Objetivos: Presentar el caso de una paciente, en estudio por tumor adrenal que presentó hemorragia espontánea y precisó cirugía urgente, y revisar la literatura al respecto.

Caso clínico: Paciente mujer de 86 años, con antecedente de fibrilación auricular en tratamiento anticoagulante y en estudio por lesión incidental adrenal izquierda sospechosa de adenoma no funcionante. Presenta cuadro de dolor torácico bajo izquierdo y abdominal brusco, acompañado de síncope. Se realiza TAC de abdomen evidenciando sangrado activo dependiente de la glándula adrenal izquierda asociada a hematoma retroperitoneal. Dada la estabilidad hemodinámica tras resucitación en Urgencias, se realiza angiografía que confirma la hemorragia arterial activa pero no es efectiva en controlarla. Se realiza laparotomía exploratoria, exposición del retroperitoneo, evacuación del hematoma retroperitoneal y adrenalectomía izquierda. Curso postoperatorio sin resangrado, con cuadro de daño pulmonar agudo por trasfusión que precisa mantener ventilación mecánica diez días y posteriormente sin complicaciones recibiendo el alta el 14º día postoperatorio. La anatomía patológica reveló un adenoma suprarrenal no funcionante con signos de hemorragia. Seguimiento al año sin complicaciones. La hemorragia espontánea de un tumor adrenal es una complicación rara y su manejo no está estandarizado. Se ha asociado con más frecuencia a feocromocitoma y también a lesiones malignas como causa. En caso de hemorragia mantenida, la arteriografía puede ser una medida eficaz de control temporal. Los casos de shock hemorrágico o en los que la arteriografía no sea eficaz o no esté disponible pueden requerir cirugía urgente para su control.

Discusión: La hemorragia espontánea de un tumor adrenal es una complicación rara y su manejo no está estandarizado. Debe sospecharse lesión maligna o feocromocitoma. La arteriografía puede ser una medida temporal eficaz; en casos de shock o hemorragia persistente pese a arteriografía debe valorarse la cirugía urgente.