Introducción: Datos recientes han demostrado que el proceso inflamatorio subyacente a la colitis ulcerosa (CU) y la enfermedad de Crohn (EC) puede comenzar años antes del diagnóstico. Se han identificado marcadores serológicos y proteómicos en suero durante este período, lo que ofrece la oportunidad de detectar tempranamente las primeras alteraciones inmunitarias. Nuestro objetivo fue determinar si los pacientes con un diagnóstico incidental de CU o EC pueden demostrar una respuesta serológica basada en anticuerpos antimicrobianos en los años anteriores al inicio sintomático de la enfermedad.

Métodos: Realizamos un estudio prospectivo unicéntrico en el que se incluyeron todos los sujetos asintomáticos con diagnóstico de CU o EC durante el programa de cribado de cáncer colorrectal entre octubre de 2013 y febrero de 2022. El diagnóstico de EII se estableció mediante una combinación de datos clínicos, incluida la presencia de hallazgos endoscópicos sugestivos de CU o EC y junto con la confirmación histológica. Se determinaron los anticuerpos ASCA IgA, ASCA IgG (EliA ASCA IgA/IgG, ThermoFisher) y ANCA (EUROPattern, PerkinElmer; EliA IgG, ThermoFisher). Se consideraron positivos por encima de 10 U/mL para ASCA, 3,5 U/mL para ANCA-MPO y 2,00 U/mL para ANCA-PR3. Se utilizó estadística descriptiva.

Resultados: Se incluyeron un total de 26 pacientes, 19 con CU (21% izquierda, 32% extensa; 53% exfumadores), y 7 con EC (57% ileal, 29% colónica; 14% fumadores activos), con una mediana edad de 51 años (RIC, 51-57). Tres pacientes mostraron al menos una prueba positiva (12%). Un paciente (5%) con CU extensa mostró ANCA positivos y desarrolló síntomas 2 meses después del diagnóstico. Dos pacientes (28%) con EC (L2B2 y L1B1) mostraron positividad para ASCA IgA e IgG al diagnóstico, y ambos se han mantenido asintomáticos tras una mediana de 23 meses. Entre los pacientes con serología positiva mostraban una mayor proporción de hombres y exfumadores. Tras una mediana de seguimiento de toda la cohorte de 54 meses (RIC, 26-67), 12 pacientes (46%) desarrollaron enfermedad sintomática.

Conclusiones: Una proporción inferior a la esperada de pacientes con un diagnóstico incidental de EII demuestra una respuesta serológica basada en anticuerpos antimicrobianos, lo que sugiere que esta situación corresponde a las fases iniciales de la EII cuando las alteraciones inmunitarias sistémicas podrían no ser detectables todavía.