0 - PET-TAC 18F-FDG EN LA EVALUACIÓN DE RESPUESTA A LA QUIMIORRADIOTERAPIA EN PACIENTES CON CARCINOMA EPIDERMOIDE DE CABEZA Y CUELLO ESTADIO N2
1Hospital Clínico San Carlos. Instituto de Investigación Sanitaria San Carlos (IdISSC). Universidad Complutense de Madrid. 2Hospital Clínico San Carlos. Instituto de Investigación Sanitaria San Carlos (IdISSC). Madrid.
Objetivo: Determinar si un resultado negativo de la PET-TAC 18F-FDG post-tratamiento puede evitar el vaciamiento cervical en pacientes con carcinoma epidermoide localmente avanzado de cabeza y cuello N2 tratados con quimiorradioterapia.
Material y métodos: Se evaluaron retrospectivamente 25 pacientes consecutivos con carcinoma epidermoide de cabeza y cuello estadio N2 entre marzo de 2010 y marzo de 2014. Trece recibieron quimioterapia TPF (taxol, cisplatino y 5-fluorouracilo (FU)) + quimiorradioterapia (cisplatino-5 FU), seis quimioterapia (cisplatino-5 FU) + RT, cuatro TPF + RT-cetuximab y dos RT-cetuximab. Se realizó PET-TAC 18F-FDG de estadificación y de respuesta al tratamiento a las 12 semanas de finalizar quimiorradioterapia. Se consideró estudio positivo cuando persistía captación de FDG en adenopatías cervicales (SUVmax > 3,5) o si había progresión locorregional o a distancia. En pacientes con sospecha persistencia, se realizó confirmación histopatológica, así como en 7 pacientes con estudio PET-TAC negativo. El resto de pacientes fueron seguidos clínicamente y con control estrecho PET-TAC (cada 3 meses).
Resultado: 9 (36%) de PET-TAC post-tratamiento fueron positivos. Siete de 9 exploraciones PET-TAC (78% de positivos) fueron verdaderos positivos confirmados histológicamente o por enfermedad progresiva. Los 2 estudios restantes (22% de positivos) fueron falsos positivos confirmados histopatológicamente (necrosis y células gigantes de cuerpo extraño). De los 16 pacientes con PET-TAC negativos, 7 fueron verdaderos negativos por anatomía patológica, 9 se confirmaron por seguimiento clínico; 1 de de estos 9 mostró progresión ganglionar a los 11 meses y otro a los 25 meses de finalizar tratamiento; siete permanecen libres de enfermedad, con media de seguimiento de 26,7 meses (rango 11-48).
Conclusiones: A pesar del limitado número de pacientes, los datos obtenidos orientan a que la PET-TAC podría ayudar en la selección de pacientes N2 a los que habría que realizar linfadenectomía cervical tras tratamiento concomitante.
