Sr. Director: En la segunda actualización del Consenso de la Sociedad Española de Reumatología sobre terapia biológica en la artritis reumatoide (AR) publicado por los Rodríguez - Valverde et al1 se dice, en el apartado sobre evaluación previa y vigilancia del paciente en terapia anti-TNF, que «el antecedente de infección en una prótesis articular que no se ha retirado es una contraindicación al tratamiento biológico. En estos casos, antes de iniciar la terapia biológica, se debe realizar cirugía con eliminación radical de la infección y, si está indicado, reemplazo protésico». En una revisión sobre este aspecto, que presenté como miembro del panel de dicho Consenso, esta afirmación se apoyaba en lo que se dice en Update of BSR guidelines for prescribing TNF-alpha blockers in adults with rheumatoid arthritis del año 2002, que se repite en la actualización de julio de 20042, donde se excluye esta terapia en caso de «sepsis de una articulación protésica en los últimos 12 meses o indefinidamente si la prótesis no es extraída», y el el Consensus statement3, donde dice «no se iniciarán o serán interrumpidos en presencia de infecciones graves, incluyendo... prótesis infectadas... hasta que estas infecciones sean tratadas adecuadamente».
El Consenso de la Sociedad Española de Reumatología, de cuyo panel formaba parte el Dr. J.L. Andreu, aceptó (sin oposición manifiesta) el texto tal como fue publicado. Por otra parte, la situación clínica de la paciente que describen los autores4 sí se ajusta, a posteriori y a priori, a las recomedaciones de la Sociedad Española de Reumatología: fue intervenida quirúrgicamente (limpieza quirúrgica) y recibió antibióticos con eliminación radical de la infección, tal como dice el Consenso. No se afirma que la retirada de la prótesis sea obligatoria para erradicar la infección, aunque todos sabemos y la bibliografía médica indica que, hoy por hoy, esto es necesario (más tarde o más temprano) en la mayoría de los casos5. Cuando se utilizan agentes que se asocian a un mayor riesgo de infección, como los antagonistas del factor de necrosis tumoral (TNF) *, es imprescindible estar seguro de que una prótesis infectada, que puede compararse a una osteomielitis con presencia de material extraño, ha dejado de estarlo.