P-36 - ESTRATEGIAS DE PREDICCIÓN Y PREVENCIÓN EN FAMILIARES DE PACIENTES CON ENFERMEDAD INFLAMATORIA INTESTINAL: RESULTADOS DE UNA ENCUESTA INTERNACIONAL
1Hospital Universitario de Galdakao, Gastroenterology, Galdakao. 2Division of Gastroenterology, Hospital Beatriz Ângelo, Loures, Portugal. 3Department of Hepatology and Gastroenterology, Aarhus University Hospital, Aarhus, Dinamarca. 4Center for Molecular Prediction of Inflammatory Bowel Disease [PREDICT], Department of Clinical Medicine, Aalborg University, Copenhagen, Dinamarca. 5Gastroenterology Department, Hospital Universitario Son Espases; Palma. 6Department of Medicine, Gjødstrup Hospital, Gjødstrup, Dinamarca. 7Department of Gastroenterology and Digestive Endoscopy and Vita-Salute San Raffaele University, Milan, Italia. 8Université Clermont Auvergne, Inserm, CHU Clermont-Ferrand. 3iHP, Service d'Hépato-Gastro Entérologie, Clermont-Ferrand, Francia. 9Staedtisches Klinikum Lueneburg, Department of Internal Medicine, Gastroenterology and Hepatology, Alemania. 10Health Sciences Graduate Program, Pontifícia Universidade Católica do Paraná (PUCPR), Curitiba, Brasil. 11Bahia State University UNEB, Department of Life Science, Salvador-Bahia, Brasil. 12Hospital Internacional de Colombia, Gastroenterology and Rheumatology, Bucaramanga, Colombia. 13Dartmouth Hitchcock Medical Center, Center for Digestive Health- Section of Gastroenterology and Hepatology, New Hampshire, EE. UU.14University of Toronto and Zane Cohen Centre for Digestive Diseases-Mount Sinai Hospital, Department of Medicine, Toronto, Canadá. 15Icahn School of Medicine at Mount Sinai, Division of Pediatric Gastroenterology & Nutrition-Department of Pediatrics, New York, EE. UU.16Icahn School of Medicine at Mount Sinai, Department of Genetics and Genomic Sciences, New York, EE. UU.17Icahn School of Medicine at Mount Sinai, Dr. Henry D, Janowitz Division of Gastroenterology, New York, EE. UU. 18Center for Molecular Prediction of Inflammatory Bowel Disease PREDICT- Aalborg University, Department of Clinical Medicine, Copenhagen, Dinamarca. 19Hospital Beatriz Ângelo, Division of Gastroenterology, Loures, Portugal. 20Hospital da Luz, Division of Gastroenterology, Lisbon, Portugal.
Introducción: El período preclínico de la enfermedad inflamatoria intestinal (EII) ha emergido como una oportunidad para la identificación de factores de riesgo y biomarcadores previos al inicio de la EII. Con el uso de pruebas predictivas se podrían identificar pacientes en riesgo de desarrollar la enfermedad, así como desarrollar intervenciones y tratar de mitigar ese riesgo. Sin embargo, la viabilidad de esto dependería de si las personas en riesgo estarían dispuestas a someterse a pruebas predictivas e intervenciones preventivas.
Métodos: Diseñamos una encuesta electrónica anonimizada en cinco idiomas diferentes (inglés, portugués, español, danés y brasileño) y fue difundida por médicos y asociaciones nacionales de pacientes a familiares de primer grado (FPG) de personas con EII, padres con EII y con hijos sanos, y parejas sanas con al menos un hijo con EII. Los pacientes con EII también podían participar.
Resultados: En total, participaron 817 personas (75% mujeres, 41 ± 12 años) de 28 países diferentes. La mayoría de los participantes (59%) eran padres con EII con hijos sanos. El 50% de las personas con EII tenían enfermedad de Crohn, el 55% recibían agentes biológicos, el 25% tenía antecedentes quirúrgicos y el 62% describía un impacto significativo en su calidad de vida causado por la enfermedad. La mayoría de los participantes (85%) estarían dispuestos a someterse, o a hacer que sus hijos se sometan, a pruebas predictivas, principalmente con pruebas mínimamente invasivas de sangre, saliva o heces o mediante ecografía. La mitad de los participantes aceptaría imágenes de sección transversal y el 38% aceptaría una colonoscopia. Los principales beneficios reconocidos con las pruebas predictivas fueron la posibilidad de iniciar intervenciones preventivas para minimizar el riesgo de desarrollar la EII (74%) y obtener un diagnóstico más temprano (63%). La principal desventaja fue la ansiedad generada por un resultado positivo (57%); el 10% de los participantes no percibió ninguna desventaja. En general, el 98% de los participantes estaría dispuesto a probar o hacer que sus descendientes prueben intervenciones preventivas. Las intervenciones preventivas más aceptadas fueron dejar de fumar (64%), ejercicio físico (81%), modificación/suplementación dietética (86%/71%) y probióticos (79%); con una duración óptima de la intervención de hasta un año (33%). Una eficacia del tratamiento > 80% tenía una aceptabilidad mayor (47%). La mayoría de los participantes consideró aceptable un riesgo de eventos adversos menores de hasta el 10%, aunque el 33% estaría dispuesto a aceptar un riesgo > 40% si se reducía en un 75% el riesgo de desarrollo de la enfermedad.
Conclusiones: Las pruebas predictivas e intervenciones preventivas en la EII serían altamente aceptadas por la población diana, especialmente si son mínimamente invasivas, no farmacológicas y altamente efectivas. Estos resultados ayudarán a informar sobre futuras pruebas de predicción e intervenciones preventivas.