embargo, la categorización ofrece una muestra altamente ilustrativa del tipo de actividades que están realizando los médicos en su relación con la industria y que pueden ser susceptibles de generar conflicto de intereses.