En la actualidad, el Servicio Murciano de Salud (SMS) está realizando un importante esfuerzo para mejorar el uso de las aplicaciones informáticas de atención primaria (AP) de todos los profesionales1.
A la par que inculca la premisa que la AP es el ámbito idóneo para racionalizar y ordenar la prescripciones, y priorizar los pacientes que, inicialmente, podrían ser los mejores candidatos a tratamientos2 novedosos y caros. Si bien es sabido que el uso de asociaciones de fármacos facilita el cumplimiento terapéutico y, por ende, los resultados en salud3, aún siendo fármacos más caros debiéndose buscar la eficiencia del sistema nacional de salud, por lo cual muchos de estos medicamentos novedosos o caros son visados por inspección médica.
El mayor diagnóstico y control de las enfermedades, las mayores expectativas de salud de la población4 y la exigencia por parte de la sociedad actual de una mayor accesibilidad a los servicios como una de las dimensiones de la calidad, han producido en los últimos años un importante incremento de la demanda sanitaria5,6, que a su vez ha supuesto una sobrecarga asistencial, que es la gran preocupación de gestores y profesionales de AP7–9.
No obstante, con motivo de la crisis actual, desde la gerencia del área 2 del SMS en Cartagena se propone ejemplos de centro de salud cumplidores con el gasto en contraposición con los centros que sufre el mayor desvío presupuestario en el capítulo de gasto farmacéutico. Observando las peculiaridades de dichos centros intentamos determinar si existe correlación entre el número de recetas visadas o autorizadas por la inspección médica en relación a la desviación del gasto por cupo del centro de salud con mayor desvío presupuestario (fig. 1).
Determinados el porcentaje de desvío presupuestario de cada cupo del centro de salud con mayor desvío del área 2 del año 2014 para correlacionar cada cupo con su número total de recetas visadas o autorizadas por inspección.
Obtuvimos un coeficiente de correlación del 71,9%, lo que nos indica a mayor número de recetas visadas de inspección vamos a encontrar un mayor desvío del presupuesto, con lo que concluimos que aunque los centros de salud del área son homogéneos en grupo etarios de edad, el estado de salud de los pacientes difieren entre sí. El centro de salud que mejor cumple los objetivos presupuestarios está en zona de playa turística que, lógicamente, cuando el paciente precisa de mayores cuidados se le desplaza a los centros urbanos cambiándose de médico de familia. Además sería conveniente la generalización de un índice de recetas visadas o autorizadas por inspección como mecanismo compensatorio al propio desvío presupuestario.