Descripción del caso: Joven de 24 años, natural de cuenca, actualmente en Madrid, no fumador, sin antecedentes ni tratamientos de interés previos, consulta en reiteradas ocasiones por dolor lumbar irradiado a miembro inferior izquierdo, cara posterolateral hasta primer dedo del pie, de 1 mes de evolución. Habiéndole indicado diferentes pautas de tratamiento, paracetamol/tramadol, meloxican, inzitan, yurelax, y diazepam por escasa respuesta. Sin más datos clínicos de interés.

Exploración y pruebas complementarias: Destaca apofisalgia lumbar baja, movilidad de raquis conservada, dolorosa a la flexión. Dolor irradiado hacia glúteo izquierdo, resto conservado. Se solicita radiografía de columna lumbosacra y se remite a traumatología, donde le tratan como lumbociatalgia, y le solicitan resonancia magnética para los próximos 2 días, con cita de revisión en patología de columna, 9 días más tarde fue visto con resultados, Infiltración secundaria de vértebras lumbares y sacras, ocupación de forámenes neurales sacros izquierdo, probable síndrome linfoproliferativo, deciden completar estudio. En TC de tórax, numerosos ganglios axilares y retropectorales izquierdos, derrame plural. Le derivan en un primer momento a cirugía por sospecha de primario en recto, luego a hematología por sospecha de linfoma, terminando en Urología y Oncoradiología por carcinoma neuroendocrino estadio IV, indiferenciado de próstata Gleason 10 (5+5) con metástasis ósea y ganglionares. Le programan para quimioterapia esquema carboplatino-docetaxel, precisando altas dosis de opiáceos y RT antiálgica. Fallece a los 9 meses del diagnóstico. Última revisión junio 2015, en progresión.

Juicio clínico: Carcinoma neuroendocrino de próstata.

Diagnóstico diferencial: La mayoría con dolor de espalda inespecífico mejoran dentro de unas pocas semanas, la osteomielitis vertebral suele verse en personas de mayor edad, relacionadas con procedimiento intervencionistas debidos a diseminación hematógena de bacteriemia. Un absceso epidural espinal, poco común, no presenta clínica infecciosa, no inmunocomprometido. Ante paciente joven con lumbociatalgia que no responde a su tratamiento convencional, habiendo descartado causas más comunes, debido a su rara incidencia hemos pensado por último en la posibilidad de una radiculopatía por metástasis tumoral vertebral. Confirmándose a través de estudios complementarios en consultas de derivación.

Comentario final: Existen muy pocos estudios en jóvenes afectos de cáncer de próstata metastásico. Aun así, ante la presencia de lumbalgia o lubociatalgia que no responde a tratamientos habituales y en progresión, a pesar de la corta edad y aún sin evidenciar signos de alarmas conocidos, en primer lugar deberíamos descartar etiología grave como, el cáncer metastásico, compresión de cola de caballo, absceso epidural espinal y osteomielitis vertebral. Más del 90% se presentan como enfermedad locoregional debido a la detección a través de PSA o tacto rectal, en el resto suele sospecharse por síntomas de cáncer avanzado.

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