Existen diferencias tanto biológicas como socioculturales en las afecciones cardiovasculares. Las desigualdades en el pronóstico entre mujeres y hombres se deben a diversas variables, entre las que se encuentran factores de riesgo específicos de las féminas, discrepancias en las estrategias de tratamiento y diferencias fisiopatológicas.
ObjetivoIdentificar diferencias sexuales en pacientes que presentan un síndrome coronario agudo.
MétodosSe realizó un estudio observacional, analítico, de corte transversal, sobre diferencias de sexo en 170 pacientes con diagnóstico de síndrome coronario agudo egresados vivos de la Unidad de Cuidados Coronarios Intensivos del Hospital Clínico-Quirúrgico Comandante Manuel Fajardo en 2016 y 2017.
ResultadosLas féminas tuvieron asociación estadísticamente muy significativa con una media de edad mayor (68 vs. 62 p<0,01) y con el antecedente de hipertensión arterial (91,2% vs. 72,3% p<0,01). El hábito tabáquico mostró asociación estadísticamente significativa con los individuos varones (50,5 vs. 30,4% p=0,017). El sexo masculino tuvo una mediana de creatinina muy significativamente mayor (90μmol/L vs. 80μmol/L p<0,01). Las mujeres mostraron un mayor riesgo de complicaciones hemodinámicas (OR=3,11 IC 95%=1,20-8,04).
ConclusionesEn individuos con síndrome coronario agudo el sexo femenino se asocia con mayor edad, antecedente de hipertensión arterial y aparición de complicaciones hemodinámicas intrahospitalarias. Los varones se asocian con el hábito tabáquico y mayores concentraciones de creatinina sérica.
There are both biological and sociocultural differences in patients with cardiovascular diseases. Inequalities in the prognosis between women and men are due to several variables, including specific risk factors for females, discrepancies in treatment strategies, and pathophysiological differences.
ObjectiveTo identify gender differences in patients with acute coronary syndrome.
MethodsAn observational, analytical, cross-sectional study was carried out on the gender differences in 170 patients with a diagnosis of acute coronary syndrome who were discharged from the Intensive Coronary Care Unit of the Comandante Manuel Fajardo Clinical-Surgical Hospital in 2016 and 2017.
ResultsFemales had a statistically very significant association, with a higher mean age (68 vs. 62, P<.01) and with a history of arterial hypertension (91.2 vs. 72.3% P<.01). The smoking habit showed a statistically significant association with male individuals (50.5 vs. 30.4% P=.017). Males had a significantly higher median creatinine (90μmol/L vs. 80μmol/L, P<.01). Women showed an increased risk of haemodynamic complications (OR=3.11, 95% CI=1.20-8.04).
ConclusionsIn women with acute coronary syndrome, being female is associated with older age, a history of arterial hypertension, and the appearance of haemodynamic complications during admission. Males are associated with smoking habits and higher concentrations of serum creatinine.
La cardiopatía isquémica (CI) es la entidad ocasionada por un desequilibrio entre la oferta y la demanda miocárdica de oxígeno. Dentro de esta se incluyen los síndromes coronarios agudos (SCA), cuando el cuadro se establece o agrava de forma aguda1.
Los SCA a su vez se clasifican, según el electrocardiograma de 12 derivaciones, en síndrome coronario agudo con elevación del ST (SCACEST) y síndrome coronario agudo sin elevación del ST (SCASEST)1.
La entidad nosológica por excelencia, englobada dentro del SCACEST es el infarto de miocardio con elevación del ST (IAMCEST)2. Mientras tanto, el espectro clínico de los SCASEST es más amplio, e incluye al infarto de miocardio sin elevación del ST (IAMSEST) y a la angina inestable3.
La cuarta definición universal de infarto de miocardio define a este como una lesión miocárdica aguda (detectada mediante biomarcadores cardiacos) en el curso de una isquemia miocárdica aguda4.
Existen diferencias tanto biológicas (sexuales) como socioculturales (de género) en las afecciones cardiovasculares. Las desigualdades en el pronóstico entre mujeres y hombres se deben a diversas variables, entre las que se encuentran factores de riesgo específicos de las féminas, discrepancias en las estrategias de tratamiento y diferencias fisiopatológicas1.
