Con una visión retrospectiva de lo que han sido los últimos 3 años de Educación Médica, desde el inicio de una nueva etapa editorial en 2015, cumplimos el deber de dar cuenta a nuestros seguidores, a los lectores, y a quienes nos han dado apoyo desde el principio de la andadura.
Educación Médica es una revista científica con una trayectoria impecable desde su fundación en 1998 y, por ello, nos sentimos herederos de un órgano de expresión acreditado y responsables de mantenerlo y mejorarlo en lo posible. Hoy consideramos positivo el resultado del balance del último trienio, y lo hacemos con profunda satisfacción y agradecimiento a quienes nos han ayudado a que así sea.
Educación Médica es editada en el seno de una editorial tan solvente como Elsevier, con un reconocido liderazgo en el ámbito de las Ciencias de la Salud, gracias al sostén otorgado a través de convenio por la Universidad Complutense y la Cátedra de Educación Médica Fundación Lilly UCM. Con el número actual se completan los 3 primeros años de la nueva andadura, en los que la revista ha acudido puntualmente a su cita periódica con los profesionales, los educadores, las organizaciones y todos los implicados en la Educación Médica. Y, hay que dejarlo claro desde el primer momento, con una participación generosa y entusiasta de los mismos, que han ofrecido lo mejor de su experiencia, esfuerzo y dedicación para ofrecer al lector la actualidad y la visión del futuro en Educación Médica a través de trabajos originales, revisiones, comentarios editoriales, opiniones en cartas al editor, etc.
Por su parte, la revista corresponde con una visión multidisciplinaria, una diversidad temática, la publicación de números extraordinarios monográficos, y desde el último año, con una sección fija «Aula de Educación Médica» que sea referente para los educadores, y que ha resultado muy bien acogida. Todo ello es resultado del trabajo conjunto de un prestigioso consejo científico editorial, un equipo editorial entusiasmado con el proyecto, una editorial pulcra y rigurosa en su trabajo y, sobre todo, gracias a las aportaciones de un gran número de autores, enviadas a iniciativa propia en más del 95% de los casos.
El resultado ha sido, a todas luces, plenamente satisfactorio. Basten algunos datos para comprobar cuál ha sido la experiencia en estos 3 años. Aunque los artículos recibidos provienen de los 5 continentes, más del 50% lo hacen de otros países de habla hispana, por lo que la revista se ha transformado en un órgano cotidiano de expresión y lectura en el campo de la Educación Médica. El número de páginas publicadas se ha duplicado en estos 3 años. Las visitas y descargas proceden de más de 100 países, siendo el 37,9% de España. Las descargas mensuales se han multiplicado por 10 en los últimos 2 años; y en los 6 primeros meses de 2017 se alcanzó la cifra de todo el año 2016 (más de 40.000 descargas), con un número de usuarios superior a 13.000 personas y más de 72.000 visitas.
Se puede señalar que las expectativas se han visto superadas con creces. De esta forma estamos obligados —de forma paulatina— a adaptar nuestra estructura, nuestro proceso, nuestra periodicidad, y otros diferentes aspectos logísticos a la brillante realidad descrita. Nos aprestamos a hacerlo para ofrecer una revista cada día mejor y más útil al mundo científico de la Educación Médica; pero no cabe duda que necesitaremos seguir contando con el concurso de todos, muy particularmente de los autores, de los revisores y del consejo científico. Invocamos a todos ellos a continuar participando activamente; les animamos a que nos trasladen sugerencias de alternativas para mejorar permanentemente; y ofrecemos nuestro compromiso con todos ellos, con la revista Educación Médica, y con nuestros lectores.
Los editores
