El tratamiento del cáncer de tiroides tiende a ser individualizado en función de la estratificación de riesgo y cada vez menos agresivo para los tumores de bajo riesgo, ya que estudios recientes han demostrado que dosis bajas de I-131 son igual de efectivas que dosis más altas con excelentes tasas de remisión. El objetivo de nuestro estudio fue evaluar la respuesta al año del tratamiento con 30 mCi de I-131 en pacientes con cáncer diferenciado de tiroides. Estudio observacional retrospectivo. Se incluyeron 13 pacientes con una edad media de 49,8 ± 10,4 años (61% mujeres). Todos ellos se sometieron a tiroidectomía total seguida de una dosis de 30 mCi de I-131. Para evaluar la respuesta al año, se realizaron niveles de TSH y de tiroglobulina, ecografía cervical y rastreo corporal total (RCT). En cada visita, se realizó estadificación dinámica de riesgo clasificándolos en: respuesta excelente, respuesta bioquímica y/o estructural incompleta y respuesta indeterminada. El análisis estadístico se realizó mediante el programa SPSS (SPSS, inc, v 15.0). El estudio anatomopatológico mostró un 76,9% de carcinoma papilar tiroides, 58,3% variantes de alto riesgo (38% variante clásica, 15,4% patrón folicular, 15,4% encapsulado mínimamente invasivo, 7,7% células altas, 7,7% células columnares, 7,7% rasgos oncocíticos). El 92% de los pacientes se clasificaron como bajo riesgo o estadio I, según el sistema TNM. El valor medio MACIS fue de 4,79 ± 0,87. TSH media en el seguimiento 0,84 ± 1,59 μUI/mL. El 69,2% presentaron una respuesta excelente, el 23,1% una respuesta indeterminada y el 7,7% respuesta estructural incompleta. En nuestra experiencia, los pacientes adecuadamente seleccionados para recibir dosis baja de yodo, presentan una buena respuesta y tolerancia al tratamiento. La estadificación dinámica del riesgo es una herramienta eficaz en el seguimiento, permitiendo individualizar la estrategia terapéutica para reducir el riesgo de recurrencia.