Apreciado Dr. Otero, en relación con la solicitud de la inclusión de los resultados de su estudio1 en nuestra publicación2, tal y como especificamos en la metodología de nuestro artículo se trata de una revisión bibliográfica que finalizó en agosto de 2016, y su ensayo clínico se publicó 9 meses después. Con las revisiones sucede igual que con las guías de práctica clínica, cuando se publican, pueden aparecer nuevos métodos de diagnóstico y tratamiento, por lo que es necesario realizar revisiones periódicas3. Por ese motivo en las revisiones se incluyen los intervalos de tiempo bien delimitados, para dejar constancia de los artículos susceptibles de ser seleccionados.
Ciertamente su artículo contribuye a generar una evidencia de alta calidad dado que se basa en un ensayo clínico aleatorizado, aunque sería necesario usar la metodología GRADE4 para evaluar si existen sesgos que resten puntuación de calidad a la estimación del efecto de los ácidos hiperoxigenados, como podrían ser la no ocultación de la secuencia de aleatorización, ausencia de cegamiento, pérdidas excesivas en el seguimiento y ausencia de análisis por intención de tratar, entre otros.
Precisamente por la poca presencia de ensayos clínicos que obtuvimos en nuestra revisión bibliográfica (solo 5 de 30 artículos, de ellos 3 no aleatorizados), tal como indicamos en el artículo, no pudimos usar la metodología GRADE4 para formular las recomendaciones y procedimos a un consenso de expertos.
Entendemos que su aportación de la aplicación de ácidos grasos hiperoxigenados para la prevención de lesiones por presión/fricción asociadas a la ventilación mecánica no invasiva abre la puerta a nuevas posibilidades de prevención. Aun así, discrepamos del uso de la escala de Norton et al.5 para la estratificación del riesgo de padecer úlceras por presión en pacientes críticos, recomendando la escala de Braden6 que está validada en esta población y, además, los pacientes críticos con una puntuación baja en la subescala «Roce y peligro de lesiones» tienen 2,5 veces más de riesgo de padecer una lesión7.
Estamos convencidos que en futuras revisiones sobre las lesiones asociadas a dispositivos clínicos, así como en la elaboración de guías de práctica clínica relacionadas con el tema, como las de la EPUAP8, su artículo será incorporado y valorado por la comunidad científica para ser contrastado en comparación con los métodos utilizados hasta ahora.