Introducción y objetivos: La fractura de fémur es una entidad prevalente en personas frágiles; así mismo, la fragilidad constituye un síndrome geriátrico complejo en el cual la pérdida de reserva multidimensional incrementa la vulnerabilidad del individuo a sufrir malos resultados de salud, especialmente en términos de mortalidad. La disponibilidad de una herramienta que correlacione el grado de fragilidad y el riesgo de mortalidad supondría un dato clave en la toma de decisiones individualizada del manejo del paciente. En el presente estudio se valora la capacidad predictiva de mortalidad del índice Frágil-VIG (IF-VIG) en pacientes que ingresan en una unidad geriátrica de agudos (UGA) con fractura de fémur.
Métodos: Estudio observacional longitudinal prospectivo de una cohorte de pacientes que ingresaron con fractura de fémur en una UGA a lo largo del año 2014, realizando posterior seguimiento hasta 24meses o constar defunción. Los participantes fueron clasificados según la puntuación de su IF-VIG basal en 5 grupos: 0-0,35; 0,36-0,45; 0,46-55; 0,55-0,65, y 0,66-1). Se ha realizado un contraste de hipótesis log-rank para las curvas de supervivencia según IF-VIG y análisis de curvas ROC para determinar la capacidad pronóstica.
Resultados: Se incluyeron 103 pacientes (edad media de 87,4años, 73,8% mujeres). La mortalidad a los 3, 6, 12 y 24meses fue del 16,5, del 24,3, del 36,9 y del 47,6%, respectivamente. Para cada una de las distintas puntuaciones del IF-VIG, las curvas de supervivencia muestran diferencias significativas entre ellas (χ2106, p<0,001). El área bajo la curva (AUC) ROC a los 3, 6, 12 y 24meses fue de 0,90 (0,83-0,97), de 0,90 (0,82-0,97), de 0,91 (0,86-0,97) y de 0,88 (0,81-0,94), respectivamente.
Conclusiones: La situación basal del paciente con fractura de fémur condiciona de forma clave el pronóstico: la mortalidad aumenta con el tiempo, estando relacionada con el grado de fragilidad. El IF-VIG se demuestra como buena herramienta para predecir mortalidad, con capacidad discriminativa para los diferentes grados de fragilidad.
Ante estos resultados, podríamos utilizar el índice en situaciones de complejidad clínica para prever resultados de salud, realizar un diagnóstico situacional y adecuar la intensidad del tratamiento y el uso de recursos de forma individualizada.