Introducción: La alfafetoproteína (αFP) es un marcador clínicamente útil para el carcinoma hepatocelular, hepatoblastomas y tumores testiculares no seminomatosos. Su utilidad en el cáncer de vesícula biliar (CVB) es excepcional. Sin embargo, en una veintena de casos se ha descrito su elevación asociado fundamentalmente a carcinoma de células claras, papilares, hepatoide y carcinosarcoma. En estos casos, el brusco descenso de los niveles de αFP tras la cirugía, nos permite su uso clínico como claro marcador de seguimiento y recaída.

Caso clínico: Mujer de 69 años sin antecedentes personales de interés, en estudio por cólicos biliares de repetición. A la exploración se palpaba masa en hipocondrio derecho. ECO ABD: Vesícula de 15 × 7 cm, con contenido sólido vascularizado en su interior. TAC ABD: vesícula muy distendida con masa en su interior y posible infiltración del lecho hepático, produciendo impronta sobre la vena porta así como a nivel de la vía biliar, no se evidencian adenopatías locorregionales. Se objetivó perfil hepático sin alteraciones y serología viral negativa, destacando αFP de 775 ng/ml, resto de marcadores tumorales dentro de la normalidad. Ante el diagnóstico de CVB, se realizó colecistectomía y bisegmentectomía IVb-V mediante abordaje convencional. La anatomía patológica fue informada como carcinoma papilar con componente infiltrativo que alcanza la capa muscular (T1b N0). Segmentos hepáticos con inflamación crónica portal y focos de dilatación sinusoidal. Bordes de resección libres de neoplasia. En el postoperatorio presentó fístula biliar de bajo debito que se solventó con tratamiento conservador siendo alta el 10º PO. Los niveles de αFP descendieron progresivamente: 5º, 15º, 30º y a los 45 días PO: 315 ng/ml, 70 ng/ml, 35 ng/dl y 5 ng/dl. La paciente lleva un año en seguimiento sin elevación de αFP y con pruebas de imagen negativas.

Discusión: La utilidad de los marcadores tumorales en diagnostico preoperatorio de CVB, pero sobre todo en el seguimiento y como indicadores de recurrencia es, al menos, dudoso. La incidencia de CVB productoras de αFP es excepcional (solo se han descrito una veintena de casos en la literatura) y relacionándose fundamentalmente con carcinomas papilares y de células claras. Sin embargo, se ha observado un descenso brusco de la αFP tras la resección completa de la neoplasia y elevación de la misma con la recidiva de la enfermedad. Por ello, la monitorización de la αFP en este contexto, constituye una excelente alternativa de seguimiento y vigilancia de la recurrencia.