Las diferencias biológicas características de la mujer que influyen en la CI distintivamente, incluyen la protección estrogénica endotelial y su pérdida (menopausia), una distribución grasa distinta, mayor disfunción microvascular coronaria y menores placas ateroscleróticas5. Además el infarto de miocardio sin lesiones coronarias significativas se asocia estadísticamente con el sexo femenino5,6.
La Sociedad Europea de Cardiología declara que un mayor riesgo intrahospitalario de muerte de las mujeres con respecto a los hombres se debe a que estas reciben con menor frecuencia los tratamientos basados en la evidencia más actuales7.
Estas discrepancias planteadas anteriormente motivaron a los autores a desarrollar esta investigación, la cual tuvo como objetivo identificar diferencias sexuales en pacientes que presentan un SCA.
MétodosSe realizó un estudio observacional, analítico, de corte transversal, sobre diferencias de sexo en pacientes con diagnóstico de SCA egresados vivos de la Unidad de Cuidados Coronarios Intensivos del Hospital Clínico-Quirúrgico Comandante Manuel Fajardo entre enero de 2016 y diciembre de 2017.
El universo estuvo constituido por 170 individuos ingresados de forma sucesiva en la Unidad de Cuidados Coronarios Intensivos de la institución con diagnóstico de SCA y que cumplieron con los criterios de inclusión y exclusión. Para su estudio, estos se dividieron en 2 grupos: individuos de sexo masculino (101) y de sexo femenino (69). No se utilizó técnica de muestreo.
Criterio de inclusión:
- •
Pacientes con diagnóstico de SCA egresados vivos de la Unidad de Cuidados Coronarios Intensivos.
Criterios de exclusión:
- •
Pacientes en que no aparezcan todos los datos que se evalúan en este estudio en la base de datos de la Unidad de Cuidados Coronarios. (Se excluyeron 58 pacientes por no tener registrado el valor de la creatinina sérica, 11 por no tener registrado el valor de los biomarcadores cardiacos y 101 porque no se les había realizado ecocardiograma durante su estancia).
De un total de 340 pacientes ingresados por SCA durante el período de estudio se analizaron un total de 170 tras excluir a los que no cumplieron los criterios de inclusión/exclusión.
Los datos fueron obtenidos a partir de una base de datos perteneciente a la Unidad de Cuidados Coronarios Intensivos de la institución y posteriormente se introdujeron en el paquete estadístico IBM SPSS Statistics 20, con el cual se efectuó su análisis. Las variables cualitativas se expresaron en frecuencias absolutas y relativas. Se comprobó la distribución de las variables cuantitativas estudiadas mediante el test de Shapiro-Wilk y se expresó su media y desviación estándar (DE) cuando esta fue normal, o su mediana y rango intercuartílico cuando no.
Para evaluar la asociación entre las variables categóricas se utilizó el test X2 o el test exacto de Fisher cuando menos del 80% de las celdas en la tabla de contingencia tuvo valores esperados mayores de 5. Para comparar las variables numéricas se usó la prueba t de Student para muestras independientes cuando la distribución de estas fue normal o la prueba U de Mann-Whitney cuando no. Se utilizó odds ratio para la evaluación de riesgo de complicaciones, ajustándose por la edad (punto de corte en 45 años en el sexo masculino y 55 años en el femenino) a través de un modelo de regresión logística. Se consideró a los valores de p<0,05 como estadísticamente significativos, a los de p<0,01 como estadísticamente muy significativos y se calcularon intervalos de confianza de 95%.
Se estudiaron las siguientes variables:
Variables clínicas y sociodemográficas: edad; sexo; antecedentes patológicos personales: hipertensión arterial, diabetes mellitus, obesidad y CI; hábito tabáquico; forma de presentación (SCACEST o SCASEST); riesgo inicial (según puntajes de riesgo TIMI para el SCACEST8 y para el SCASEST9) y complicaciones intrahospitalarias: hemodinámicas (insuficiencia cardiaca aguda, shock cardiogénico, fallo del ventrículo derecho y estados hiperdinámicos), eléctricas (taquicardias supraventriculares, taquicardias ventriculares, bloqueos auriculoventriculares, bradicardia severa con repercusión hemodinámica) y cualquier complicación (esta última hace referencia a los individuos que presentaron durante su estadía hospitalaria al menos una complicación, sin importar cuál).
