Introducción
El estudio clínico y bioquímico detallado de pacientes con dislipemias hereditarias, así como de sus familias, conlleva en algunos casos al estudio de genes "candidato" y a la identificación de mutaciones que establecen el diagnóstico molecular de la enfermedad que presenta el paciente y que, además, hacen posible la detección de portadores asintomáticos entre los familiares. Previamente, algunos de nosotros hemos publicado este proceso diagnóstico, parcial, en un caso de enfermedad de Tangier1, y completo, en el caso de 2 pacientes independientes (y sus familias) con deficiencia de lecitín:colesterol acetiltransferasa2,3. En el trabajo que se presenta, comunicamos nuestra experiencia en el diagnóstico molecular de 11 casos independientes de deficiencia familiar de lipoproteinlipasa (LpL) (E.C 3.1.1.34), presentando de forma detallada, y a modo de ejemplo, los estudios clínicos, bioquímicos y genéticos realizados en uno de ellos. La LpL es una enzima cuya masa molecular aparente es de 60.000, que cataliza la hidrólisis de los triglicéridos de los quilomicrones y las lipoproteínas de muy baja densidad (VLDL) del plasma4. El defecto en el catabolismo de dichas lipoproteínas ricas en triglicéridos debido a una deficiente actividad de la enzima conduce a la aparición de una hipertrigliceridemia muy grave, a causa fundamentalmente de la presencia anormal de quilomicrones en el suero obtenido en ayunas. Ello puede llegar a causar manifestaciones clínicas como pancreatitis, lipemia retinalis y xantomas eruptivos, aunque no todas estas manifestaciones clínicas se dan necesariamente en un mismo individuo4. Un cuadro similar, aunque algo menos intenso, aparece cuando existe un déficit del cofactor activador de la LpL, la apolipoproteína (apo) C-II4. Ambas enfermedades, de herencia autosómica recesiva, forman el síndrome de hiperquilomicronemia familiar (cuya incidencia es del orden de un caso por millón de habitantes), ante cuya sospecha clínica debe confirmarse el diagnóstico, fundamentalmente basado en métodos bioquímicos y genéticos. El diagnóstico determina el tratamiento que consiste en una restricción estricta de grasas y el pronóstico, el cual es en general bueno, si se evitan las pancreatitis de repetición, lo que habitualmente se consigue si se mantienen cifras de triglicéridos inferiores a 11 mmol/l1. Se han descrito más de 60 mutaciones causantes de hiperquilomicronemia familiar en el gen de la LpL, que consta de 10 exones4,5. Como resultado de dichas mutaciones, la actividad LpL es baja o nula, bien por defecto de concentración en la pared capilar y/o por defecto de actividad catalítica específica (actividad relativa a la concentración). Muchas de las mutaciones mencionadas se han localizado en la porción central de la enzima, una región altamente conservada de la familia de las lipasas de diferentes especies animales y que corresponde a los exones 4, 5 y 6 del gen. Estos defectos resultan en mutaciones cercanas a la región, altamente conservada, donde se encuentra el sitio catalítico de la enzima (Ser132-Asp156-His241)4,5.
Materiales y métodos
Paciente
Niño de 3 años que ingresa en un hospital comarcal de la provincia de Tarragona por un cuadro de abdomialgia y vómitos de repetición de 24 h de evolución, sin fiebre ni aumento de deposiciones. En la exploración inicial se apreciaron obnubilación, distensión abdominal y dolor difuso a la palpación. Los datos más destacables de los análisis bioquímicos que se le practicaron fueron: amilasa en plasma 1.626 U/l (valor de referencia < 220 U/l) y amilasa en orina 24.891 U/l (valor de referencia < 1.200 U/l). La ecografía abdominal evidenció un aumento de tamaño de páncreas con ecogenicidad normal, así como una ligera esplenomegalia. Con la orientación diagnóstica de pancreatitis aguda, el paciente fue remitido al hospital de referencia de la capital de la provincia para que se le realizara un estudio más detallado. Allí destacó en la exploración clínica la presencia de xantomas eruptivos cutáneos en el antebrazo izquierdo y en varios dedos de la mano, y la cicatriz de la laparotomía que se le había practicado 3 meses antes por un abdomen agudo, que fue finalmente catalogado de peritonitis no filiada. La analítica realizada en el suero puso de manifiesto unas actividades de amilasa de 700 U/l (valor de referencia < 200 U/l), y de lipasa de 426 U/l (valor de referencia < 200 U/l), mientras que las concentraciones de triglicéridos y colesterol fueron de 2,92 y 4,1 mmol/l, respectivamente. En el análisis de orina destacó una amilasa de 28.500 U/l (valor de referencia < 1.200 U/l). Durante el período en que el paciente estuvo ingresado, se le practicó otra analítica en la que la concentración de triglicéridos pasó a ser de 11,3 mmol/l. Ante este cuadro se instauró una dieta pobre en grasas y se solicitó estudio bioquímico y genético de la familia para confirmar el diagnóstico de hiperquilomicronemia familiar.
