Introducción: La diverticulosis del intestino delgado es menos frecuente que la colónica, aún así se calcula que está presente hasta en el 2-4% de la población general. Son usualmente asintomáticos y descubiertos incidentalmente, sin embargo pueden presentar patología inflamatoria e infecciosa, perforación, anemia, volvulación e incluso ser causa de complicaciones hemorrágicas.

Objetivos: Analizar la variabilidad en la incidencia y presentación en nuestro medio de los divertículos intestinales, según su localización.

Métodos: Se ha realizado un estudio retrospectivo de pacientes diagnosticados por histología de divertículos en el sistema informático “patwin”, seleccionando por literal todos los divertículos de esta localización desde el 01 de enero de 1995 hasta 31 de marzo de 2021. Sobre el archivo de texto creado se han seleccionando de forma manual los casos, eliminando pseudodivertículos y otras patologías recogidas por error de tipificación.

Resultados: En total se han seleccionado 57 pacientes con diagnóstico anatomopatológico de divertículo de duodeno (DD), yeyuno (DY) o Meckel (DM. La edad media fue de 52 años (4-88 años), siendo la moda 17. En cuanto al sexo, el 68,4% fueron hombre. La localización más frecuente fue en íleon (Meckel), seguidos del origen yeyunal y en 4 pacientes duodenal. Los motivos por los que acudieron los pacientes al Hospital fueron en un 56,1% por dolor abdominal, 19,3% por cuadro de obstrucción intestinal y en un 12,3% por hemorragia digestiva. A nivel de hallazgos quirúrgicos en el 42,1% se halló un cuadro de diverticulitis aguda; de estos 24 pacientes, 13 presentaron perforación intestinal. En 7 pacientes (12,35%) se confirmó la HD y en 8 pacientes (14%) la obstrucción intestinal por divertículo. En 15 pacientes, el divertículo se halló de forma accidental durante una cirugía por otro motivo. En 26 pacientes se realizó resección de divertículo mientras que en el resto precisó resección segmentaria intestinal. En el 28,1 de los pacientes se acompañó de apendicectomía, siendo patológico en 3 pacientes. A nivel anatomopatológico, en el 59,4% presentó alteración en la estructura (inflamación, perforación...), encontrando en 11 pacientes mucosa gástrica y en 1 paciente tejido pancreático. En un paciente se halló un leiomioma intradiverticular y en otro paciente un GIST. Al realizar un análisis cruzado entre localización y presentación clínica encontramos que la perforación por diverticulitis es más frecuente en los DY, mientras que la hemorragia digestiva se presentó solo en los DM (p < 0,001). Así mismo, la localización está en relación con la edad de presentación (p < 0,001).

Conclusiones: En nuestra serie de pacientes diagnosticados de divertículos por anatomía patológica, los DD no muestran predilección sexual y son frecuentemente diagnosticados en mayores de 50 años mientras que los DM se encuentran casi exclusivamente en pacientes menores de 50 años de edad con una relación hombre/mujer de 3:1. Las complicaciones agudas más frecuentes son la perforación o el sangrado gastrointestinal, menos habitual la obstrucción. Otras más graves incluyen obstrucción de la vía biliar con colangitis en los DD. Estos datos son concordantes con la literatura científica.