EDITORIAL
Rev Esp Geriatr Gerontol 1998;33(3):129-134
Luces y sombras en nuestro pasado: historia del órgano de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología
Fernando Jiménez Herrero
No se concibe una sociedad científica sin una publicación propia, como su órgano de expresión que lleve no sólo a sus miembros sino también a los curiosos o interesados por sus ideas, proyectos, realizaciones, convocatorias, informaciones, controversias, consejos, datos de realidades y de investigaciones, etc.
Cuando nace la Sociedad Española de Gerontología (SEG) el 17 de mayo de 1948, al aprobarse su primer reglamento, en el capitulo VI del mismo, artículo 23, se dice que: «Se publicará una revista que será el órgano de la Sociedad, repartiéndose cada tres meses entre los socios, al precio de 300 pesetas por los cuatro números de cada año».
Tal deseo general de todos los miembros era un empeño preferente de toda la primera Junta Directiva, y especialmente de su presidente, el Profesor D. Manuel Beltrán Báguena, el cual, pese a sus esfuerzos, no pudo tener en sus manos el primer número de «Revista Española de Gerontología», aparecido pocos meses después de su fallecimiento, precisamente con su fotografía seguida de la noticia de su muerte, comentada muy sentidamente por el Dr. Emilio Alcalá Llorente, que había sido Secretario de la SEG y colaborador directo e íntimo del Profesor Beltrán Báguena en Valencia.
PUBLICACIONES PRECURSORAS DE NUESTRA REVISTA
Desde los primeros meses de existencia de la SEG trata el Prof. Beltrán Báguena de hallar un editor interesado en llevar a la realidad su proyectada revista, consiguiendo solamente que su amigo Aurelio Gámir, titular del laboratorio de Valencia de igual nombre, iniciase la publicación de «Notas clínicas y terapéuticas sobre Geriatría», unos modestos folletos de 16 páginas, cuyo realizador era el Dr. Rafael Báguena Candela, médico ayudante por oposición de la Cátedra de Patología Médica de la Facultad de Medicina de Valencia, del Profesor M. Beltrán Báguena y becario del Centro de Estudios Geriátricos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas que dirigía también el Profesor M. Beltrán Báguena.
De las 16 páginas, tres las ocupaban la publicidad de los productos Gámir y en las restantes Báguena Candela dedicaba una o dos a comentarios bibliográficos de interés geriátrico, ocho o nueve notas informativas de cuestiones clínicas geriátricas, ya terapéuticas, ya de diagnósticos, etc.
Una la dedicaba a glosa de viejos ilustres como Goya, Bernard Shaw, Goethe, Newton, Calderón de la Barca, etc. Otra página, titulada noticiario, informaba tanto del I Congreso Español de Geriatría (Barcelona, 1950), como del I Internacional de Gerontología (Lieja, julio 1950), como de amenidades de curiosidad gerontológica muy heterogéneas.
Pero las «Notas clínicas y terapéuticas sobre Geriatría» apenas duraron tres años, ya que desde 1952, continuaron pero compartiendo páginas en un mismo folleto que incluía notas clínicas y terapéuticas de Cardiología, Gastroenterología y Tisiología, además de Geriatría, ésta reducida ahora a 12 páginas, de las cuales tres eran de publicidad. En ellas había sitio para noticias como el inicio de la publicación del «Journal of Gerontology and Geriatrics», el nombramiento del Dr. Emilio Alcalá Llorente como médico del Dispensario de Geriatría de Valencia, la concesión del Premio de la Fundación Roel al Dr. José Báguena Candela, etc. No había espacio para artículos originales, sólo cabían breves referencias de media o una página de publicaciones extranjeras, casi siempre norteamericanas.
Al fin de los años cincuenta, las «Notas clínicas y terapéuticas geriátricas» desaparecieron.