Análisis de lípidos y lipoproteínas
Fueron realizados en el plasma del paciente y su familia en ayunas mediante métodos enzimático-colorimétricos comerciales (Roche Diagnostics) adaptados a un autoanalizador (Hitachi 911, Roche Diagnostics). El colesterol de las lipoproteínas de alta densidad (HDL) fue determinado en el sobrenadante tras precipitación del suero con fosfotúngstico-Cl2Mg y el colesterol de las lipoproteínas de baja densidad (LDL) fue calculado mediante la fórmula de Friedewald. En el caso del paciente, los quilomicrones y las VLDL fueron separados por ultracentrifugación secuencial y su contenido se determinó en colesterol. El colesterol de las HDL fue determinado en el sobrenadante del suero sin lipoproteínas ricas en triglicé ridos tras ser precipitadas con fosfotúngstico-Cl2Mg y el colesterol de las LDL fue calculado como la diferencia entre el colesterol del suero sin lipoproteínas ricas en triglicéridos y el colesterol unido a HDL (cHDL)6.
Determinación de la actividad LpL en plasma postheparínico
La sangre se obtuvo en tubos conteniendo EDTA antes y 10 min después de una administración intravenosa de 60 U/kg de heparina sódica. La actividad LpL se determinó por el método descrito por Ramírez et al7. En resumen, se preparó una mezcla de reacción que contenía 0,6 mM glicerol tri (9,10-[n]-3H)oleato (12 Ci/mol) (Amersham), 50 mM MgCl2 (Merck), un 0,05% de albúmina libre de ácidos grasos (Sigma), un 3% de plasma humano control (precalentado durante 30 min a 56 °C), 25 mM PIPES (pH 7,5) y 0,02 ml de plasma obtenido antes o después de la inyección de heparina en un volumen final de 0,2 ml, y ésta fue incubada durante 30 min a 25 °C. Después de interrumpir la reacción añadiendo una mezcla de metanol/cloroformo/heptano (1,45:1,21:1), el oleato liberado fue separado y su radiactividad contada. La actividad lipasa hepática presenta reactividad cruzada en la determinación de la actividad LpL cuando, como es el caso del plasma postheparínico, ambas coexisten en el mismo ensayo. Esta reactividad cruzada se corrigió como se ha descrito previamente8.
Reactividad de las diferentes fuentes de apo C-II
El plasma de cada uno de los miembros de la familia se precalentó a 56 °C durante 30 min para inactivar de forma irreversible la LpL que pudiera existir y se añadió al sustrato radiactivo, en lugar del plasma control humano precalentado utilizado rutinariamente, para analizar su capacidad de activar la LpL de corazón de rata Wistar. El ensayo de la actividad LpL se llevó a cabo posteriormente tal como se ha descrito anteriormente7,8.
Aislamiento de ADN
El ADN se aisló a partir de sangre total mediante el método de la proteinasa K (Linus, Cultek), de acuerdo con las instrucciones del fabricante.
