P-239. - EFICACIA A CORTO PLAZO DE LOS INHIBIDORES DE SGLT2 EN DOBLE O TRIPLE TERAPIA NO INSULíNICA EN DIABETES MELLITUS TIPO 2
Hospital General Universitario Gregorio Marañón, Madrid.
Introducción: El SGLT2 es un cotransportador que regula la reabsorción renal de glucosa, su inhibición por tanto aumenta la excreción urinaria de la misma. Actualmente contamos con fármacos capaces de lograr esta inhibición, representando una alternativa más en el tratamiento de la diabetes mellitus tipo 2 (DM2).
Material y métodos: Estudio descriptivo, retrospectivo de pacientes con seguimiento en consultas de Endocrinología de un hospital de tercer nivel, en el periodo de enero 2015 a enero 2016, en quienes se hubiera iniciado tratamiento con iSGLT2 añadido a una o más terapias no insulínicas. Se incluyeron DM 2 conocidos con al menos una visita de seguimiento tras el inicio del mismo. Se describen datos epidemiológicos, clínicos y analíticos. Resultados expresados como:% (variables cualitativas) y media y desviación estándar (DE) (variables cuantitativas).
Resultados: 53 pacientes, 37 varones (70%) y 16 mujeres (30%). Promedio de edad: 61,9 (± 10,4) años, con 10,4 (± 7,18) años de evolución de su DM2 y 149.4 (74.6) días de tratamiento con iSGLT2. (37,7% en doble y 62,2% en triple terapia). Se obtuvo reducción de peso de 90,4 (± 21,6) a 87,4 (± 21,4) Kg (p < 0,001), glucemia 172,9 (± 55,8) a 138,2 (± 33,6) mg/dl (p < 0,001), HbA1c 7,7 (± 1,3) a 7,2 (± 0,9)% (p < 0,001). Se alcanzó el objetivo de HbA1c≤ 7% en 46,6% de los pacientes, redujeron el 5% de su peso el 51% de ellos y el 15,1% [8] ambos objetivos. No hubo diferencias estadísticas en PA ni en el resto de parámetros bioquímicos analizados. Se registraron efectos secundarios en el 32,1%, principalmente poliuria (7 casos) e infecciones genitourinarias (5 casos), motivando la suspensión del tratamiento en 3 casos. Ningún paciente presentó CAD ni requirió ingreso debido a efectos secundarios.
Conclusiones: En la práctica clínica, los iSGLT2 añadidos a otras terapias no insulínicas consiguen mejorar el control glucémico, así como otros factores de riesgo vascular, con pocos efectos secundarios y en su mayoría leves, por lo que suponen una alternativa útil y segura para el tratamiento de los DM2.