EL PRIMER NUMERO DE REVISTA ESPAÑOLA DE GERONTOLOGIA
En diversas reuniones de la Junta Directiva de la SEG en los primeros años «sesenta» el tema de la imperiosa necesidad de crear una revista órgano de expresión de la misma vuelve a surgir, toda vez que la SEG era muy poco conocida, ya que apenas tenía 50 miembros, todos médicos, la mitad de Madrid, y fuera de España sólo sabían de ella los directivos más destacados de la International Association of Gerontology, cuando ésta celebraba un Congreso.
La renovación generacional que supuso la constitución de una nueva Junta Directiva el 30 de enero de 1965, en la que entraron como Secretario el Dr. Alberto Salgado Alba y como Tesorero el Dr. José Serrano Galnares, ambos médicos de la Gran Residencia de Ancianos de Madrid, fue decisiva para dar un nuevo dinamismo a la SEG y fundamental para poner en marcha por fin la publicación: Revista Española de Gerontología.
En reunión posterior, el 28 de abril de 1965, ya se gestionaba con un editor de Madrid y se dieron nombres de posibles responsables de su equipo de redacción, como los doctores Francisco Guillén Llera, E. Soleto Sáez, E. Martí Palacios, J. M. Mola Mayayo, Juan Zubizarreta y un nombre de médico catalán miembro de la SEG, que no llegó a concretarse.
El 18 de diciembre de 1965, en otra reunión de la Junta Directiva, celebrada en Madrid, en Villanueva 11, sede del Consejo General de Colegios Médicos de España, se tomó el acuerdo de que la editorial GARSI, que dirigía D. Francisco García Sicilia (Senior), padre de su sucesor en la dirección de la misma D. José García Sicilia, actual propietario y responsable de empresas de «Organización y Documentación Científica», etc., fuese la encargada de realizar la revista, ocupándose de su impresión, publicidad y distribución.
Por fin antes de concluir el año 1966, salía el primer número de Revista Española de Gerontología, siendo su Redactor Jefe el Dr. J. Serrano Galnares, su Secretario el Dr. Alberto Salgado Alba y sus secretarios de redacción los doctores F. Guillén Llera, A. Lavin y J. L. Muñoz. Disensiones, motivadas por desacuerdos en la Junta Directiva hicieron que hasta 1975 la Revista no tuviese nombrado un Director, lo que influyó algún tiempo en su contenido y desarrollo.
La Revista tenía un tamaño modesto de 24 por 16, 5 centímetros y 110 páginas, siendo sus primeros anunciantes los laboratorios Lacer, Abelló, Llorente, Castillón, MSD y Galup. Su tirada inicial era de apenas 200 ejemplares.
El número uno, además de dar cuenta del fallecimiento del Profesor Dr. D. Manuel Beltrán Báguena, publicaba el «Reglamento de la SEG» y la relación de sus miembros, en la que estábamos 92 médicos, de los cuales estamos vivos una veintena, treinta y tres años después.
El contenido de dicho primer número era de discursos, ponencias y comunicaciones del III Congreso Nacional de Gerontología, que había celebrado la SEG a finales de junio de aquel año 1966 en la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid.
El Dr. Jesús Calvo Melendro y su esposa Pilar Sánchez-Malo eran los primeros nombrados como autores de una ponencia. Salgado Alba, Serrano Galnares y Francisco Roca Roca, los siguientes autores, cuyas comunicaciones a dicho Congreso se reseñaban.
| Tabla I. Redactores Jefes | |
| Dr. José Serrano Galnares | 1966-1975. |
| Dr. Francisco Guillén Llera | 1975-1985. |
| Dr. José Manuel Ribera Casado | 1986-1995. |
| Dr. Juan Ignacio González Montalvo | 1996. |
REVISTA ESPAÑOLA DE GERONTOLOGIA HASTA 1975
Muchas fueron las dificultades o carencias que tuvo nuestra revista en su primera década de vida pero a pesar de ellas, fue adelante, aumentando de año en año su difusión, pero no mucho su calidad, en principio por tener pocas colaboraciones originales en que escoger y no haber establecido aún normas de publicación. De 1970 a 1975, pasa de una tirada de 300 ejemplares a 500, pues la SEG crece llegando a los 200 miembros en 1972 y a 263 en 1974.
