La implantación en 1978 del sistema de formación sanitaria especializada (FSE) mediante residencia supuso un gran avance en el terreno de la educación médica en nuestro país. Años después, se inició su reforma con la Ley 44/2003, de Ordenación de las Profesiones Sanitarias, y, finalmente, después de casi una década de debates y enfrentamientos en diferentes foros, se ha publicado el Real Decreto 639/2014, que regula la troncalidad, la reespecialización y otros aspectos de la formación especializada y representa el cambio más importante desde que comenzó el sistema de residencia. El nuevo sistema distingue dos periodos en la formación especializada: uno en el que los residentes desarrollan las competencias que son comunes a varias especialidades, es decir, aquellas que conforman el bloque de base (o tronco), y otro en el que se adquieren las competencias específicas de la propia especialidad. En este nuevo modelo de troncalidad hay tres tipos bien definidos de competencias que debe lograr el futuro especialista: transversales (comunes a todos los profesionales de la salud), nucleares o troncales (comunes a un conjunto de especialidades de un bloque o tronco) y específicas de cada especialidad. Sin embargo, toda esta extensa regulación contrasta con la falta de adaptación a la realidad y la ausencia de una estructura educativa mínimamente profesionalizada en el sistema de salud en que se basa.
The implementation in 1978 of the system of Specialized Healthcare Training (SHT) through residency in Spain has been a breakthrough in the field of medical education. Many years later, reform of the system of SHT came with the Law 44/2003, of planning of the health care professions, and, after a decade of debates and clashes in different forums, has been finally enacted Royal Decree 639/2014, which regulates the common core curricula of the specialties, the re-specialisation and other aspects of specialized training, and represents the most significant change since the system of residency began. The new system distinguishes two periods in specialised training: one in which residents develop those competencies that are common across several specialties, that is to say, those that make up the core block (or trunk), and other one in which the competencies of the specialty itself are acquired. In this new model of core subjects there are three clearly defined types of competencies that the future health care specialist must accomplish: transversal (common to health care professionals), core (common to a set of specialties of a core block) and specific to each specialty. However, all this extensive regulation contrasts with the lack of adaptation to the reality and the lack of a minimally professionalized educational structure in the health care system on which it’s based.