Objetivo: Evaluar la eficacia de la utilización de cloruro de etilo pulverizado como anestésico local en los puntos de inyección periareolar y establecer criterios de administración.

Material y métodos: La técnica de linfogammagrafía se realiza mediante la administración de cuatro milicurios de 99mTc-nanocoloide distribuidos en cuatro inyecciones vía intradérmica alrededor del pezón mamario. Para la técnica de punción es necesario desinfectar la zona con un antiséptico y posteriormente anestesiar la zona con cloruro de etilo de forma local por enfriamiento. Hemos realizado dicha técnica de pulverización en función de las manecillas del reloj, de forma que se administra la primera dosis en función de las manecillas del reloj: 12:00, 15:00, 18:00 y 21:00 respectivamente y en sentido horario. Se aplica cada pulverización justo antes de cada inyección.

Resultado: La aplicación de cloruro de etilo previa a la técnica de inyección disminuye la sensación dolorosa y evita los posibles riesgos de movimiento del paciente que conllevarían a una contaminación radiactiva areolar. Se consigue trabajar en una zona exangüe por la vasoconstricción producida por el enfriamiento local. Tras la adquisición de imágenes que se obtiene en dos sesiones (precoz y tardía), se realiza la técnica de medición con la sonda gammagráfica y hemos podido observar que no resulta necesario recordar cuál ha sido la zona de inyección primaria y consecutivas del radiofármaco.

Conclusiones: Para la medición de cuentas resulta muy necesario saber cuál ha sido la primera dosis inyectada. Gracias a la incorporación de esta nueva aplicación del anestésico local todos los profesionales conocen cual es el orden de las inyecciones administradas y la localización de ella sin que hayan estado presente en la técnica. El enfriamiento local que produce no interfiere en el resultado de la técnica de localización del ganglio centinela de mama.