La Revista Española de Gerontología comienza a ser conocida en el extranjero y especialmente en los países iberoamericanos desde 1969, de tal manera que en los años «setenta» ya tiene una veintena de suscriptores en dichos países, incluso alguno en la isla de Guan en Oceanía y en Israel.
El Dr. Lorenzo Figallo Espinal, de Venezuela, fue su primer colaborador extranjero en 1969; en años sucesivos serán los argentinos Tursi, Levitin, Mario Strejelevich, Len y otros, el brasileño Mario Fellizzola, el inglés Irvine, etc. El interés de los colegas iberoamericanos hacia nuestras páginas motivó la inclusión en ellas desde entonces de noticias de encuentros geriátricos y gerontológicos de sus países.
La creación del Premio Beltrán Báguena al mejor artículo publicado o remitido a ella, inicialmente dotado sólo con 5.000 pesetas, también contribuyó a darla a conocer y a despertar interés en mejorar sus textos a algunos colaboradores. El primer año, 1971, fue declarado desierto, dándose dos accésit a los trabajos de Juan Soler Cantó de Cartagena y Roberto Néstor Tursi de Argentina. El primer Premio Beltrán Báguena se concedió en 1972 al Dr. Jaime Miquel Calatayud, doctor en Farmacia, entonces investigador de la NASA en California (USA), por su trabajo sobre el envejecimiento en el espacio extraterrestre de la mosca drosófila. En años sucesivos se concedió a autores de países hispanoamericanos, lo que contribuyó al conocimiento mas allá de nuestras fronteras de la SEG y de su órgano de expresión, cada vez mas solicitado en ellos. El Dr. Fernando Perlado mereció el citado premio en 1974, que dos años antes había sido concedido al equipo de Geriatría del Hospital de Cruz Roja en Madrid (Drs. J. Díaz de la Peña, A. Salgado, F. Guillén Llera y J. L. García Fernández).
La sección Resúmenes de revistas, existió desde los primeros números, si bien no se reseñaban muchas. Geriatrics, Giornale de Artriosclerosis, British Journal of Geriatric Practice, Giornale di Gerontología y J. Gerontology, eran las más frecuentemente referenciadas.
Aunque todos los miembros de la SEG eran médicos y por lo tanto la mayoría de los lectores de su Revista también lo eran, el contenido de sus páginas siempre era interdisciplinario, tanto en cuanto a temas expuestos en los congresos de la SEG, como en los elegidos por sus colaboradores, entre los que iba en cabeza en cuanto a artículos publicados el Dr. Jesús Calvo Melendro, de Soria, generalmente en colaboración con su esposa, la Dra. Pilar Sánchez Malo. Le seguía en número de publicaciones el Redactor Jefe, Dr. Serrano Galnares, que insertaba cuanto se le ocurría escribir, aunque el asunto fuera meramente protocolario y personal. Otros autores que eran frecuentes colaboradores fueron los Drs. Marti Palacios y Evangelista Benítez, director de la entonces llamada «Ciudad Sanitaria La Fe» de Valencia. El Presidente de la SEG, Dr. Pañella Casas, publicó media docena de trabajos en el decenio que comentamos, de temas muy variados. Su colaborador, el Dr. L. Espinós Tayá, ocupó muchas páginas con su tesis doctoral y otros trabajos sobre electroforesis.
