Después de leer el artículo «Las competencias TIC de los estudiantes que ingresan en la universidad: una experiencia en la Facultad de Ciencias de la Salud de una universidad latinoamericana»1, este documento plantea que los grados universitarios capaciten a los estudiantes en poseer competencias en el manejo de las TIC.
Asimismo, este estudio pone énfasis en la construcción de las competencias en el proceso de enseñanza-aprendizaje de los estudiantes. Esta condición subyace del entorno digital, puesto que se enfrentan a un mundo globalizado con una gran cantidad de información a su alcance. Sin embargo, algunas veces el entorno social y el contexto educativo no contribuyen con esta perspectiva, ya que evidencian deficiencias en la sistematización digital. Por ello es un tanto difícil conocer qué saberes requieren los estudiantes según las exigencias de los estándares digitales.
Del mismo modo, este artículo sostiene que las Instituciones de Educación Superior son las responsables del logro de las competencias TIC de los estudiantes. Sin embargo, considero que no son las únicas, puesto que ello se debe implementar desde la etapa escolar. En otras palabras, los escolares no solo deben ser sujetos de enseñanza a través de un ordenador, sino agentes activos en el conocimiento. En ese sentido, concibo que las competencias coadyuvarán a desarrollarlas, siempre y cuando se las admita como fuente para resolver problemas en concordancia con los cuatro pilares de la educación: el saber, el saber hacer, el saber convivir y el saber ser, con plena libertad2.
En la etapa escolar y del bachillerato, la gran mayoría de estudiantes, para elaborar sus tareas académicas, recurren, sobre todo, a Wikipedia, Google y redes sociales, tales como Facebook y Youtube. De igual manera, en ese proceso desconocen el empleo de los recursos de comunicación, organización y documentación3,4. Al respecto, Rodríguez-Gómez y sus colaboradores señalan que el uso problemático de las TIC en los procesos de aprendizaje se ha incrementado. Asimismo, revela que estudiantes de entre 11 y 12años presentan menores problemas en el uso de las TIC que los estudiantes de entre 17 y 18años con un uso superior a las 6horas semanales5. De este informe se infiere que los escolares pueden conocer otro tipo de plataformas que favorecerán en sus competencias y conocimientos en el proceso de transición a la universidad en el área de salud. En consecuencia, se comunicarán con profesionales de su área de estudios como Esanum, Med book, entre otras6.
Como se ha expuesto, no solo basta que los estudiantes escolares conozcan herramientas básicas para la búsqueda y el manejo de información, sino que es indispensable desarrollar competencias en el uso adecuado de las TIC. Ante esta problemática, considero que el docente, el trabajo colaborativo, el uso de plataformas virtuales y la accesibilidad constituyen un gran avance en dicho desarrollo desde la etapa escolar. En esa medida se reflejará la mejora en la interacción y en el intercambio de información en su quehacer educativo.
Conflicto de interesesEl autor declara no tener ningún conflicto de intereses.