47 - EFICACIA Y SEGURIDAD DE TACROLIMUS EN LA COLITIS ULCEROSA: ESTUDIO MULTICÉNTRICO DE GETECCU
1Servicio de Aparato Digestivo, Hospital de Galdakao. 2Servicio de Gastroenterología, Hospital Clínic de Barcelona. 3Servicio de Aparato Digestivo, Hospital Universitario Ramón y Cajal, Madrid. 4Servicio Aparato Digestivo, Hospital del Mar, Barcelona. 5Servicio de Digestivo, Hospital Universitario Germans Trias i Pujol, Badalona. 6Servicio de Digestivo, Complejo Hospitalario de Navarra, Pamplona. 7Servicio de Digestivo, Hospital de Cruces, Vizcaya. 8Servicio de Gastroenterología y Hepatología, Hospital Universitario Puerta de Hierro, Madrid. 9Servicio de Digestivo, Hospital de la Santa Creu i Sant Pau, Barcelona. 10Servicio de Digestivo, Hospital Universitario Miguel Servet, Zaragoza. 11Servicio de Aparato Digestivo, Hospital Universitario de La Princesa, Madrid. 12Instituto de Investigación Sanitaria Princesa (IIS-IP), Centro de Investigación Biomédica en Red de Enfermedades Hepáticas y Digestivas (CIBEREHD), Madrid. 13Servicio de Aparato Digestivo, Complejo Hospitalario Universitario de Santiago de Compostela. 14Servicio de Aparato Digestivo, Hospital Montecelo. 15UGC Aparato Digestivo, IMIBIC, Hospital Reina Sofía, Córdoba. 16Servicio de Aparato Digestivo, Hospital Clínico San Carlos, Madrid. 17Instituto de Investigación del Hospital Clínico San Carlos (IdISSC), Madrid. 18Servicio de Aparato Digestivo, Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, Santander. 19Servicio de Aparato Digestivo, Hospital Universitario La Paz, Madrid. 20Servicio de Aparato Digestivo, Hospital Son Llàtzer, Palma de Mallorca. 21Servicio de Aparato Digestivo, Hospital Universitari Mutua Terrassa. 22Centro de Investigación biomédica en red de enfermedades hepáticas y digestivas (CIBERehd). 23Servicio de Digestivo, Hospital de Salamanca. 24Servicio de Aparato Digestivo, Hospital Universitario de Girona. 25Servicio de Digestivo, Hospital Arnau de Vilanova, Lleida. 26Grupo Español de Trabajo en Enfermedad de Crohn y Colitis Ulcerosa.
Introducción: Tacrolimus es un inhibidor calcineurínico indicado para la prevención del rechazo en pacientes con un trasplante renal o hepático. Aunque existe evidencia que apoya su eficacia en algunos casos de colitis ulcerosa (CU), esta sigue siendo limitada. El objetivo principal de nuestro estudio era conocer la eficacia y seguridad de tacrolimus en CU en nuestro entorno en práctica clínica.
Métodos: Realizamos un estudio retrospectivo y multicéntrico en 22 unidades de enfermedad inflamatoria intestinal a nivel nacional. Incluimos todos los pacientes adultos con un diagnóstico establecido de CU que habían recibido tacrolimus por vía oral para esta indicación. La respuesta clínica se evaluó mediante en índice de Mayo y el Physician Global Assessment, ambos a los 3 meses de iniciado el tratamiento. El seguimiento clínico se consideró hasta la última visita durante el tratamiento o hasta 12 meses tras su suspensión.
Resultados: Un total de 58 pacientes recibieron tacrolimus entre enero de 1999 y junio de 2018 (edad media 40 años; 40% mujeres; PCR media 8,8 mg/L). Las indicaciones más frecuentes fueron la corticodependencia (55%) y corticorefractariedad (29%). La mayoría de pacientes habían recibido previamente fármacos anti-TNF (71%) y un 22% vedolizumab, y hasta un 43% con ≥ 2 anti-TNF. Un 9% recibían un anti-TNF o vedolizumab (10%) de forma concomitante al tacrolimus. Los niveles séricos de tacrolimus durante la inducción fueron de 5-10 ng/mL (35%) y 10-15 ng/mL (33%), mientras que durante el mantenimiento fueron de 5-10 ng/mL en la mayoría (59%). El tratamiento se mantuvo durante una mediana de 14 meses (9,9-24) y la mediana de seguimiento fue de 25 meses (21-67). Se evidenció una reducción estadísticamente significativa del índice de Mayo parcial tras 3 meses [media 1,6 (DE 1,3), p = 0,0001]. Se observaron diferencias estadísticamente significativas en los niveles de PCR a los 1, 3 y 6 meses de tratamiento en comparación con los basales (p < 0,03). Un tercio de los pacientes (35%) presentaron efectos adversos relacionados con el tratamiento (40% temblor y 20% astenia), siendo necesario en el 35% de ellos la suspensión del fármaco. En el 47% fue necesario un nuevo inmunomodulador, en 28% ingreso y en 33% colectomía. Finalmente, el tratamiento con tacrolimus se suspendió en el 81% de pacientes.
Conclusiones: Tacrolimus ofrece una mejoría clínica a corto plazo en pacientes con CU, aunque su efectividad a largo plazo y la tasa de efectos adversos representan unas limitaciones importantes en la práctica clínica.