Objetivo: El tratamiento con 177 lutecio unido a un análogo de somatostatina, en pacientes con tumores neuroendocrinos,se incorporó recientemente en nuestra unidad de Terapia Metabólica, siendo necesario protocolizar cuidados específicos de enfermería y normas de protección radiológica a aplicar durante el ingreso y al alta.

Material y métodos: Hemos establecido un procedimiento para la infusión de la dosis terapeútica y la solución de aminoácidos concomitante con ella. Bajo la supervisión del servicio de Protección Radiológica establecimos unas normas de radioprotección para adoptar en la unidad y al alta. La información se facilitó en el momento de la obtención del consentimiento informado al ingreso y al alta. Hasta la fecha se trataron 8 pacientes y realizamos un estudio observacional valorando la eficacia de nuestros protocolos y método de información, registrando número de incidencias y consultas ocurridas en cada ingreso. También evaluamos mediante encuesta, la confortabilidad del paciente durante el procedimiento, la calidad de los cuidados e información recibidos y la ansiedad generada en paciente y familia.

Resultado: Todo esto supone un mayor conocimiento de posibles incidencias durante el ingreso, mejor adaptación del paciente al procedimiento terapéutico y una disminución del número de consultas generadas por desconocimiento de efectos secundarios o dudas sobre las radiaciones ionizantes.

Conclusiones: Es necesario disponer de protocolos de cuidados específicos y de protección radiológica en una unidad de Terapia Metabólica. El nivel de ansiedad generado disminuye notablemente tanto en el paciente como en su familia con el conocimiento del procedimiento. Además disminuye la tasa de exposición de pacientes y familia, minimizando posibles efectos adversos. En definitiva, el uso de protocolos establecidos en Terapia Metabólica mejora la seguridad del paciente, la calidad asistencial y contribuye a una mejor adaptación del paciente a este tipo de tratamientos.