He leído atentamente el artículo especial «Estrategias de aprendizaje y desempeño académico en estudiantes de Medicina», de Salazar y Escorza. Permítame discrepar en relación a la coherencia de los elementos metodológicos que se desprenden de la pregunta de investigación del mencionado artículo1.
Metodológicamente una investigación científica debería respetar la coherencia problema —hipótesis— resultados2. Es decir, la consecuencia lógica de una pregunta debería ser una respuesta coherente.
Se enuncia el problema estableciendo la preocupación de si existe o no «relación» entre 2 variables numéricas. Por lo tanto, así formulada la pregunta, exige la presencia de una hipótesis que plantee lo esperado por el estudio3; no obstante, no existe tal hipótesis. ¿Por qué se haría tal pregunta, si en la introducción del artículo se informa que existen muchos estudios que demuestran tal relación?
En los resultados se muestran valores de correlación directa entre las variables (0,2 y 0,4) corroborando los estudios mencionados en la introducción. En otras palabras, la metodología exigiría para este estudio, no una prueba de hipótesis o la exigencia de un «p» valor, sino una estimación puntual cuyo objetivo debería ser establecer fuerza de correlación: ¿Cuál es la fuerza de correlación entre X e Y?
El estudio concluye con la exigencia de separar por rango al desempeño académico (DA) como requisito de explicación eficiente de variables explicativas (predictores en realidad) y la comprobación de que el DA es un fenómeno afectado por múltiples variables interactuantes. Tales conclusiones conllevan a una interrogante de coherencia metodológica: ¿Esta es la respuesta que buscaba la pregunta del estudio?
Las conclusiones hacen alusión, en realidad, a una regresión lineal4, puesto que se muestran datos de variables predictoras que explican el comportamiento de una variable respuesta.
Conflicto de interesesEl autor declara no tener ningún conflicto de intereses.