Objetivos: Validar un índice de fragilidad social en población chilena adulta mayor que vive en la comunidad.
Método: Estudio transversal realizado en una muestra aleatoria de 540 personas mayores que viven en la comunidad en dos comunas vulnerables de Santiago de Chile. Previa aprobación del Comité de Ética, se aplicó un cuestionario para medir variables sociales tales como la sub-dimensión de fragilidad social del instrumento Tilburg Frailty Indicator (TFI), la Escala de soledad de Hughes y la Escala multidimensional de percepción de apoyo social. Para el análisis de datos se usaron análisis descriptivo y analítico: se realizó un análisis de confiabilidad (coeficiente alfa de Cronbach) y validez (Kaiser-Meyer-Olkin y análisis factorial de segundo orden). Se consideró significativo un valor de p<0,05.
Resultados: El coeficiente alfa de Cronbach fue utilizado para medir la confiabilidad, que para este índice fue de 0,75. Para el análisis de la validez, la medida de adecuación muestral Kaiser-Meyer-Olkin (KMO) fue 0,69 y la prueba de esfericidad de Bartlett fue significativa (p<0,01); por lo tanto, se realizó un análisis factorial. En el análisis factorial de segundo orden llevado a cabo con los 18 ítems de los instrumentos anteriormente señalados se obtuvo una chi-cuadrado de 246,049 con 127 grados de libertad y un valor p<0,001. El RMSEA fue 0,042, con un intervalo de confianza del 95% entre 0,034 y 0,050; por debajo del valor 0,05, confirmando el buen ajuste. Las cargas factoriales estandarizadas son adecuadas y significativas (p<0,001). Los índices de modificación no sugieren considerar correlación adicional entre los ítems. Los componentes que mejor describieron la fragilidad social de las personas mayores que viven en la comunidad se agruparon en 3 dominios: percepción de soledad, percepción de apoyo de amigos y percepción de apoyo del núcleo familiar.
Conclusiones: Se creó un índice valido y confiable para medir fragilidad social en personas mayores que viven en la comunidad. Es urgente avanzar en la creación de evidencia científica que contribuya a re-definir el concepto de fragilidad social creando instrumentos que sirvan como un indicador para la determinación de intervenciones con las personas mayores que viven en la comunidad.