Variables de laboratorio e imagenológicas: creatinina sérica (medida en μmol/L), isoenzima MB de la creatininquinasa (CK-MB) (medida en UI/L) y fracción de eyección del ventrículo izquierdo (FEVI), esta última se categorizó acorde a la guía más vigente de insuficiencia cardiaca de la Sociedad Europea de Cardiología10.
La investigación fue aprobada por la jefatura del Servicio de Cardiología del hospital tras evaluar el cumplimiento de la ética en la investigación científica. La integridad de los datos obtenidos fue celosamente guardada, cumpliendo en todo momento con los principios éticos para la investigación médica en humanos establecidos en la Declaración de Helsinki, enmendada en la 52 Asamblea General de Edimburgo, en octubre de 2002.
La investigación no demandó de gastos económicos, ni recursos materiales importantes.
ResultadosPredominó el SCASEST en ambos sexos, sin asociación estadística significativa con ninguno en particular. Los puntajes de riesgo TIMI no se asociaron con el sexo en ninguna de las dos formas de SCA (tabla 1).
Asociación entre formas de presentación, riesgo inicial y sexo
Variable | Sexo | p | |
---|---|---|---|
Femenino | Masculino | ||
Forma de presentación, N.° (%) | |||
SCACEST | 21 (30,4) | 36 (35,6) | 0,480 |
SCASEST | 48 (69,6) | 65 (64,4) | |
TIMI, mediana (RIC) | |||
SCACEST | 3,0 (2,0-3,0) | 2,0 (2,0-3,0) | 0,182 |
SCASEST | 3,0 (3,0-3,0) | 3,0(2,0-3,0) | 0,526 |
RIC: rango intercuartílico.
La tabla 2 muestra la asociación entre los antecedentes patológicos personales de los individuos y el sexo. Las féminas tuvieron asociación estadísticamente muy significativa con una media de edad mayor (p<0,01) (fig. 1A) y con el antecedente de HTA (p<0,01). El hábito tabáquico mostró asociación estadísticamente significativa con los individuos varones (p=0,017).
Asociación entre antecedentes y sexo
Variable | Sexo N.° (%) | p | |
---|---|---|---|
Femenino | Masculino | ||
Edad, media±DE | 68±11,7 | 62±11,9 | <0,01 |
Cardiopatía isquémica | 31 (44,9) | 44 (43,6) | 0,860 |
Hipertensión arterial | 62 (91,2) | 73 (72,3) | <0,01 |
Diabetes mellitus | 20 (29,0) | 19 (18,8) | 0,121 |
Obesidad | 12 (17,4) | 13 (12,9) | 0,414 |
Hábito tabáquico | |||
Fumadores | 21 (30,4) | 51 (50,5) | 0,017 |
Exfumadores | 12 (17,4) | 18 (17,8) |
DE: desviación estándar.
El sexo masculino tuvo una mediana de creatinina muy significativamente mayor (p<0,01) (fig. 1B). No hubo diferencias respecto a los valores de CK-MB, ni respecto a la FEVI (tabla 3).
Asociación entre analítica sanguínea, FEVI y sexo
Variable | Sexo | p | |
---|---|---|---|
Femenino | Masculino | ||
Creatinina, mediana (RIC) | 80 (68-92,5) | 90 (77,5-108,5) | <0,01 |
CK-MB, mediana (RIC) | 26 (16-48,5) | 29 (21-55,5) | 0,147 |
FEVI N.° (%) | |||
<40% | 10 (14,5) | 11 (10,9) | 0,316 |
40-50% | 13 (18,8) | 29 (28,7) | |
>50% | 46 (66,7) | 61 (60,4) |
CK-MB: isoenzima MB de la creatininquinasa; FEVI: fracción de eyección del ventrículo izquierdo; RIC: rango intercuartílico.
La figura 2 muestra el riesgo de complicaciones intrahospitalarias en base a la razón sexo femenino/masculino. Las féminas mostraron un riesgo mayor de complicaciones hemodinámicas, con significación estadística, al realizar la razón de productos cruzados (OR=3,11 IC 95%=1,20-8,04).
DiscusiónLas principales diferencias sexuales en la CI se evidencian en pacientes premenopáusicas, puesto que la protección estrogénica y su pérdida tienen influencia en el curso y pronóstico de esta entidad1.
Lo anterior parece explicar que las féminas tuvieran una media mayor de edad en la población estudiada, resultado semejante al de otros estudios11–17.