Futuros importantes y frecuentes colaboradores de la Revista comenzaron sus aportaciones habituales a la misma en los años «setenta». Entre ellos estaban: Fernando Perlado Ortiz de Pineda, de Zaragoza, el Profesor Miquel Mari, de la Facultad de Medicina de Madrid, el Dr. F. J. Florez Tascón, también de Madrid, el Dr. José Garay Lillo, de Valencia, y el que suscribe, Dr. Fernando Jiménez Herrero, que inició sus colaboraciones en 1968 y comenzó en 1974 a realizar reseñas de libros de contenido geriátrico o gerontológico, haciendo 16 en dicho año, que fue de hecho el de comienzo de la Sección de Bibliografía Geriátrica que aún mantiene actualmente.
Pero quienes comenzaron a realizar buenas y frecuentes colaboraciones desde los primeros años «setenta» a la Revista Española de Gerontología fueron los componentes del equipo de Geriatría del Hospital Central de Cruz Roja Española en Madrid, que dirigía el Dr. Alberto Salgado Alba y en el que destacaban por su dinamismo los Drs. Francisco Guillén Llera, J. L. García Fernández, J. Díaz de la Peña, entre otros. Una prueba de dicho dinamismo es que en el año 1974 ya se anunciaba el XVII Curso de Geriatría para médicos de dicho servicio. También aquel año se anunciaba el Curso de Doctorado en Geriatría en la Facultad de Medicina de Valencia, interrumpido al fallecer el Profesor M. Beltrán Báguena, lo dirigía ahora el Profesor Dr. Javier García Conde, coordinándolo el Dr. Emilio Martínez Ramón.
| Tabla II. Secretarios Generales de la Revista | |
| Dr. Alberto Salgado Alba | 1966-1975 |
| Dr. Manuel Martín Alvarez | 1975-1985 |
| Dr. José Luis García Sierra | 1986-1992 |
Dr. Gonzalo Bravo Fernández de Araoz | 1993 |
CAMBIOS Y PROGRESOS DE 1975 A 1985
La Asamblea Plenaria de la SEG celebrada en mayo de 1975, al final del Congreso realizado en Palma de Mallorca, en el que hubo mas de 400 asistentes, produjo un gran cambio en la Junta Directiva de la SEG, al nombrar presidente al Dr. Alberto Salgado Alba y designar director de la Revista al autor de este artículo, poniendo en su equipo como Redactor Jefe al Dr. Francisco Guillén Llera y como Secretarios de Redacción a M. Martín Alvarez, J. Díaz de la Peña, J. L. García Sierra y A. Lavin Cobo.
Era importante y novedad que por primera vez había en la Junta Directiva una mujer, trabajadora social: María de los Angeles García Antón, que junto con Inés Pérez Calahorra y otras asistentes sociales realizarían artículos de contenido socio-sanitario, novedosos en aquellos años.
Se comenzaron a publicar seis números cada año desde 1975, en que la Revista cumplía 10 años y desde dicha fecha se insertaron las normas para la admisión de los trabajos, que aunque no muy rigurosas, se procuraba fuesen cumplidas por todos los autores.
Se mantuvo e incrementó la colaboración de colegas hispanoamericanos y europeos. De ellos algunos hoy desgraciadamente fallecidos como los Drs. A. J. Papeschi y Mario Strejelevich de Argentina, Prieto de Nicola de Italia, Jean Pierre Junod de Ginebra, Guillermo Marroquín de Bogotá, E. Contreras C. de Lehr de México, Rufino Arévalo París de Paraguay, Alberto C. Morelli de Montevideo, etc.
Otros colaboradores extranjeros de entonces se hallan aún felizmente activos en la actualidad como los Drs. Roberto Kaplan, Roberto Barca, Roberto Tursi, Liliana B. de Gastron, Haydee Andrés, todos ellos de Buenos Aires, V. Pietro Grande de Italia, J. Richard de Ginebra, A. Ciuca entonces en Bucarest, Budapest, Eric Wilkes de Sheffield, E. Vivanco Eguiluz entonces en Perú, Nelson Goldstein de Uruguay, Robert Hugonot de Grenoble, Eduardo A. Álvarez de Nueva York, Joaquín González Aragón de México, A. Flores Colombino de Montevideo, Isabel Berry de Rosario (Argentina), P. M. Agudelo y Nelly Herrera de Colombia, J. A. Yesavage de Stanford, Philippe Pitaud de Marsella, Jaime Motlis y Galinski de Israel.
