La tuberculosis (TB) es un gran problema de salud público, según la OMS en el 2021 fue causa de 1,6 millones de fallecidos y de 10,6 millones de casos nuevos. Su complejidad, abandono del tratamiento y su asociación con diferentes inequidades en salud, ha permitido que en Latinoamérica alcance un número importante de casos. Siendo Perú y Brasil de los países con más carga de TB, indicando un aumento de años de vida ajustados por discapacidad (AVAD)1.
El Perú, además, presenta cifras importantes de TB-MDR y TB-PREXDR y TB-XDR, con una tendencia en aumento en los próximos años2. Esto probablemente signifique un menor número de sobreviviente o el desarrollo de la enfermedad pulmonar postuberculosa (EPPTB), la cual implicará un espectro de trastornos estructurales (bronquiectasias, fibrotórax, cavidades) y funcionales (trastornos obstructivos y restrictivos), entre otras complicaciones que generarán un deterioro en calidad de vida, alcanzando incluso la dependencia de oxígeno (fig. 1).
La EPPTB es un término reciente que se vuelve notable desde el 20203. Por tal motivo, los autores queremos resaltar algunas recomendaciones importantes que podrían aplicarse como interés para las próximas políticas de salud con objeto de lograr metas específicas en el cuidado del paciente con EPPTB, según la norma técnica (NT) de salud (NTS N.° 200-MINSA/DIGIESP-2023) publicado en marzo del 2023 por el Ministerio de Salud del Perú4.
En primer lugar, queremos resaltar la nueva actualización de la NT con respecto a la del 2018, debido que incluyen en el apartado 6.1.3 Rehabilitación (pág. 66): a) manejo de las secuelas, b) la derivación del caso del paciente curado a un establecimiento de salud y para su seguimiento y c) proceso de rehabilitación respiratoria.
En segundo lugar, consideramos que, a pesar de incluir información relevante, es incompleta con respecto al apartado de prevención, control o tratamiento. Cabe resaltar la ausencia de anexos relacionado al punto 6.1.3 sobre los programas de rehabilitación. Por lo que sería conveniente desarrollar dicho apartado.
En tercer lugar, se debería incluir el control de los factores de riesgos (exposición a cigarrillos, alcohol, control de temperatura ambiental) potenciales para el control de los síntomas por EPPTB y mitigación por vacunación. En cuarto lugar, una evaluación socioeconómica para el apoyo nutricional de aquellos que padecen esta enfermedad y capacidad de brindar oxígeno domiciliario de los pacientes con recursos limitados. En quinto lugar, consideramos el apoyo psicológico a largo plazo pues esto genera un impacto positivo5.
En conclusión, debe considerarse la presentación de una NT del cuidado integral del paciente con EPPTB, y que no solo forme un apartado de la NTS N.° 200-MINSA/DIGIESP-2023, con especial énfasis en las sugerencias mencionadas, así como el desarrollo de anexos que permitan una atención integral de estos pacientes. Por último, sugerimos actualizar en base a la nueva evidencia sobre la EPPTB y evaluar el impacto de estas medidas mediante trabajos de investigación multidisciplinarios.
Responsabilidades éticasSe ha contado con el consentimiento del paciente y se han seguido los protocolos del centro del trabajo sobre el tratamiento de los pacientes.
FinanciaciónEl documento fue autofinanciado.