Una revisión sistemática que incluyó a 76 148 individuos de 11 ensayos clínicos concluyó que existe una relación evidente entre el antecedente de hipertensión arterial y el sexo femenino en pacientes con SCASEST, resultado también arrojado por el presente análisis14. Otras investigaciones respaldan esa asociación11,17–19.
Kozan et al.11, en una investigación turca con 3 595 pacientes diagnosticados de SCA encontró una significativa mayor tasa de fumadores en el sexo masculino (73,9% vs. 15,8% p<0,01). Robles-Mezcua et al.19, refieren resultados similares, en un estudio español realizado en hombres menores de 45 años y mujeres menores de 55 años (88,7% vs. 68,1% p<0,001), asociándose también los hombres con el consumo de cocaína. Otros autores también reflejan la asociación referida15,20.
Kozan et al.11, en concordancia con los resultados de la presente investigación hace referencia a una mayor concentración de creatinina sérica en el sexo masculino. La creatinina es un producto del metabolismo muscular y su cuantificación es un medidor práctico para el cálculo del filtrado glomerular y estadificación de la enfermedad renal crónica. Es conveniente aclarar que es esperable este resultado debido a la mayor masa muscular del sexo masculino21,22.
Parra et al.23, refiere asociación entre el antecedente de enfermedad renal crónica y el sexo masculino en el SCA (18,9% vs. 4,1% p=0,004), así como entre estos y valores más altos de troponinas cardiacas. En contraste con esto Sörensen et al.15, refieren mayores tasas de filtrado glomerular en hombres con diagnóstico de SCA.
La presente investigación no arrojó diferencias en cuanto a la elevación de la CK-MB (biomarcador cardiaco) y el sexo. Sin embargo, hubiera sido interesante la evaluación de las troponinas cardiacas en su lugar, pero el hospital no tiene disponible ese examen complementario.
En el presente estudio las mujeres se asociaron con la aparición de complicaciones hemodinámicas intrahospitalarias. Pelletier et al.24, asociaron a las féminas con una mayor recurrencia a los 12 meses de un SCA, pero atribuye esta diferencia a factores sociales y no a biológicos. Una investigación multicéntrica multinacional concluyó que las mujeres menores de 55 años hospitalizadas por un SCA presentaron peor calidad de vida a largo plazo respecto a los hombres25.
Un estudio colombiano arrojó asociación entre el sexo femenino y la mortalidad a 30 días en pacientes sometidos a cateterismo cardiaco (RP=2,61 p=0,017)26. Otra investigación, desarrollada en Alemania, con 185 132 individuos concluyó que las mujeres sometidas a intervención coronaria percutánea por SCACEST presentaron un mayor riesgo de muerte intrahospitalaria y de eventos cardiovasculares y cerebrovasculares mayores, en igual plazo en comparación con los hombres27. Otros artículos respaldan esos resultados16,28.
En contraste con lo anterior, un artículo de Sörensen et al.15, mostró similares índices de reinfarto y muerte entre ambos sexos a los 2 años de presentar un SCA, aunque los varones presentaron más reingresos de causa cardiovascular y necesitaron más revascularizaciones durante ese período. El estudio RESCATE II arrojó una mayor mortalidad en el sexo masculino a los 7 años de ocurrido un primer IAMCEST17. Contradictorio a eso, Robles-Mezcua et al.19, refieren una mayor supervivencia a largo plazo en los hombres con SCA, en comparación con las féminas.
Lo anterior parece indicar que las féminas presentan un mayor riesgo de complicaciones a corto plazo, pero que este se suele igualar o incluso invertir con respecto al de los varones a largo plazo.
La principal limitación de esta investigación radica en que al ser de corte transversal dificulta establecer una relación de causalidad entre los factores asociados estadísticamente. Además, tener una población estudiada relativamente pequeña pudiera interferir en el análisis estadístico realizado, aunque puede servir de punto de partida a otras investigaciones que evalúan los tiempos trascurridos hasta la aparición de los eventos y a mayor escala.
ConclusionesLas mujeres presentaron una significativa mayor edad y se asociaron con el antecedente de hipertensión arterial. El hábito tabáquico predominó en los hombres, al igual que una significativa mayor concentración sérica de creatinina. Las mujeres presentaron un mayor riesgo de complicaciones hemodinámicas intrahospitalarias, no siendo así con las complicaciones eléctricas.
Conflicto de interesesLos autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.