Entre las notas necrológicas que hubo que lamentar en este período que comentamos, son de destacar la de Gabriel Navarro Manuel, Vicepresidente, Julio Morán Garcés, delegado de la SEGG ante el Consejo General de Colegios Médicos, Julio Martín del Molino miembro directivo muchos por Salamanca, entre otros.
De los editoriales, que a la vez eran en ocasiones informaciones comentadas, el mas importante fue el aparecido en septiembre de 1978, que daba cuenta del Real Decreto del 15 de julio en el cual ya se reseñaba Geriatría como nueva especialidad médica y se comentaba la formación de la primera Comisión Nacional de la misma. El editorial mas sentido fue el del número 5 de 1982 que daba cuenta del fallecimiento del Dr. Mariano Pañella Casas, segundo presidente de la SEG.
De las informaciones merece destacar la que dio cuenta de la presencia de S. M. la Reina Dª Sofía en la inauguración del Hospital de Día del Servicio de Geriatría del Hospital de la Cruz Roja de Madrid en noviembre de 1979.
Fue un estímulo para la Revista recibir en 1977 el Premio de la Real Academia Nacional de Medicina, como publicación mas actual y novedosa del año.
También hubo años de «vacas flacas económicas», al final de los años setenta, que afortunadamente fueron pocos y se superaron, con ayuda de la SEGG.
Sin embargo, el Premio «Beltrán Báguena», que ya se triplicó en cuantía en los primeros años de su existencia, llegó a tener una dotación diez veces superior a la inicial a los diez años de haber sido creado.
En este período se producen dos cambios importantes en el título de nuestra cabecera, ambos motivados por modificación de denominación de la Sociedad Española de Gerontología, que pasó a llamarse Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG) de acuerdo con sus sucesivos reglamentos que tenían en cuenta así de un modo más real su composición: mayoritaria de médicos orientados o dedicados a la Geriatría, pero con interés creciente hacia los problemas y estudios gerontológicos. Desde el número 1 del tomo XII, enero de 1977, pasamos a ser Revista Española de Gerontología y Geriatría; era el año en que la SEG cumplía treinta años de existencia. La nueva cabecera se mantuvo tres años, ya que desde el número 1 de 1980, en que la revista cumplía 15 años, pasará a denominarse definitivamente Revista Española de Geriatría y Gerontología.
Esperado durante muchos años el reconocimiento de la Geriatría como especialidad, cuando éste se produjo, fue acogido en nuestras páginas con un moderado optimismo, ante la incertidumbre y temores del desarrollo de una anunciada Ley de Reforma Sanitaria, en la que apenas se tenía en cuenta la problemática especial de los ancianos y la desilusión de la escasa escucha que tenían las peticiones, sugerencias o ruegos que formulaba la recién creada Comisión Nacional de la Geriatría, que comenzaba a tener sus primeras reuniones y a tomar sus acuerdos iniciales.
Vientos de modernidad en la editorial Garsi, realizadora de nuestra revista, y deseos de los nuevos miembros del equipo de redacción, motivaron un cambio de imagen y de formato en ella a partir del primer número de 1982, en que comienza a tener 25 por 19 centímetros, aproximándose a su formato actual de 28 por 21 centímetros.
Ya en los iniciales años ochenta se apreciará la colaboración de los primeros médicos residentes que empezaban la formación vía MIR en Geriatría, como los doctores Isidoro Ruipérez, Pedro Gil Gregorio, J. Illán Moyano, I. Pérez Millán, Rosario Padilla Toledano, etc.
