0 - Tumores pardos. Más allá de un curioso nombre
1Hospital Universitario Puerta del Mar, Cádiz, España. 2Hospital San Rafael, Grupo Pascual, Cádiz, España.
Objetivo docente: Describir los principales hallazgos de imagen de esta patología. Elaborar un algoritmo de diagnóstico diferencial que nos ayude a reconocer dichas lesiones según su forma y lugares de presentación. Realizar un breve repaso sobre los principales hallazgos radiológicos del hiperparatiroidismo, causante de su aparición, así como enumerar los datos clave para diferenciar entre primario o secundario, recordando que aunque son menos frecuentes, pueden presentarse en el hiperparatiroidismo secundario, exponiendo un caso de nuestro servicio.
Revisión del tema: Los tumores pardos son lesiones producidas por un aumento actividad osteoclastos por estímulo de la PTH en el contexto de un hiperparatiroidismo primario o secundario. Se produce un remplazamiento local del hueso por tejido fibroso vascularizado (osteítis quística fibrosa) que contiene células gigantes produciéndose depósitos de hemosoderina (de ahí el nombre de tumor pardo). Con el tiempo se produce necrosis y licuefacción con formación de quistes. Desde el punto de vista radiológico se presentan como una lesión osteolítica, de márgenes usualmente poco nítidos, que frecuentemente expande el córtex y se halla rodeada por una fina cáscara de hueso perióstico neoformado. Es necesario realizar un diagnóstico diferencial con otras lesiones líticas únicas y múltiples que contengan células gigantes.
Conclusiones: Ante una lesión lítica, única o múltiple, en el contexto de un hiperparatiroidismo, los tumores pardos debe ser la primera entidad a descartar. Recordar que aunque son poco frecuentes, pueden presentarse en el hiperparatiroidismo secundario. Es importante que el radiólogo conozca las principales características de imagen de estas lesiones para enfocar de manera más acertada el proceso diagnóstico.