Objetivos: La ingesta de cáusticos es un evento lesivo poco frecuente aunque potencialmente devastador. Debido a la baja incidencia de estos acontecimientos, en general existe una baja experiencia y persisten dudas sobre su manejo adecuado. Nuestro objetivo ha sido crear un protocolo de manejo urgente en nuestro hospital tras la ingesta cáustica ajustado a las actualizaciones publicadas en los últimos años.

Métodos: Revisión bibliográfica de los artículos, incluyendo la conferencia de consenso de la Sociedad Mundial de Cirugía de Urgencias, que establecen la utilidad de la TC en el manejo agudo de la ingesta cáustica.

Resultados: Desde la publicación en 1991 del artículo por parte de Zargar y sus colaboradores, se ha considerado la fibrogastroscopia y la clasificación de las lesiones en grados del 1 a 3b como el gold standard del diagnóstico y manejo de los pacientes tras una lesión cáustica. Sin embargo, la discrepancia entre el grado 3b (necrosis extensa) y las piezas de anatomía patológica tras la exéresis quirúrgica, ha promovido la búsqueda de nuevas herramientas diagnósticas. Chirica y colaboradores proponen la TC con contraste endovenoso urgente como la herramienta definitiva para la determinación de presencia o ausencia de necrosis esofágica y/o gástrica.

Conclusiones: Ante una situación urgente y lesiva como se trata la ingesta de cáusticos, y especialmente ante ideación suicida, es necesario un manejo multidisciplinar y coordinado por parte de los especialistas implicados. La creación, distribución y conocimiento de este tipo de protocolos, así como su actualización periódica, permite realizar una aproximación diagnóstica y terapéutica reglada para aportar el mejor manejo y tratamiento dirigido a estos pacientes.