La creación del Servicio de Geriatría del Hospital Clínico Universitario de San Carlos de la Facultad de Medicina Complutense de Madrid, bajo la dirección del profesor José Manuel Ribera Casado, aumento en calidad y cantidad los originales que se recibían en la Redacción.
| Tabla III. Secretarios de Redacción | |
| Dr. Francisco Guillén Llera | 1966-1975 |
| Dr. Angel Lavin Cobo | 1966-1979 |
| Dr. José Luis Muñoz | 1966-1972 |
| Dr. Juan Díaz de la Peña | 1975-1985 |
| Dr. José Luis García Sierra | 1975-1986 |
| Dr. Antonio Carbonell Collar | 1986-1991 |
| Dr. Juan Carlos Caballero García | 1986-1990 |
| Dr. José María Reuss Fernández | 1983-1992 |
| Dr. Pedro Gil Gregorio | 1990-1995 |
| Dr. Juan Ignacio González Montalvo | 1992-1995 |
| Dra. María Izal Fernández de Trocóniz | 1996 |
Dr. José Antonio Serra Rexach | 1996 |
DE 1985 A 1997
El 4 de mayo de 1985, el Pleno de la SEGG celebrado en Salamanca, eligió Presidente al Dr. F. Jiménez Herrero, pasando a ser Director el Dr. Francisco Guillén Llera, que llevaba ya diez años como Redactor Jefe, cargo éste que desempeñaría desde enero de 1986 a diciembre de 1995 el profesor Dr. José Manuel Ribera Casado, el cual imprimió un nuevo ritmo a la revista, mejorándola notablemente, tanto elaborando normas de redacción más severas y lógicas, como buscando nuevos colaboradores, eligiendo jueces encargados de valorar los trabajos remitidos de tal forma que de cada cuatro o cinco originales recibidos sólo uno pasa a impresión y muchas veces luego de varias correcciones en la presentación para ajustarse a las normas internacionales que siguen las revisas médicas, de más importantes. Como consecuencia de la espléndida labor de los doctores Francisco Guillén Llera y José Manuel Ribera Casado, cuando en 1989 el autor de estas líneas es designado nuevamente director, halla la publicación prestigiada, en franca difusión creciente, profundamente renovada, bien clasificada entre las revistas de su especialidad y entre todas las de las demás especialidades médicas.
En el Index médicus español ocupaba el quinto lugar por su tirada y calidad. Como revista de Geriatría y Gerontología sólo era superada por dos publicaciones norteamericanas y una británica, estando a la par y en algunas cuestiones por delante de las revistas francófonas e italianas.
La Revista pasó de tiradas de 1.000 ejemplares a 3.000 en diez años, siendo cada vez más referenciada en otras publicaciones científicas, como por ejemplo en las de Springer Publishing Company de Estados Unidos, Nankodo Publisher de Japón y también en IME, Medicine, Embase, Bibliomed, Biosis, Pascal, etc. Es miembro de Asociación de Prensa Profesional y publicación controlada por OJD. Desde 1996 se halla en Internet (www.masson.es).
Desde 1986 publica números monográficos o especiales, que reseñamos en la tabla IV, y todos los años dedica uno a Cardiología geriátrica, que coordina el Profesor Ribera Casado.
