Objetivos: Los marcadores clínicos y radiológicos no son lo suficientemente sensibles en esclerosis múltiple para detectar o predecir la progresión a largo plazo. Los neurofilamentos de cadena ligera (NfL) están relacionados con la actividad inflamatoria clínica y radiológica y respuesta al tratamiento. En parte, la progresión de la EM podría ser resultado de una inflamación no detectada. En un estudio previo evaluamos los niveles de NfL en una cohorte de pacientes EM NEDA3 (NEDA3: sin brotes, sin nuevas lesiones en resonancia magnética, sin progresión de EDSS), tratados con tratamientos de eficacia moderada y alta. Detectamos niveles de NfL más bajos en pacientes con tratamientos de alta eficacia y un 30% de pacientes NEDA3 con NfL superiores a 10 pg/ml. Evaluar la evolución clínica, radiológica y niveles de NfL 3 años después.

Material y métodos: Estudio observacional, prospectivo. La determinación de NfL se realizó en pacientes RMS “NEDA3”. Los niveles séricos de NfL se analizan mediante la técnica Single Molecule Array (Simoa^®) en equipo Quanterix SR-X.

Resultados: Analizamos 60 pacientes con diferentes tratamientos modificadores de la enfermedad (TME). La mayoría de los NEDA3 tienen niveles de NfL inferiores a10 pg/ml. Pacientes con tratamientos altamente efectivos y niveles más bajos de NfL mantienen el mismo tratamiento y estado NEDA3 3 años después, comparados con aquellos con eficacia moderada. Los pacientes con niveles elevados de NfL predijeron recaídas y actividad radiológica.

Conclusión: La mayoría de los pacientes que mantienen el estatus NEDA3 3 años después presentaban niveles bajos de NfL en la determinación basal, la mayoría con tratamientos de alta eficacia. El estado NEDA3 no es suficiente para predecir evolución de la enfermedad. Los niveles de NfL mejoran el seguimiento de los pacientes.