Se presenta la implementación de una intervención terapéutica específica, previamente estructurada y validada científicamente, para cuidadores de enfermos de Alzheimer (EA), en 4 provincias del territorio español durante el año 2017.
Objetivos:
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Implementar en 4 territorios una misma metodología de trabajo.
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Mejorar el bienestar emocional de los cuidadores a través de una terapia grupal estructurada y validada.
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Facilitar la adhesión al tratamiento con la atención paralela de los familiares con EA.
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Romper el aislamiento social de los cuidadores y allegados con EA.
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Ofrecer herramientas para un mejor afrontamiento del cuidado y crear un espacio para la gestión de sus emociones.
Método: Se formó a los 4 terapeutas de las 4 provincias. Todos ellos ya tenían experiencia previa en programas relacionados con la EA. Con el fin de facilitar la asistencia al grupo, el programa contempló un servicio de acogida a las personas con Alzheimer bajo la supervisión de un profesional.
La terapia consistió en 14 sesiones de 90min durante 3meses y medio (frecuencia semanal). Posteriormente se llevó a cabo una sesión mensual para reforzar los resultados obtenidos y lograr una despedida menos brusca. También se realizaron 3 salidas de ocio preparadas específicamente para cada grupo, pudiendo acudir a estas la díada cuidador y familiar con EA.
Se administró un cuestionario que reunía variables sobre el bienestar, sobrecarga, resiliencia, estado anímico y apoyo social, una escala de satisfacción y otro sobre los aprendizajes conseguidos (hechos al uso).
Resultados:
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Éxito del aprendizaje del método por parte de los terapeutas y homogeneización del procedimiento.
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Mejoras en el bienestar de los cuidadores.
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Altos niveles de satisfacción por parte de los cuidadores.
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Valoración cualitativa altamente positiva.
Conclusiones: La intervención desarrollada en los 4 centros ha sido beneficiosa para los cuidadores de personas con Alzheimer. La valoración de la terapia ha sido altamente positiva. Los cuidadores aprendieron técnicas y comportamientos para el mejor manejo de la enfermedad. Encontraron un lugar seguro donde expresar y aprender a gestionar sus emociones. Al tratarse de una terapia grupal, rompieron con el aislamiento y su sensación de apoyo aumentó.