| Tabla IV. Relación de números monográficos | |||
| Año | Tomo | Mes | Título |
| 1986 | XXI | Abril | Calcioantagonistas en Geriatría. |
| 1989 | XXIV | Enero | Envejecimiento, membrana neural y demencias. |
| 1989 | XXIV | Mayo | Farmacología y Terapéutica geriátrica. |
| 1990 | XXV | Mayo | Comunicaciones XVIII Congreso en Las Palmas de Canaria. |
| 1991 | XXVI | Septiembre | Libro de resúmenes del II Congreso Europeo de Gerontología. |
| 1991 | XXVI | Septiembre | Simposio Grupo Demencias. Ibermédica 1991. |
| 1992 | XXVII | Diciembre | Geriatría y Gerontología en Ibero-América. |
| 1992 | XXVII | Diciembre | Comunicaciones II Congreso Iberoamericano. V Centenario. Sevilla. |
| 1992 | XXVII | Diciembre | Análisis de la atención institucionalizada al anciano. |
| 1993 | XXVIII | Julio | Nutrición. |
| 1993 | XXVIII | Septiembre | Comunicaciones XVI Reunión SEGG en Gijón. |
| 1993 | XXVIII | Noviembre | Envejecimiento y condición femenina. |
| 1993 | XXVIII | Diciembre | Rehabilitación geriátrica: Actualización 1993. |
| 1994 | XXIX | Mayo | Comunicaciones XX Congreso SEGG en Santander. |
| 1994 | XXIX | Junio | Salud y Asistencia Geriátrica. |
| 1994 | XXIX | Diciembre | Arquitectura, urbanismo y envejecimiento. |
| 1995 | XXX | Mayo | Política social y atención gerontológica a mayores dependientes. |
| 1995 | XXX | Junio | Comunicaciones XVII Reunión de la SEGG en Zaragoza. |
| 1995 | XXX | Diciembre | Sexualidad y envejecimiento. |
| 1995 | XXX | Diciembre | Envejecimiento saludable. |
| 1996 | XXXI | Junio | Comunicaciones XXI Congreso SEGG en Salamanca |
| 1996 | XXXI | Diciembre | Centros de día Psicogeriátricos. |
| 1997 | XXXII | Junio | Comunicaciones XVIII Reunión de la SEGG en Lugo. |
| 1997 | XXXII | Diciembre | Fragilidad en el anciano. |
| 1997 | XXXII | Diciembre | Promoción de la Salud y prevención de la enfermedad. |
En los últimos diez años se han creado nuevas secciones como: «Tesis doctorales» y «Un rincón para la poesía», manteniendo las de cartas al director y opinión personal.
El número de jueces evaluadores se ha duplicado en los últimos seis años, incluyendo en ellos algunos extranjeros.
En 1994 se realizó el cambio de la primitiva sede de editorial Garsi en la calle Londres a la actual de Masson-Salvat en Juan Bravo, 46, en la que quincenalmente se reúne el Comité de Redacción, que realiza la nada fácil tarea de hacer que se cumplan las normas de publicación conforme a los requisitos convenidos internacionalmente para las revistas biomédicas por las más difundidas y prestigiosas de ellas, y al mismo tiempo publicar textos originales o novedosos por su tema y ser justos en dar ocasión de expresión a personas o equipos que por sus esfuerzos en investigación o en favor de mejorar la calidad de la asistencia merecen ser más conocidos.
Cada año nuevos colaboradores, no sólo médicos, sino psicólogos, sociólogos, biólogos y de otras disciplinas aparecen en nuestras páginas, en las que los equipos asistenciales y docentes de las más estimadas instituciones tienen interés en ver reproducidos sus trabajos.
Comparando en una rápida ojeada los títulos que aparecen en los sumarios de cada número de la actual década, con los de las anteriores, un atento observador puede apreciar las diferentes inquietudes, intereses o preocupaciones de geriatras, gerontólogos y colegas de otras especialidades que tienen relación con la vejez y sus problemas, ahora más interesados en la búsqueda de la calidad, de la eficiencia, de la economía o medida de los costos, en dar con los métodos más racionales y útiles de valoración de los problemas. También tan preocupados como antaño sus predecesores por el porvenir de su dedicación e inquietudes, que es el futuro de la atención de los viejos y su calidad de vida, que el día de mañana será la de ellos mismos.
Revista Española de Geriatría y Gerontología es fiel órgano de expresión de la Sociedad que la creó y mantiene, pero también es foro abierto a la actualidad gerontológica y geriátrica de nuestro país, de nuestros vecinos de la Unión Europea y hermanos iberoamericanos, aceptando los trabajos que tengan calidad, originalidad y aporten utilidad al progreso de la atención de los ancianos.
