Comprender las habilidades científicas como la base fundamental de la investigación en toda su dimensión es de suma relevancia; en la medicina supone un componente estratégico en el desarrollo pleno de los profesionales éticos y competentes.
La UNESCO presentó un informe en el 2021 que concluyó señalando que a nivel mundial existe un inminente crecimiento en recursos humanos de investigación, gasto en investigación y publicaciones científicas1. Resulta interesante conocer la apreciación de los estudiantes respecto a su desarrollo científico. En esta línea, el artículo Percepción de habilidades científicas en estudiantes peruanos de Medicina Humana2 evalúa las características de la percepción de las habilidades científicas en los estudiantes de Medicina y sus factores asociados en una universidad peruana.
Para ello, se encuestaron 720 estudiantes con un margen de edad media de 2,7 ± 3,2 años, evaluándose: búsqueda de información, lectura crítica, metodología de la investigación y redacción científica. La percepción positiva de habilidades científicas que se obtuvo fue del 20%. Este margen bajo resulta preocupante y puede tener un amplio espectro de causas.
Un punto relevante de este artículo, también, menciona que «pertenecer u obtener un ambiente que propicie la investigación, se asocia a una buena percepción en habilidades científicas»2, lo cual nos insta a tomar en cuenta esta medida para mejorar el desarrollo académico indagatorio de nuestros estudiantes.
Respecto a los bajos niveles de redacción y lectura científica, estamos de acuerdo en que «es probable que el problema subyazca desde etapas escolares y cuyas consecuencias se potencian en la educación superior»2. Además, el Perú se encuentra dentro de los países con mayores deficiencias de estas habilidades en sus estudiantes a nivel mundial3.
Continuando esta narrativa, es interesante mencionar iniciativas exitosas que aportan de manera significativa en las habilidades científicas en los escolares. Por ejemplo, los clubes de ciencia en Perú (CONCYTEC, Primer lugar en Buenas Prácticas en Gestión Pública 2023), son espacios organizados en los que convergen niños y adolescentes con un interés común en un campo de la ciencia o la tecnología4. Su objetivo es promover el desarrollo de la cultura científica. Cuenta además, con más de 9.000 clubes a nivel nacional y 100.000 estudiantes en la educación básica.
Finalmente, es interesante mencionar que un ambiente que propicie la investigación2 como lo son clubes de ciencia del CONCYTEC, podría suponer una mejora en las habilidades científicas en la educación básica y ser exponencialmente positivo para los estudiantes universitarios de Medicina y demás profesiones científicas.
FinanciaciónNo existen fuentes de financiación públicas ni privadas.
Conflicto de interesesLos autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.