Presentamos el caso de un paciente de 78 años de edad. Antecedente de hipertensión arterial, insuficiencia cardiaca congestiva, artrosis generalizada e implante de prótesis total de cadera derecha. Índice de Barthel de 30/100, no camina, con deterioro cognitivo moderado. Sin pareja, vive en una residencia. Presenta incontinencia urinaria de urgencia y utiliza colector urinario externo.
Ingresa por descompensación de la insuficiencia cardíaca. En el examen el pene presenta una gangrena seca que afecta toda su circunferencia con una línea clara de demarcación constrictiva provocada por la excesiva presión ejercida para asegurar la fijación del condón en la base del pene (fig. 1). No presenta sensibilidad, y los pulsos distales a la constricción están ausentes. El escroto, los testículos y los parámetros bioquímicos son normales. El Doppler peneano muestra ausencia de vascularización. Se retira el colector urinario y se medica con antibióticos de amplio espectro. Se efectúa la penectomía y cistostomía suprapúbica. No presenta complicaciones postoperatorias.
Los colectores urinarios son dispositivos externos de drenaje urinario principalmente indicados en pacientes postrados e incontinentes sin residuo posmiccional1. Varias complicaciones se han descripto en la literatura, incluyendo irritación de la piel, maceración, ulceración, reacciones alérgicas, infecciones del tracto urinario, formación de fístulas, edema peneano, isquemia localizada y gangrena2–5.
La gangrena total del pene debida al uso de un colector urinario externo es una complicación muy rara. Se han descripto menos de una decena de casos en la literatura mundial6–9. En nuestro paciente, la gangrena seca del pene se produjo debido al efecto constrictor prolongado de la banda adhesiva para asegurar una mejor fijación en la base del pene. El mecanismo del desarrollo de la gangrena es similar al estrangulamiento por objetos metálicos. El efecto torniquete causa la congestión del pene por la disminución en el drenaje venoso y linfático. Si el efecto torniquete continúa, el flujo arterial también se ve comprometido, lo que resulta en isquemia progresiva y gangrena del pene. Dado que los adultos mayores suelen tener cambios arteriales ateroscleróticos subyacentes y comorbilidad, hay interferencia en el flujo de las arterias peneanas distales. Cualquier grado de obstrucción resulta en una mayor disminución del flujo sanguíneo a las arterias del pene y posteriormente lleva a una gangrena peneana. La mayoría de estas complicaciones aparecen fuera del ámbito sanitario donde el uso de este tipo de dispositivos queda en manos del propio paciente y del personal no sanitario.
El diagnóstico de esta condición se basa principalmente en el examen clínico, que incluye la evaluación de la temperatura local, el color, la sensibilidad y el pulso distal a la constricción de la banda. El estudio Doppler color del pene es útil para identificar el pulso y el flujo distal a la banda de constricción. La aplicación correcta y el cuidado rutinario de los catéteres de preservativos es importante para prevenir esta complicación. Es importante la educación o instrucción acerca del empleo de este tipo de dispositivos, tanto al propio paciente como al personal que se encarga de su atención. Se deben seguir algunas importantes pautas para el uso de colectores externos10.
La piel del pene debe ser inspeccionada una hora después de aplicar el colector para asegurar que el mismo no esté demasiado apretado. Es conveniente la movilización del dispositivo al menos una vez al día y la aplicación de la banda de fijación en zonas de piel diferentes con el fin de evitar los efectos de la misma sobre una única área de la piel de pene. Además es importante incidir en un adecuado aseo de la región genital con agua y jabón y su posterior secado. Se debe seleccionar en cada paciente el tamaño apropiado del colector. El condón debe enrollarse suavemente y aplicarse cinta adhesiva en la base de pene sin aplicar excesiva presión. El colector debe cambiarse cada 48h.
Si el paciente es asistido inmediatamente al inicio del problema, el pene puede ser rescatado mediante el retiro inmediato del dispositivo. La penectomía total y la uretrostomía perineal son necesarias si se ha establecido la gangrena. La derivación suprapúbica está aconsejada en pacientes inestables.
La gangrena peneana resultante de un condón aplicado incorrectamente es una condición rara pero seria. El diagnóstico inmediato y el tratamiento temprano son esenciales para evitar devastadoras consecuencias. La mejor forma de prevenir el problema es manteniendo una higiene estricta y el monitorización frecuente del dispositivo. Es muy importante que todas las personas involucradas en el cuidado de estos pacientes sean conscientes de las complicaciones potenciales asociadas con el uso del colector urinario externo.