Nos encaminamos hacia el año 2010, 75 aniversario de nuestra sociedad; un año que se anuncia como una oportunidad para recordar nuestra historia y preparar, de una forma muy especial, el próximo Congreso Nacional de la SECOT combinado con el de la EFORT, que será, sin lugar a dudas, una oportunidad para impulsar nuevas ideas y encarar el centenario con el impulso que toda sociedad científica necesita.
En 2009, la SECOT sigue impulsando su ya conocido plan estratégico; se cumplen algunos objetivos, mientras que otros se irán desarrollando posteriormente. También aparecen imprevistos, por sexta vez nuestra revista ha sido rechazada para ingresar en Medline. Con diferentes presidentes, con distintos directores, de nuevo, nos quedamos fuera. ¿Las razones? Serán muchas y variadas, pero difíciles de conocer y comprender. Sin embargo, esto no quiere decir que haya que bajar los brazos o dar la espalda a un proyecto de tantos años, tan consolidado y de tanta historia para la traumatología española, que se ha convertido en el referente de nuestra sociedad.
Debo hacer un inciso para agradecer a Carlos Rodríguez Merchán sus muchos años de dedicación a la revista, y que, tras ver el resultado de la última evaluación de Medline, después de efectuar muchos cambios, siguiendo los informes anteriores, decidió poner su cargo a disposición de la Junta. Un gesto que señala su generosidad y categoría personal. Carlos ha sido y seguirá siendo un referente en la bibliografía traumatológica española y una parte muy importante de la historia de nuestras publicaciones.
Escribir en nuestra revista debe ser una referencia para todos los socios. Publicar un artículo en ella contribuye a mejorar nuestras actividades, a enseñar lo que se hace en nuestro país y al intercambio de opiniones. Además, es un aprendizaje para los más jóvenes, formación de revisores y un estímulo para cualquier servicio hospitalario. Es cierto que los artículos de la revista no están incluidos en Medline, pero eso no puede ser excusa para no enviar manuscritos. Los artículos publicados en la revista se encuentran en los buscadores más importantes. Todos los trabajos están disponibles en inglés en la página web de la SECOT y también de Elsevier, y, además, por Internet se puede descargar cualquiera de los artículos publicados en la revista.
En estos momentos, con la tranquilidad que nos da saber que no se puede intentar la indexación hasta el año 2012, tenemos tiempo para hacer la revista que los socios quieran y que cubra sus necesidades. Ni nuestra obsesión, como tampoco nuestro primer objetivo, debe ser su indexación, sino hacer una revista atractiva y útil para los socios.
Quisiéramos convertir la revista en la referencia de la traumatología y cirugía ortopédica de habla española. Para ello se han iniciado los contactos con la sociedad portuguesa y otras sociedades americanas para elaborar un proyecto paralelo de interés para todos y que consiga un peso específico en la comunidad internacional.
Necesitamos recuperar la ilusión. Siguiendo los estatutos aprobados en la última asamblea, celebrada en el Congreso de Valencia, el Presidente nombrará un nuevo Comité de redacción. Actualmente mi cometido como director de la revista, por encargo de la Junta, es temporal, hasta el final de este año. Me corresponde a mí ahora y al nuevo director, a partir de enero, dar a conocer a todos los traumatólogos de habla española la necesidad de transmitir nuestras experiencias clínicas y científicas en la revista, sabiendo que la calidad de la revista será el reflejo científico de nuestra sociedad.