Amplificación por PCR y análisis de polimorfismo conformacional de cadena sencilla (SSCP)
La detección de la(s) mutación(es) en los exones del gen de la LpL se realizó a partir de especímenes de todos los miembros de la familia del paciente, mediante amplificación por reacción en cadena de la polimerasa (PCR) de todos los exones, utilizando oligonucleótidos y condiciones previamente descritas9. El marcaje radiactivo de los productos de PCR y la separación de las cadenas sencillas se llevaron a cabo según el método de Orita et al10. La amplificación por PCR se llevó a cabo en un termociclador (Crocodile II, Appligene) utilizando un volumen total de 10 µ l, que contenía 50-100 ng de ADN genómico, tampón de reacción (Promega), 1,5 mM MgCl2, 20 ng de cada cebador, 0,4 U de Taq polimerasa (Promega), 0,4 µ Ci de a 33PdATP (3.000 Ci/mmol) y 0,2 µ l de una mezcla de cuatro desoxinucleótidos (dCTP, dTTP y dGTP a una concentración de 2,5 mM y dATP a una concentración de 1,25 mM). Una alícuota de 4 µ l de cada producto de la reacción fue diluida en 8 µ l de solución de carga (un 98% de formamida, 10 mM de EDTA, un 0,1% de xileno cianol y 0,1% de azul de bromofenol), desnaturalizada durante 4 min a 94 °C, enfriada en hielo durante 2 min y aplicada (4 µ l) en un gel de poliacrilamida (6%) que contenía un 10% de glicerol y sometido a electroforesis en condiciones no desnaturalizantes, en 1x TBE (tampón Tris Borato EDTA), a 6 W durante 16 h a temperatura ambiente o a 30 W durante 5-7 h a 4 °C, según el tamaño del producto de PCR. El gel se transfirió a un papel Whatman 3 MM, se secó y autorradiografió a 80 °C utilizando una pantalla intensificadora.
Secuenciación directa del ADN amplificado
El exón 6 del gen de la LpL se amplificó por PCR a partir del ADN genómico en un volumen final de 50 µ l, utilizando los mismos cebadores y condiciones descritas en los análisis SSCP. Los productos de la amplificación se purificaron mediante columnas QIAquick Spin Columns (Quiagen), y 2 µ l fueron utilizados para la secuenciación cíclica de ambas cadenas utilizando el equipo de Rhodamine Dye terminators (Perkin Elemer Applied Biosystems) y AmpliTaq ADN polimerasa (Perkin Elmer Applied Biosystems) de acuerdo con las instrucciones del equipo. Los análisis de secuencia se llevaron a cabo en un secuenciador de ADN ABI PRISM Modelo 377 (Perkin Elmer Applied Biosystems).
Confirmación de la mutación en el codón 250 del gen de la LpL mediante digestión con TaqI
La sustitución de G por A en el exón 6 del gen de la LpL suprime una diana de restricción de la enzima Taq I (5' TCGA 3' * 5' TCAA 3')11,12. Por ello, se amplificó el exón 6 de cada miembro de la familia y de 2 sujetos normolipémicos. Después de una extracción fenólica, los productos de PCR se digirieron durante 2 h a 65 °C con 15 U de Taq I (Boehringer Mannheim) en un volumen final de 25 µ l y fueron sometidos a electroforesis en un gel de agarosa al 3%.
Mutagénesis in vitro y expresión de LpL con y sin la mutación Asp250 * Asn en células Cos 1
Las células Cos 1 se cultivaron en medio DMEM (Whitaker, Walkersville, MD, EE.UU.) suplementado con un 10% de suero bovino fetal, antibióticos y glutamina (2 mmol/l) (Sigma). Cuando los cultivos celulares estaban en una confluencia del 80%, las células fueron transfectadas con 2,5 µ g de ADN mediante un método que emplea DEAE-dextrano y cloroquina. Las células fueron tratadas con 10 U/ml de heparina después de procederse a la transfección y la actividad LpL fue medida en el sobrenadante de dichos cultivos a las 0, 24 y 48 h. El proceso de generación y clonación de ADNc de la LpL humana tipo salvaje, o conteniendo la mutación que causa el cambio Asp250 * Asn, ha sido descrito previamente11,12.
