Descripción del caso: Acude a nuestro ambulatorio rural, una mujer de 24 años, con prurito en pie de 3 días de evolución. Refiere que estaba caminando descalza y sintió un picotazo.

Exploración y pruebas complementarias: Lesión cutánea de 2 × 1,5 cm de diámetro, con bordes eritematosos, exudación serosa y zona central puntiforme negra en talón, pruriginosa. El resto sin lesiones cutáneas. Se realiza cura de la lesión donde se extrae insecto. Posteriormente se realiza estudio microscópico para poder identificar los distintos segmentos corporales del insecto extraído y los huevos Se indican tratamiento antibiótico con cloxacilina y profilaxis antitetánica. En controles posteriores, la lesión cura sin presentar nuevas lesiones en otras localizaciones.

Juicio clínico: Tungiasis.

Diagnóstico diferencial: Los nevus acrales eruptivos, el melanoma, las verrugas vulgares y la cromomicosis.

Comentario final: La tungiasis corresponde a una ectoparasitosis cutánea producida por la pulga hembra de Tunga penetrans, descrita por primera vez en 1525 por González Fernández de Oviedo y Valdés en un grupo de conquistadores españoles en Haití. Esta pulga recibe diversas denominaciones según el país, en Venezuela, se la conoce comúnmente como Nigua T. penetrans se caracteriza por ser la especie de pulga más pequeña conocida, con 1 mm de longitud; siendo su hábitat el suelo seco, arenoso y templado, así como suelos de cobertizos, viviendas, bodegas y establos de animales en zonas endémicas. El ser humano es un hospedero accidental de este parásito, pudiendo también afectar a perros, cerdos, gatos, caballos, monos y aves. La evolución de esta paciente fue muy buena y respondió bien al tratamiento antibiótico.

Bibliografía

1. Botero D, Restrepo M. Parasitosis Humanas, 5ª ed. Medellín-Colombia: Editorial CIB, 2012.
2. Beltrán Fabián M. Tungiosis y Tunga Penetrans. Rev Perú Med Exp Salud Pública. 2005;22(4).

Palabras clave: Tungiasis. Ectoparasitosis.