Recientemente fue publicado el artículo Rol del estudiante de ciencias médicas frente a la COVID-19: el ejemplo de Cuba1; el cual resalta el papel de la educación en el trabajo como forma de organización de la enseñanza y su vinculación con la pesquisa activa. Sin embargo, esta no ha sido la única medida referente al reordenamiento del proceso docente educativo adoptado en Cuba.
Infomed, red informática del sistema de salud cubano, ofrece una amplia cartera de servicios; entre ellos la Universidad Virtual de Salud y las revistas científicas biomédicas. La Universidad Virtual de Salud contiene la información referente a cada disciplina y año académico, estos se han reorganizado según las necesidades actuales y el rediseño de las estrategias curriculares permitiendo aplicar estrategias para la educación a distancia.
Dada la necesidad de difundir información verídica y con base en la ciencia, las revistas científicas cubanas priorizan la evaluación y difusión de manuscritos referentes a la temática. Las revistas científicas estudiantiles no se distancian de esta práctica, implicando a los estudiantes en las tareas de difusión de la ciencia joven. Este proceso contribuye a la formación investigativa favoreciendo el pensamiento crítico que permitirá solucionar de forma creativa los problemas propios de la práctica profesional.
Existen limitaciones para el empleo de estos recursos, entre ellas la disponibilidad de Internet y medios informáticos2; por lo cual los Policlínicos Universitarios ubicados en cada municipio brindan a los estudiantes los archivos en formato electrónico, así como la literatura necesaria.
El proceso docente educativo en las ciencias médicas cubanas no se detiene, constituye un proceso adaptable y continuo. Las labores de pesquisa y la educación a distancia constituyen herramientas útiles para la formación médica en tiempos de COVID-19. Su empleo favorece mantener labores educativas que garanticen recursos con los conocimientos y calidad académica-investigativa necesaria.
Conflicto de interesesLos autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.