Resultados
En la tabla 1 se expone el perfil lipídico del plasma del paciente y del resto de su familia, todos ellos en ayunas. Entre los resultados del paciente, destaca la hipertrigliceridemia, la presencia de quilomicrones plasmáticos en ayunas y la disminución del colesterol unido a LDL (cLDL) y el cHDL, mientras que el patrón lipoproteico del resto de la familia fue absolutamente normal. Estos datos, junto con los antecedentes de que el paciente había padecido pancreatitis aguda y presentaba xantomas eruptivos, concuerdan con el diagnóstico de hiperquilomicronemia familiar, que puede ser debida a un déficit familiar de LpL o, alternativamente y aunque menos frecuente, a una deficiencia familiar de apo C-II. Para discernir entre ambas posibilidades, se incubó una fuente de LpL exógena control, que consistió en un homogeneizado de corazón de rata Wistar, con emulsiones conteniendo trioleato radiactivo con diferentes fuentes de apo C-II provenientes bien de un pool de plasma de individuos normolipémicos, bien de plasma del paciente y de cada uno de los miembros restantes de su familia. En todos los casos, la actividad LpL medida fue similar (fig. 1A). Una vez descartada la deficiencia en la capacidad activadora de la apo C-II como causa de síndrome hiperquilomicronémico, se determinó la actividad LpL en el plasma postheparínico de cada uno de los componentes de la familia, y en un control sano, utilizando en todos los casos como fuente de apo C-II el plasma precalentado de un pool de individuos normolipémicos. La actividad LpL que presentaba el paciente fue casi nula, mientras que la madre presentó una disminución de un 40% respecto a los controles. El padre y el hermano presentaron actividades de LpL similares a la del control (fig. 1B).
Una vez establecido el déficit en la actividad LpL, se trató de identificar la mutación mediante análisis SSCP de los 10 exones del gen de la LpL, que se realizó tanto en el paciente como en el resto de la familia y en 2 controles normolipémicos. En el caso del exón 6, la autorradiografía del SSCP evidenció patrones de migración diferentes en los distintos individuos analizados. El padre, la madre y el hermano presentaban un mismo patrón de bandas que era la suma que presentaba el paciente y los controles normolipémicos, que eran totalmente diferentes (fig. 2A). La secuenciación del exón 6 reveló la existencia de una mutación puntual en grado homocigoto en el codón 250 del gen de la LpL del paciente, que consistió en un cambio de un único nucleótido (G * A) y que produce un cambio de Asp * Asn (fig. 2B). Esta mutación del gen de la LpL se presentaba en grado heterocigoto en el padre del paciente (fig. 2B). Esta mutación altera una diana de restricción para la Taq I, haciéndola desaparecer. Esto fue utilizado para confirmar la presencia de la mutación en el codón 250 tanto en el paciente como en su familia. Efectivamente, tanto el padre como la madre y el hermano del paciente eran heterocigotos para la mutación, mientras que el paciente era homocigoto para la misma (fig. 2C). Tal como se ha publicado previamente11,12, la mutación encontrada anula la actividad LpL cuando se expresa en células Cos 1 (fig. 3). A lo largo de los últimos 6 años hemos diagnosticado y caracterizado las mutaciones de 10 casos índices similares (tabla 2). Nueve de ellos presentaron la mutación Gly188 * Glu y uno Pro207 * Leu, todos ellos en homocigosis.
Discusión
El conjunto de estudios clínicos, bioquímicos y genéticos efectuados en el paciente y en su familia demuestran claramente que éste se encuentra afectado por una deficiencia familiar de LpL debida a la existencia de la mutación Asp250 * Glu en grado homocigoto. Los experimentos de mutagénesis in vitro y la identificación previa de esta mutación en pacientes con hiperquilomicronemia familiar11,12 descartan que pueda tratarse de un polimorfismo asociado a la enfermedad pero no causante de ésta. Esta mutación es, pues, la responsable del cuadro de hipertrigliceridemia, hiperquilomicronemia en ayunas, xantomas eruptivos y pancreatitis aguda que presentó el paciente. La mutación, aunque en estado heterocigoto, se ha descrito previamente en pacientes de Quebec, Holanda, Francia e Italia, lo que podría indicar su origen europeo común11,12. No conocemos ningún otro paciente con deficiencia de LpL en el que la mutación Asp250 * Asn se haya descrito en homocigosis, como en el caso que nos ocupa. Curiosamente, los padres del paciente no conocen tener parentesco familiar, aunque nacieron y viven en una pequeña localidad cerca de la costa de Tarragona. Diferentes especies animales presentan Asp en la posición 250, lo que también concuerda con un papel importante de dicho aminoácido en la reacción catalizada por la LpL11,12. Ello se ha demostrado directamente por mutagénesis in vitro del cambio Asp 250 * Asn, produciéndose una disminución drástica de la actividad específica mediante un mecanismo que, aparentemente, no altera de forma fundamental ni su síntesis ni su secreción al medio11,12. Se ha especulado que la participación de los residuos aminoacídicos 245-253 de la LpL podría ser vital en la unión del sustrato lipídico1. Ello podría, quizás, explicar la buena respuesta del paciente a la dieta pobre en grasas, pero con aceite de oliva (propio de la comarca donde vive) en vez de con ácidos grasos de cadena media. Esta dieta con aceite de oliva le ha permitido tener una concentración de triglicéridos, tras 2 años de seguimiento, comprendida entre 3,5 y 7 mmol/l. Cuando se intentó durante 3 meses la dieta pobre en grasas combinada con ácidos grasos de cadena media, que es la medida convencional en el tratamiento dietético del déficit de LpL4, la concentración de triglicéridos aumentó a 10 mmol/l, por lo que fue abandonada.
