18605 - EPICRANIA FUGAX: TRATAMIENTO CON TOXINA BOTULÍNICA
Servicio de Neurología. Hospital General de Elche.
Objetivos: La epicrania fugax es una cefalea paroxística que se inicia típicamente en la región craneal posterior e irradia rápidamente de forma ipsilateral hacia la nariz o el ojo. Puede acompañarse en ocasiones de síntomas autonómicos, presentando una duración variable.
Material y métodos: En este póster, presentamos el caso de una mujer diagnosticada desde hace años de neuralgia del trigémino, quien había recibido varios tratamientos para su cefalea (pregabalina, carbamazepina, eslicarbazepina, lacosamida y gabapentina), con mala respuesta al tratamiento. Las RM cerebrales sucesivas no mostraron alteraciones valorables. Rehistoriando a la paciente años más tarde, describe el dolor que no sigue territorio de trigémino, sospechando en ese momento probable epicrania fugax. Finalmente, dada persistencia de mal control, se inician infiltraciones de forma trimestral toxina botulínica, con clara mejoría, permitiendo iniciar el descenso de las dosis de fármacos.
Resultados: Realizando una búsqueda acerca de la epicrania fugax, existen pocos casos descritos acerca de esta entidad. En cuanto al tratamiento con toxina botulínica, únicamente hemos encontrado una publicación en la que se presentan dos casos que han recibido este tratamiento, en los que se describe buen control de síntomas tras el mismo.
Conclusión: Existen pocos casos descritos acerca de esta entidad. El tratamiento actualmente pasa por varios neuromoduladores, como la indometacina, amitriptilina, bloqueos anestésicos o inyecciones de corticoides trocleares, aunque la evidencia publicada acerca de esta entidad es todavía muy escasa. Se necesitarán más estudios que demuestren la eficacia de la toxina botulínica en el tratamiento de la epicrania fugax.