Objetivos: Explicar el procedimiento y resultados obtenidos con la gammagrafía de cortocircuitos derecha-izquierda, en este tipo de patologías.

Material y métodos: Las fístulas arteriovenosas pulmonares son malformaciones vasculares, generalmente congénitas, que consisten en comunicaciones entre una arteria y una vena pulmonar, por lo que se produce un shunt de derecha a izquierda. Puede presentarse hipoxemia, hipocratismo digital y poliglobulia. Frecuentemente se asocia con la enfermedad de Rendu-Osler-Weber. Su incidencia es de 2 a 3 casos por cada 100.000 habitantes. Se recomienda tratamiento en fístulas arteriovenosas pulmonares sintomáticas o mayores de 3 mm, mediante embolización o cirugía. Entre 2004 y 2011 se remitieron a nuestro Servicio 5 pacientes (4 adultos y 1 niño) para descartar esta patología. Se realiza la gammagrafía con inyección intravenosa directa de macroagregados de albúmina marcados con tecnecio, adquiriendo rastreo gammagráfico de cuerpo entero. En un sujeto sano sólo debe visualizarse el material radiactivo en los capilares pulmonares, ya que las partículas, en la mayoría de los preparados comerciales tienen un diámetro entre 10 y 30 micras y una vez administrados a través de una vena periférica, se desplazan hasta aurícula derecha, ventrículo derecho y quedan atrapadas en los capilares pulmonares debido a su tamaño. Con el rastreo gammagráfico se valora y cuantifica la existencia de cortocircuitos mediante la visualización de actividad en cerebro y riñón.

Resultados: En el 80% de los casos se visualizó paso del radiofármaco a circulación sistémica con depósitos patológicos en cerebro y riñón, obteniéndose cuantificaciones de shunt entre 10 y 41% (patológico por encima del 8%).

Conclusiones: La gammagrafía de cortocircuitos derecha-izquierda resulta muy útil en el diagnóstico y cuantificación de fístulas arteriovenosas pulmonares, ayudando así a plantear el tratamiento.