359 - EVALUACIÓN DE LOS CAMBIOS ÓSEOS TRAS DIFERENTES TÉCNICAS DE CIRUGÍA BARIÁTRICA MEDIANTE 3D-DXA
1Servicio de Endocrinología y Nutrición, Hospital Universitari de Bellvitge, L’Hospitalet de Llobregat. 2Servicio de Reumatología, Hospital Universitari de Bellvitge, L’Hospitalet de Llobregat. 3Servicio de Cirugía General y del Aparato Digestivo, Hospital Universitari de Bellvitge, L’Hospitalet de Llobregat. 4R&D Scientist, 3D-SHAPER Medical, Barcelona.
Introducción: La tecnología 3D-DXA transforma la imagen 2D-DXA en 3D utilizando un modelo similar a la tomografía computada cuantitativa y permite evaluar la microarquitectura ósea sin añadir más radiación. No hay datos publicados sobre la utilidad de 3D-DXA tras la cirugía bariátrica (CB).
Objetivos y métodos: Evaluar los cambios en la densidad mineral ósea (DMO) en pacientes con obesidad grave a los 12 meses de la gastrectomía vertical (GV), bypass gástrico (BPG) o técnicas hipoabsortivas (TH) (cruce duodenal/cruce duodenal de una anastomosis) mediante análisis con software 3D-DXA del fémur proximal.
Resultados: 153 pacientes (81% mujeres) de 50 ± 9 años, IMC de 38 ± 9 kg/m2 intervenidos de GV (54,3%) TH (29,4%) y BPG (16,3%) fueron analizados. Tras la cirugía, la pérdida ponderal global fue del 29 ± 11%, mayor tras las TH (p = 0,021). La DMO disminuyó en el cuello femoral (CF) (-5,2 ± 5,9%) y la cadera total (CT) (-8,1 ± 5,1%), siendo mayor tras TH/BPG respecto a la GV (p < 0,001). En la CT disminuyó la superficie cortical (-4,4 ± 4,8%), el volumen cortical (-1,4 ± 2,8%), el grosor cortical (-3,1 ± 3,9%) y el volumen trabecular (-8,0 ± 6,6) respecto a los valores basales (p < 0,05). La pérdida de DMO cortical y trabecular fue mayor en TH y BPG respecto a GV (p < 0,01). En otras regiones del fémur (CF, trocánteres, diáfisis) ocurrió una pérdida ósea similar en todas las técnicas, excepto el grosor cortical que aumentó en el CF tras la GV (2,1 ± 7,3%) respecto a valores basales (p < 0,05). El Z-score final de la superficie cortical y el volumen trabecular en CT fueron de 0,96 (IC95%: 0,73 a 1,19) y -0,17 (IC95%: -0,32 a -0,02) respectivamente.
Conclusiones: Los pacientes sometidos a diferentes técnicas de CB tienen un descenso de la DMO evaluada por DXA que se confirma al explorar la microarquitectura ósea mediante 3D-DXA (volumen trabecular y superficie cortical) al año de la intervención y que es mayor tras el empleo de TH. Sin embargo, la DMO es comparable a la de la población no intervenida.