59 - MONITORIZACIÓN DE LA ENFERMEDAD INFLAMATORIA INTESTINAL (EII) EN LA PRÁCTICA CLÍNICA A TRAVÉS DE MARCADORES MICROBIOLÓGICOS EN MUESTRAS FECALES. ESTUDIO PROSPECTIVO EN UNA COHORTE CLÍNICA
1Servició de Aparato Digestivo, Hospital Universitario Dr. Trueta. 2Institut d'Investigació Biomèdica de Girona (IdIBGi), Girona. 3Digestive Study Coordinator, Institut d'Investigació Biomèdica de Girona (IdIBGi), Girona. 4Servicio de Farmacia, Hospital Universitario Dr. Trueta, Girona. 5Investigador Post Doctoral. Institut d'Investigació Biomèdica de Girona (IdIBGi), Girona. 6Consorci Hospitalari de Vic. 7Servició de Aparato Digestivo, Hospital Universitario Dr. Trueta, Girona.
Introducción: La microbiota intestinal (M) tiene un rol en la patogénesis de la EII que incluye la enfermedad de Crohn (MC) y la colitis ulcerosa (CU). El grado de actividad de la EII modifica la composición de la M en un patrón alterado llamado disbiosis, que difiere de los controles sanos (CS).
Objetivos: El objetivo es la cuantificación del grado de disbiosis de la M para determinar la utilidad como biomarcador para monitorizar actividad de la EII respecto de los CS.
Métodos: Se incluyeron 80 pacientes con EII en remisión (R) y actividad (A) (definida por CP > 250) (leve/moderada) de 2 hospitales terciarios. Se han recogido muestras de sangre (para determinar PCR, albúmina y hemoglobina (Hb)) y una fecal (para determinar calprotectina (CP) y cuantificar la M). Se ha cuantificado DNA, mediante técnicas de qPCR, en tiempo real de 3 grupos bacterianos (Faecalibacterium prausnitzii (FP), Escherichia coli (EC) y bacterias totales (ET)), que son altamente representativos de la disbiosis. Se ha creado un índice llamado FEI (relación FP/EC) para cuantificar el grado de disbiosis. Se comparan marcadores descritos de actividad con marcadores microbiológicos. Se han recogido muestras cada 3 meses (T0, T1 y T2).
Resultados: Se han incluido 35 pacientes con CU y 45 con EC. El 55% mostraban R en la primera muestra (T0). El análisis de datos clínicos, muestran que PCR y CP tienen capacidad para diferenciar entre A/R (p = 0,037) y entre tipos de enfermedad (p = 0,018).S observan valores más altos de FP en CU (p = 0,013) y valores más elevados de EC en MC (p = 0,003) en las 3 muestras. Los valores del FEI son superiores en la CU (p = 0,001) y diferentes entre MC, CU y CS (p = 0,015) indicando capacidad para diferenciar entre las 2 enfermedades y los CS. Se ha determinado un punto de corte del FEI en relación CP para T0 de 1.869 (S 0,44 y E 0,82; AUC 0,658). La M asociada a EII respecto CS se caracteriza por menor abundancia de FP (0,002) y mayor de ET (0,0001) y mayor de EC no significativa. Los valores de A y R por FP, FEI y ET de la MC, CU y CS muestran diferencias significativas indicando capacidad para diferenciar entre actividad y remisión en T0. El índice FEI mostró correlación significativa con la CP, PCR, Hb y el índice de Mayo endoscópico.
Conclusiones: Los marcadores microbiológicos y el FEI permiten diferenciar entre tipos EII y CS; y entre actividad y remisión. La combinación de PCR, CP y FEI puede convertirse en un potencial biomarcador de actividad de la EII.