Sr. Director:
El nivel actual de interés en las terapias alternativas y complementarias debe inducirnos a tomar conciencia sobre un hecho que es evidente y a desarrollar medidas que puedan ser aplicadas en nuestra práctica cotidiana con el objetivo de seguir proporcionando una asistencia de calidad, a pesar de la diseminación de estas prácticas.
Los pacientes con enfermedades reumáticas que continúan recibiendo asistencia médica tradicional pueden estar tomando simultáneamente productos exóticos cuyas reacciones adversas e interacciones con los fármacos utilizados de forma habitual son desconocidas para los médicos. El ACR ha tomado posición al respecto, que puede resumirse de la siguiente manera1: las terapias que han sido evaluadas mediante estudios científicos rigurosos, demostrando un perfil de eficacia y seguridad adecuado, pueden incorporarse al régimen terapéutico disponible, pero las terapias no validadas deberán ser utilizadas con precaución. Existen algunas recomendaciones publicadas en revistas de elevado impacto2,3, que transcribo en las tablas 1 y 2, que pueden resultar útiles en nuestra práctica asistencial, y considero que complementan el excelente y oportuno editorial del Dr. Alegre4.