La única publicación previa, según nuestras noticias, en que se ha estudiado mutaciones causantes de hiperquilomicronemia familiar en España fue realizada por uno de nosotros9. En ésta se describe la caracterización del defecto molecular causante de esta entidad en 5 pacientes. Cuatro presentaron mutaciones en el gen de la LpL, tres en homocigosis (Gly188 * Glu, Ile205 * Ser, Ile194 * Thr), y una en heterocigosis compuesta (Gly188 * Glu y deleción de 11 pb en el exón 2), mientras que el quinto presentó una mutación en homocigosis en el gen de la apo C-II (Arg4 * Stop)9. Desde entonces, y aparte del caso que hemos presentado, hemos detectado 9 casos más de mutaciones Gly188 * Glu, y una Pro207 * Leu, todas en el gen de la LpL y en homocigosis, mientras que no hemos detectado ningún otro caso de deficiencia de apo C-II. Dado que la incidencia de hiperquilomicronemia familiar es de un caso por cada millón de habitantes1, entre el estudio previo9 y el presente se podrían haber detectado y analizado alrededor del 40% de los casos de hiperquilomicronemia familiar esperados según la población española. La mutación Gly188 * Glu parece ser la más prevalente en España como causante de deficiencia de LpL (21 alelos afectados de esta mutación de un total de 32) y el déficit de LpL parece ser mucho más frecuente que el de apo C-II (15 casos frente a uno). En España, por tanto, el estudio del gen de la LpL en pacientes afectados de hiperquilomicronemia familiar debiera comenzar por el análisis del exón 5 del gen de la LpL, donde se han concentrado las mutaciones de 27 de los 32 alelos mutantes identificados hasta el momento. El resto de mutaciones se han encontrado en el exón 6 (dos alelos afectados por el cambio Asp250 * Asn) y en el exón 2 (un alelo afectado por una deleción de 11 pb) del gen de la LpL y en el gen de la apo C-II (dos alelos afectados por el cambio sin sentido Arg4 * Stop). El análisis genético directo, primero del gen de la LpL y después, si procede, del gen de la apo C-II, puede evitar a los pacientes la inyección de heparina y una segunda extracción de sangre a los 10-15 min de la primera, así como los análisis de actividad de LpL a laboratorios no especializados en metabolismo lipoproteico. Además, es capaz de identificar a los portadores asintomáticos, por lo que parece un método más efectivo y práctico para el diagnóstico de hiperquilomicronemia familiar que los basados en la determinación de la actividad de la LpL y/o de su activación por la apo C-II.
La distribución de las mutaciones del gen de la LpL en España difiere de los hallazgos efectuados en la población de Quebec, una población bastante aislada durante siglos donde la frecuencia de portadores (1/40) es 10 veces más frecuente que en otras partes del mundo y en donde el 73% de los alelos correspondientes a 37 pacientes afectados por deficiencia de LpL fueron debidos a la mutación Pro207 * Leu, mientras que el 22 y el 2% restantes, respectivamente, fueron debidos a las mutaciones Gly188 * Glu y Asp250 * Asn.
Los heterocigotos para las mutaciones del gen de la LpL presentan actividades enzimáticas y patrones lipoproteicos que son individualmente indistinguibles de los controles, si bien como grupo presentan disminuciones significativas de actividad LpL y de la concentración de HDL (a expensas de LpA-I o HDL2, principalmente), y un aumento del colesterol y triglicéridos de las VLDL y las lipoproteínas de densidad intermedia (IDL) y apo B, e incluso de la presión arterial sistólica, por lo que se ha sugerido que presentan un mayor riesgo de desarrollar enfermedad coronaria prematura13,14. Esta posibilidad se ha visto apoyada por diversos estudios que han revisado la distribución de mutaciones en el gen de la LpL en poblaciones amplias de pacientes con enfermedad coronaria y en controles15-17.
La variabilidad en los resultados de las mediciones de los parámetros relacionados con el metabolismo lipoproteico en heterocigotos para la deficiencia de LpL concuerda con los resultados de los padres del paciente LpL Asp250 * Asn, en los que la madre tiene un 40% de actividad LpL menos que el padre y que el control. Sin embargo, ambos progenitores presentan un perfil lipídico estrictamente normal. En otra de las familias estudiadas, el padre de una paciente con deficiencia de LpL (heterocigoto para el defecto Gly188 * Glu) de los que se presentan en la tabla 2, desarrolló una hipertrigliceridemia de 6 mmol/l que requirió tratamiento con fibratos. Este fenotipo, junto al aumento de la concentración de lipoproteínas que contienen apo B y al descenso de colesterol de HDL, ya mencionados13,14, ha sugerido que las mutaciones de la LpL en grado heterocigoto podrían estar implicadas en el desarrollo de la hiperlipemia combinada, la hipertrigliceridemia y la disbetalipoproteinemia familiares. En la actualidad las mutaciones en grado heterocigoto del gen de la LpL se consideran un gen «modificador» del fenotipo de la hiperlipemia familiar combinada más que un gen causante de la misma18-20. Por otra parte, la mutación Asp291 * Ser se ha asociado con disbetalipoproteinemia familiar en pacientes con el genotipo apoE2/E2 y con otras formas de hiperlipemia en pacientes con genotipos E2/E2, E3/E2 y E4/E221 y también con descenso de colesterol de HDL y alto riesgo de arteriosclerosis22.
En resumen, se ha presentado un caso de deficiencia de LpL debido a una mutación Asp250 * Asn en homocigosis y se ha revisado nuestra experiencia en el diagnóstico molecular de otros casos similares. Los resultados obtenidos son de interés para establecer estrategias eficaces para el diagnóstico de nuevos casos de hiperquilomicronemia familiar, así como para el estudio del papel de las mutaciones del gen de la LpL en nuestro medio (especialmente la Gly188 * Glu, que es la más frecuente), las cuales en grado heterocigoto podrían modular la expresión fenotípica de algunas hiperlipemias proaterogénicas de causa poco aclarada.
Agradecimiento
A los Doctores Amat (Servei de Pediatria del Hospital Sant Joan de Deu, Esplugues de Llobregat, Barcelona); Galán Gómez (Servicio de Pediatría del Hospital Materno-Infantil de Badajoz), Gussinyé (Servei de Pediatria, Hospital Materno-Infantil de la Vall d'Hebron, Barcelona), Lasunción (Departamento Bioquímica-Investigación, Hospital Ramón y Cajal), y Pocoví (Departamento de Bioquímica y Biología Molecular, Universidad de Zaragoza), por su colaboración en el diagnóstico de los casos de deficiencia de LpL cuyas mutaciones se presentan en la tabla 2. A los Doctores Lawrence Chan y Kazuhiro Oka, Department of Cell Biology, Baylor College of Medicine, Houston, Texas, por suministrarnos la construcción que contiene el ADNc de la LpL tipo salvaje y el correspondiente a la mutación Asp250 * Asn. Por último, a Agustina Castellví y a Carme Mayoral (Servei de Bioquímica Hospital Santa Creu i Sant Pau) y a Pepi Bascón (Unitat Docent de Sant Pau, Universitat Autònoma de Barcelona), por su magnífica ayuda de enfermería y laboratorio.